CHG will restore a mill and a tower before building Siles dam
Wed, 18/04/2007
Integrará los dos monumentos en el conjunto paisajístico del embalse Los trabajos arqueológicos retrasarán las obras MARÍA JOSÉ ÁLVAREZ/JAÉN Presentación el viernes pasado de la presa de Siles a los beneficiarios con la ministra Narbona. /IDEAL CLAVES DE LA PRESA F Abastecimiento: La presa abastecerá de agua a los municipios deficitarios de la comarca (Beas de Segura, Benatae, Génave, Puente de Génave, Segura de la Sierra, Torres de Albánchez y Villarrodrigo) con una población total de 12.800 habitantes.
F Protección: La presa contribuirá a proteger contra avenidas a la zona, en especial en Puerta de Segura y Puente de Génave.
F Zona regable: Se incrementará y mejorará la zona regable, que afectará a 3.500 hectáreas en Benatae, Orcera, Puente de Génave, Puerta de Segura, Siles y Torres de Albanchez.
F Energía: Se creará una planta de nergía hidroeléctrica. Se podrán producir 3,42 Gwh al año.
F El proyecto: La presa consiste en una infraestructura hidráulica situada en la cerrada del Cortijo de Cantalar, a unos 400 metros aguas abajo de la confluencia del arroyo de Los Molinos con el río Guadalimar y la consecución de un embalse asociado de 28 hectómetros cúbicos de capacidad útil (su nivel máximo será de 30,5 hectómetros cúbicos) y una superficie a su nivel máximo normal de 213,40 hectáreas.
F Materiales: La presa es de tipo materiales sueltos, con planta recta de 287,40 metros de longitud y una altura máxima sobre el cauce de 55 metros, presentando un núcleo central de material arcilloso.
Justo al lado de donde irá el embalse de la presa de Siles hay dos monumentos en ruinas, las torres de Morles y el Molino del Cantalar. Se prevé que la orilla el agua embalsada llegue hasta ellos, lo que podría inundarlos. Para evitarlo, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha decidido rehabilitarlos y ponerlos en valor. Los integrará en el proyecto paisajístico de la presa y serán un atractivo turístico más para el municipio de Siles.
La propuesta se la hizo el ingeniero jefe de la CHG en Jaén, José Martín, a la Ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, durante su visita a Jaén el pasado fin de semana. Narbona aceptó de buen grado la propuesta y ya se prepara el proyecto, integrado en las actuaciones arqueológicas y medioambientales en la zona. Costarán unos 9 millones de euros, que se añadirán a los más de 21,1 que se prevén para la presa. «Es un proyecto muy bonito, que contará con parques y jardines y zonas de recreo», apunta José Martín. El lado negativo de esta iniciativa, que la Confederación hará y pagará «por voluntad y no por obligación», es que las obras para la tan esperada presa de Siles se retrasarán con toda probabilidad. Martín anuncia que, además de estos dos monumentos, en la zona se prevé encontrar más restos arqueológicos que seguramente también alargarán más los trabajos.
A pesar de esto, el ingeniero asegura que lo importante es que la presa ya es un hecho y que, con un proyecto publicado en el BOE y dinero sobre la mesa «ya no hay marcha atrás».
Los monumentos
El Molino del Cantalar o de Doña Ramona está construido al pie de un gran peñasco rocoso a orillas del río Guadalimar. Se calcula que se levantó en la época de la Reconquista y que volvió a reconstruirse y utilizarse al repoblarse la zona ya en épocas posteriores. El cárcavo que está excavado en la roca viva tenía dos rodeznos y en la actualidad sólo quedan restos de uno con rueda metálica de época moderna. La alimentación se hacía a través de una acequia que deriva del agua del río con un volumen importante que, a pesar del pequeño desnivel, permitía el normal funcionamiento de la ruedas. La salida de agua se realizaba por dos bocas abovedadas. Por su parte, las torres o castillo de Morles es de autoría cristiana y, junto al de Pontihonda, vigilaba el ramal que desde Siles se dirigía a Bujaraiza. A pesar que de él apenas quedan unas cuantas piedras, está declarado Bien de Interés Cultural.
El ingeniero jefe de la Confederación explica que su puesta en valor será una forma de contribuir al desarrollo turístico de Siles. Este es uno de los preceptos que se incorporan en el proyecto de la presa de Siles, adjudicada a la empresa Sacyr Vallehermoso. Para Martín, el retraso que puedan sufrir las obras debido a la adecuación arqueológica de la zona «es lo de menos».
«Lo mismo da ya que, en vez de que sean tres años sean cuatro, ya que lo primordial es que el proyecto esté aprobado y que, gobierne quien gobierne, se llevará a cabo», añade. Resalta que su construcción ayudará a paliar la sequía de la zona y que otorgará cerca de 18 hectómetros cúbicos de riego para el olivar, una cifra importante si se tiene en cuenta que ahora se establece un riego extraordinario para toda la provincia de no más de 25 hectómetros cúbicos.
