Mini-colonies and zebra mussels, isolated in several supply devices
Thu, 15/02/2007
Los agentes de protección de la naturaleza (APN) del Gobierno de Aragón han encontrado mejillones cebra aislados o formando minicolonias en varios abastecimientos para uso humano o industrial que se nutren del Canal Imperial. Después de que el pasado mes de enero el Departamento de Medio Ambiente revisara 25 tomas de agua sin encontrar ningún ejemplar adulto de esta especie invasora, una nueva prospección en las mismas captaciones ha permitido detectar la plaga en la factoría de General Motors, en la Base Aérea, en Pla-Za y en las redes municipales de Figueruelas y Boquiñeni.
La búsqueda de mejillones adultos comenzó el pasado martes y durará hasta mañana viernes. A mediodía de ayer, dos APN acompañados de un biólogo ya habían inspeccionado aproximadamente la mitad de los 25 abastecimientos previstos.
Curiosamente, y por poner otros ejemplos más positivos, en las captaciones de Pinseque y de La Muela no se vio ni un solo molusco, aunque también es cierto que para tener la certeza absoluta de que había ninguno hubiera sido necesario secar por completo el Canal y vaciar del todo los depósitos -algo que no se está haciendo en ningún punto-.
Una vez concluida esa tarea, la Dirección General de Medio Natural redactará un informe que será remitido al Instituto Aragonés del Agua -responsable de los sistemas de abastecimiento- para que tome las primeras medidas preventivas. Según el Departamento de Medio Ambiente, esas actuaciones serán "sencillas" y no conllevarán un gran gasto.
El jefe del Servicio de Biodiversidad del Gobierno de Aragón, Manuel Alcántara, aseguró que, pese a los nuevos hallazgos, la situación actual de la plaga es "la prevista". "Es verdad que por primera vez hemos encontrado mini colonias de 20 o 30 ejemplares, pero es muy probable que en diciembre ya estuvieran ahí -opinó-. Entonces sólo revisamos los puntos de toma, pero ahora estamos haciendo una revisión más profunda que incluye las cañerías y los depósitos de agua".
Los nuevos hallazgos.
Siempre según la información facilitada por la DGA, en las instalaciones que General Motors tiene en Figueruelas se encontraron tres o cuatro mejillones cebra dispersos y dos o tres pequeñas colonias con 20 o 25 animales. En las redes municipales de ese mismo municipio aparecieron algunos ejemplares sueltos.
Los agentes de protección de la naturaleza hallaron otra treintena de moluscos en un depósito para el abastecimiento de Boquiñeni, y en la captación de agua para Pla-Za había un solo mejillón. Por último, también se detectó la plaga en la Base Aérea de Zaragoza, donde apareció un ejemplar en una tajadera y otra treintena en una balsa.
Alcantara insistió en que la invasión del Canal Imperial se encuentra en una fase "inicial" que todavía permite poner en marcha "medidas efectivas". "Aún no se han encontrado grandes poblaciones como las que hay en el embalse de Ribarroja, y al tratarse de espacios reducidos y cerrados se puede retrasar el avance del mejillón cebra", afirmó.
Otros expertos consultados por HERALDO coincidieron con esa última apreciación, aunque también quisieron dejar claro que, antes o después, la expansión del mejillón cebra desbordará los métodos mecánicos de limpieza. "Cuando la plaga apareció en Ribarroja estaba igual que ahora en el Canal, pero al año siguiente el embalse estaba totalmente colonizado", recordaron.
Posibles medidas.
El responsable del Servicio de Biodiversidad señaló que las medidas que se tomen a partir de ahora para evitar afecciones del molusco invasor en los sistemas de abastecimiento del Canal dependerán del Instituto Aragonés del Agua y de las reuniones que mantenga con los ayuntamientos y las instalaciones afectadas. No obstante, también adelantó que de momento no hace falta afrontar grandes inversiones.
"Dado el alcance actual de la plaga, no sería lógico matar moscas a cañonazos -explicó Manuel Alcántara-. En principio bastará con medidas de gestión como vaciar por completo los depósitos municipales durante dos semanas al año o clorar el agua en el momento en el que entre en las redes municipales".
Esta última actuación ya la puso en marcha el Ayuntamiento de Zaragoza, que adelantó el tratamiento de los caudales captados del Canal Imperial incorporándoles el cloro justo en la toma de agua. De esta forma, se intenta evitar que el mejillón cebra colonice esos primeros metros que transcurren hasta el momento de la cloración.
Zaragoza se libra de momento.
Hasta el momento, en la red municipal de abastecimiento de la capital aragonesa no se han detectado mejillones cebra adultos. El personal del Departamento de Medio Ambiente volverá a revisar las instalaciones entre hoy y mañana, pero fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza confirmaron ayer que no ha habido ninguna novedad.
