. Ayer se inaguró en Estocolmo la Semana Mundial del Agua, que reune a 2.400 investigadores de 130 países. En esta edición, que lleva por nombre «Perspectivas y progresos sobre el agua: la lucha por el desarrollo sostenible en un mundo cambiante», se debatirán el cambio climático, las posibilidades para solucionar el problema global del agua y se presentarán políticas y gestiones para enmendar la importante crisis mundial de acceso, empleo y limpieza de los recursos hídricos. Durante ocho días, representantes de los gobiernos de Europa, delegados de Naciones Unidas, científicos, miembros de Ong y responsables de empresas multinacionales, tratarán de plantear una mejor administración de los recursos hídricos, los sistemas de saneamiento, la utilización del agua en los varios ecosistemas y en la alimentación así como las inversiones necesarias para preservar este vital elemento. Más de un 40 por ciento de los participantes proceden de naciones en vías de desarrollo. La semana también ofrece un gran número de seminarios, mesas redondas, debates y sesiones plenarias, así como las solemnes ceremonias de concesión del Premio del Agua de Estocolmo, que será entregado el jueves por el Rey Carlos XVI Gustavo, el «Premio Junior» y el galardón del Agua dedicado a la industria. Uno de los finalistas del «Premio Junior», en el que compiten 27 países, es el español Oleguer Puig Mas, inventor de un sofisticado «Desagüe inteligente» que permite ahorrar agua en los sistemas domésticos de agua caliente. El jefe conservador del gobierno sueco, Fredrik Reinfeldt, recordó que «sin agua, no hay vída», que «mil millones de personas no tienen acceso al agua potable» y que «2,6 mil millones de ciudadanos viven sin desagües en condiciones». Aseguró que «los paises desarrollados tienen el desafío y el deber de hacer que todos los ciudadanos del Planeta Tierra disfruten de ese recurso natural» y apuntó que un 35.3 por ciento de la población suramericana, entre uno y dieciocho años, no tiene agua en su vivienda. Además de pedir que se aumentaran los esfuerzos para combatir el cambio climático «para evitar los graves problemas provocados por la escasez», terminó diciendo que «no basta la actuación de la Unión Europea, sino que tenemos que concienciar a China y a EE.UU. para que tambien se comprometan a emprender acciones».