El impulso del Activa
El proyecto de construcción de las presa de Siles, incluido entre las actuaciones del programa Activa Jaén, está viendo acelerado su desarrollo en los últimos meses, después de años de inactividad desde que inició su tramitación en 1.987. El 2 de junio de 2006 el Consejo de Ministros aprobó la actualización del proyecto y la construcción de la presa, y en diciembre de 2005 ya había sido declarado «compatible con el medio ambiente». Las obras están ya adjudicadas y los trabajos previos han comenzado.
F Protección: La presa contribuirá a proteger contra avenidas a la zona, en especial en Puerta de Segura y Puente de Génave.
F Zona regable: Se incrementará y mejorará la zona regable, que afectará a 3.500 hectáreas en Benatae, Orcera, Puente de Génave, Puerta de Segura, Siles y Torres de Albanchez.
F Energía: Se creará una planta de nergía hidroeléctrica. Se podrán producir 3,42 Gwh al año.
F El proyecto: La presa consiste en una infraestructura hidráulica situada en la cerrada del Cortijo de Cantalar, a unos 400 metros aguas abajo de la confluencia del arroyo de Los Molinos con el río Guadalimar y la consecución de un embalse asociado de 28 hectómetros cúbicos de capacidad útil (su nivel máximo será de 30,5 hectómetros cúbicos) y una superficie a su nivel máximo normal de 213,40 hectáreas.
F Materiales: La presa es de tipo materiales sueltos, con planta recta de 287,40 metros de longitud y una altura máxima sobre el cauce de 55 metros, presentando un núcleo central de material arcilloso.
Justo al lado de donde irá el embalse de la presa de Siles hay dos monumentos en ruinas, las torres de Morles y el Molino del Cantalar. Se prevé que la orilla el agua embalsada llegue hasta ellos, lo que podría inundarlos. Para evitarlo, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha decidido rehabilitarlos y ponerlos en valor. Los integrará en el proyecto paisajístico de la presa y serán un atractivo turístico más para el municipio de Siles.
La propuesta se la hizo el ingeniero jefe de la CHG en Jaén, José Martín, a la Ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, durante su visita a Jaén el pasado fin de semana. Narbona aceptó de buen grado la propuesta y ya se prepara el proyecto, integrado en las actuaciones arqueológicas y medioambientales en la zona. Costarán unos 9 millones de euros, que se añadirán a los más de 21,1 que se prevén para la presa. «Es un proyecto muy bonito, que contará con parques y jardines y zonas de recreo», apunta José Martín. El lado negativo de esta iniciativa, que la Confederación hará y pagará «por voluntad y no por obligación», es que las obras para la tan esperada presa de Siles se retrasarán con toda probabilidad. Martín anuncia que, además de estos dos monumentos, en la zona se prevé encontrar más restos arqueológicos que seguramente también alargarán más los trabajos.
A pesar de esto, el ingeniero asegura que lo importante es que la presa ya es un hecho y que, con un proyecto publicado en el BOE y dinero sobre la mesa «ya no hay marcha atrás».
Los monumentos
El Molino del Cantalar o de Doña Ramona está construido al pie de un gran peñasco rocoso a orillas del río Guadalimar. Se calcula que se levantó en la época de la Reconquista y que volvió a reconstruirse y utilizarse al repoblarse la zona ya en épocas posteriores. El cárcavo que está excavado en la roca viva tenía dos rodeznos y en la actualidad sólo quedan restos de uno con rueda metálica de época moderna. La alimentación se hacía a través de una acequia que deriva del agua del río con un volumen importante que, a pesar del pequeño desnivel, permitía el normal funcionamiento de la ruedas. La salida de agua se realizaba por dos bocas abovedadas. Por su parte, las torres o castillo de Morles es de autoría cristiana y, junto al de Pontihonda, vigilaba el ramal que desde Siles se dirigía a Bujaraiza. A pesar que de él apenas quedan unas cuantas piedras, está declarado Bien de Interés Cultural.
El ingeniero jefe de la Confederación explica que su puesta en valor será una forma de contribuir al desarrollo turístico de Siles. Este es uno de los preceptos que se incorporan en el proyecto de la presa de Siles, adjudicada a la empresa Sacyr Vallehermoso. Para Martín, el retraso que puedan sufrir las obras debido a la adecuación arqueológica de la zona «es lo de menos».
«Lo mismo da ya que, en vez de que sean tres años sean cuatro, ya que lo primordial es que el proyecto esté aprobado y que, gobierne quien gobierne, se llevará a cabo», añade. Resalta que su construcción ayudará a paliar la sequía de la zona y que otorgará cerca de 18 hectómetros cúbicos de riego para el olivar, una cifra importante si se tiene en cuenta que ahora se establece un riego extraordinario para toda la provincia de no más de 25 hectómetros cúbicos.
El impulso del Activa
El proyecto de construcción de las presa de Siles, incluido entre las actuaciones del programa Activa Jaén, está viendo acelerado su desarrollo en los últimos meses, después de años de inactividad desde que inició su tramitación en 1.987. El 2 de junio de 2006 el Consejo de Ministros aprobó la actualización del proyecto y la construcción de la presa, y en diciembre de 2005 ya había sido declarado «compatible con el medio ambiente». Las obras están ya adjudicadas y los trabajos previos han comenzado.