Hasta esta semana, y en lo que se refiere al Canal Imperial, sólo habían aparecido mejillones cebra adultos en dos depósitos de El Burgo de Ebro -uno municipal y otro privado- y en el propio lecho de este cauce a la altura del término municipal de Grisén.
La búsqueda de mejillones adultos comenzó el pasado martes y durará hasta mañana viernes. A mediodía de ayer, dos APN acompañados de un biólogo ya habían inspeccionado aproximadamente la mitad de los 25 abastecimientos previstos.
Curiosamente, y por poner otros ejemplos más positivos, en las captaciones de Pinseque y de La Muela no se vio ni un solo molusco, aunque también es cierto que para tener la certeza absoluta de que había ninguno hubiera sido necesario secar por completo el Canal y vaciar del todo los depósitos -algo que no se está haciendo en ningún punto-.
Una vez concluida esa tarea, la Dirección General de Medio Natural redactará un informe que será remitido al Instituto Aragonés del Agua -responsable de los sistemas de abastecimiento- para que tome las primeras medidas preventivas. Según el Departamento de Medio Ambiente, esas actuaciones serán "sencillas" y no conllevarán un gran gasto.
El jefe del Servicio de Biodiversidad del Gobierno de Aragón, Manuel Alcántara, aseguró que, pese a los nuevos hallazgos, la situación actual de la plaga es "la prevista". "Es verdad que por primera vez hemos encontrado mini colonias de 20 o 30 ejemplares, pero es muy probable que en diciembre ya estuvieran ahí -opinó-. Entonces sólo revisamos los puntos de toma, pero ahora estamos haciendo una revisión más profunda que incluye las cañerías y los depósitos de agua".
Los nuevos hallazgos.
Siempre según la información facilitada por la DGA, en las instalaciones que General Motors tiene en Figueruelas se encontraron tres o cuatro mejillones cebra dispersos y dos o tres pequeñas colonias con 20 o 25 animales. En las redes municipales de ese mismo municipio aparecieron algunos ejemplares sueltos.
Los agentes de protección de la naturaleza hallaron otra treintena de moluscos en un depósito para el abastecimiento de Boquiñeni, y en la captación de agua para Pla-Za había un solo mejillón. Por último, también se detectó la plaga en la Base Aérea de Zaragoza, donde apareció un ejemplar en una tajadera y otra treintena en una balsa.
Alcantara insistió en que la invasión del Canal Imperial se encuentra en una fase "inicial" que todavía permite poner en marcha "medidas efectivas". "Aún no se han encontrado grandes poblaciones como las que hay en el embalse de Ribarroja, y al tratarse de espacios reducidos y cerrados se puede retrasar el avance del mejillón cebra", afirmó.
Otros expertos consultados por HERALDO coincidieron con esa última apreciación, aunque también quisieron dejar claro que, antes o después, la expansión del mejillón cebra desbordará los métodos mecánicos de limpieza. "Cuando la plaga apareció en Ribarroja estaba igual que ahora en el Canal, pero al año siguiente el embalse estaba totalmente colonizado", recordaron.
Posibles medidas.
El responsable del Servicio de Biodiversidad señaló que las medidas que se tomen a partir de ahora para evitar afecciones del molusco invasor en los sistemas de abastecimiento del Canal dependerán del Instituto Aragonés del Agua y de las reuniones que mantenga con los ayuntamientos y las instalaciones afectadas. No obstante, también adelantó que de momento no hace falta afrontar grandes inversiones.
"Dado el alcance actual de la plaga, no sería lógico matar moscas a cañonazos -explicó Manuel Alcántara-. En principio bastará con medidas de gestión como vaciar por completo los depósitos municipales durante dos semanas al año o clorar el agua en el momento en el que entre en las redes municipales".
Esta última actuación ya la puso en marcha el Ayuntamiento de Zaragoza, que adelantó el tratamiento de los caudales captados del Canal Imperial incorporándoles el cloro justo en la toma de agua. De esta forma, se intenta evitar que el mejillón cebra colonice esos primeros metros que transcurren hasta el momento de la cloración.
Zaragoza se libra de momento.
Hasta el momento, en la red municipal de abastecimiento de la capital aragonesa no se han detectado mejillones cebra adultos. El personal del Departamento de Medio Ambiente volverá a revisar las instalaciones entre hoy y mañana, pero fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza confirmaron ayer que no ha habido ninguna novedad.
Hasta esta semana, y en lo que se refiere al Canal Imperial, sólo habían aparecido mejillones cebra adultos en dos depósitos de El Burgo de Ebro -uno municipal y otro privado- y en el propio lecho de este cauce a la altura del término municipal de Grisén.