Protests stop dam workings in one of the deepest gorges in the world
Thu, 19/04/2007
La espectacular garganta china de Hutiao, una de las más profundas del mundo, quedará excluida de obras hidroeléctricas en el río Jinsha tras dos años de protestas de ecologistas y vecinos, informó hoy el diario "South China Morning Post".
Ubicada en la turística provincia meridional de Yunnan, la "Garganta del Salto del Tigre" (Hutiao) es un espectacular y angosto paso de 17 kilómetros de largo por el que fluye el Jinsha, principal afluente del Yangsté y cuna de valiosas reservas botánicas y animales del país, además de hogar de varias minorías étnicas.
En una entrevista con el rotativo de Hong Kong, el ministro de Recursos Hídricos, Wang Shucheng, afirmó que "es bastante probable que la presa no se construya nunca allí" pues causaría "un daño irreparable al prístino entorno, así como a la historia y cultura única de las minorías étnicas que lo habitan".
"Puedo decirle como experto en energía hidroeléctrica (más que como ministro) que el proyecto no se construirá", redundó el ministro, en las primeras declaraciones oficiales sobre la polémica construcción de la presa, de 276 metros de altura y con una capacidad de 88.300 millones de kilovatios al año.
El proyecto hidroeléctrico, anunciado hace varios años, había levantado las airadas críticas de grupos ecologistas nacionales e internacionales, así como de los cerca de 100.000 vecinos amenazados con ser desplazados.
Las consecuencias medioambientales a largo plazo de la obra eran "impredecibles", con posibles terremotos y desprendimientos de tierra que podrían impactar en la central hidroeléctrica y "dejarla inservible", argumentaban los ecologistas.
La presa en la "Garganta del Salto del Tigre" formaba parte de un plan para levantar ocho obras hidroeléctricas en el curso medio del Jinsha y desviar agua hasta el próspero centro de Yunnan, cuyos ríos y lagos sufren una acusada contaminación en una de las provincias más bellas del país asiático.
China se ha embarcado en la construcción de grandes proyectos hidroeléctricos, entre ellos el de las Tres Gargantas (la mayor presa del mundo) para paliar sus carencias de energéticas y, pese a la opinión de los ecologistas, incluye esta energía dentro de las "limpias".
Ubicada en la turística provincia meridional de Yunnan, la "Garganta del Salto del Tigre" (Hutiao) es un espectacular y angosto paso de 17 kilómetros de largo por el que fluye el Jinsha, principal afluente del Yangsté y cuna de valiosas reservas botánicas y animales del país, además de hogar de varias minorías étnicas.
En una entrevista con el rotativo de Hong Kong, el ministro de Recursos Hídricos, Wang Shucheng, afirmó que "es bastante probable que la presa no se construya nunca allí" pues causaría "un daño irreparable al prístino entorno, así como a la historia y cultura única de las minorías étnicas que lo habitan".
"Puedo decirle como experto en energía hidroeléctrica (más que como ministro) que el proyecto no se construirá", redundó el ministro, en las primeras declaraciones oficiales sobre la polémica construcción de la presa, de 276 metros de altura y con una capacidad de 88.300 millones de kilovatios al año.
El proyecto hidroeléctrico, anunciado hace varios años, había levantado las airadas críticas de grupos ecologistas nacionales e internacionales, así como de los cerca de 100.000 vecinos amenazados con ser desplazados.
Las consecuencias medioambientales a largo plazo de la obra eran "impredecibles", con posibles terremotos y desprendimientos de tierra que podrían impactar en la central hidroeléctrica y "dejarla inservible", argumentaban los ecologistas.
La presa en la "Garganta del Salto del Tigre" formaba parte de un plan para levantar ocho obras hidroeléctricas en el curso medio del Jinsha y desviar agua hasta el próspero centro de Yunnan, cuyos ríos y lagos sufren una acusada contaminación en una de las provincias más bellas del país asiático.
China se ha embarcado en la construcción de grandes proyectos hidroeléctricos, entre ellos el de las Tres Gargantas (la mayor presa del mundo) para paliar sus carencias de energéticas y, pese a la opinión de los ecologistas, incluye esta energía dentro de las "limpias".