Tres plantas desaladoras móviles, facilitadas por el Govern balear, suministrarán agua desalada al 90% de la población de Sant Josep, como medida provisional, a la espera de que el Ministerio de Medio Ambiente adjudique las obras de construcción de los depósitos reguladores (sa Carroca y Cala de Bou) para distribuir agua de las plantas de Sant Antoni y Vila a los consumidores de todo el municipio, según explicó ayer en rueda de prensa el alcalde de Sant Josep, José Serra Escandell.
A partir del próximo día 20, sólo una semana antes de las elecciones, las localidades de Sant Jordi, sa Carroca y Cas Rapalls comenzarán a recibir el agua desalada procedente de dos plantas instaladas en la zona de ses Eres. Una tercera potabilizadora de menor producción (100 metros cúbicos diarios) suministrará agua al núcleo urbano de Sant Josep, mientras que en las zonas de Cala de Bou, Cala Tarida y Cala Vedella, este mes recibirán agua procedente de la planta desaladora de Sant Antoni. «Se trata de una noticia muy importante de la que estoy muy contento, porque la mayor parte de los ciudadanos de Sant Josep recibirán ahora agua de gran calidad, a excepción de es Cubells, es Porroig y sa Caleta, cuyos residentes deberán esperar a la ejecución de las obras de distribución que prevé el Gobierno central», explicó ayer el alcalde de Sant Josep.
Serra Escandell destacó los «numerosos» viajes efectuados a Palma y Madrid por él mismo, el concejal de Urbanismo, Josep Marí, Reganes, y técnicos de Aqualia para conocer de primera mano la evolución de los proyectos de construcción de los depósitos.