The Govern will act in case of leaks in the Flix reservoir

Mon, 17/09/2007

El Periódico

Los municipios que captan agua del Ebro para consumo de boca tendrán alternativas de suministro cuando empiecen los trabajos de descontaminación del pantano de Flix, cuyas primeras obras se pondrán en marcha a principios del próximo año.

Esta es una de las medidas previstas en el plan de emergencias presentado ante representantes de 70 ayuntamientos afectados por el secretario general de Interior i Relacions Institucionals, Joan Boada.

Las poblaciones que se abastecen del Ebro a través de la conexión del Consorci d'Aigues de Tarragona podrán hacerlo de pozos habilitados en Campredó (Tortosa) en caso de escape tóxico al agua del río, y el resto de usuarios dispondrán de pozos particulares o serían abastecidos a través de cisternas.

TODO PREVISTO

Boada aseguró que el plan permitirá prever cualquier eventualidad, aunque se mostró convencido que, de existir, "no durará más de dos o tres días". Está previsto que si se alcanza el segundo nivel de alerta se paralizará la limpieza, y si el episodio fuera considerado de mayor gravedad se restringiría el consumo de agua de boca y se prohibiría el riego y la pesca.
Regantes y pescadores se mostraron preocupados por las garantías que incluirá el plan en caso de que su actividad se viera afectada por daños medioambientales, algo que, según Boada, se compensaría con la declaración de zona catastrófica.

La limpieza se detendrá en el caso de llegar al segundo nivel de alerta.