Rainfalls will be reduced in 40% in southern Spain during this century

Wed, 14/02/2007

Diario de Noticias de Navarra

Las precipitaciones se reducirán hasta un 40% en la mitad sur de la Península al final del presente siglo, y aunque de una forma más suave, ese descenso será también acusado en la mitad norte.

Así consta en el informe elaborado por científicos españoles, que han regionalizado los posibles efectos del cambio climático a partir de diferentes escenarios basados en la evolución que pueden seguir las emisiones de gases de efecto invernadero y en el desarrollo económico y social de cada región.

El informe fue presentado ayer a las comunidades autónomas y a los agentes económicos y sociales representados en el Consejo Nacional del Clima.

Concluye el estudio que las temperaturas subirán progresivamente durante las próximas décadas, y el peor de los escenarios posibles (el de mayor emisiones de gases de efecto invernadero) apunta a que las máximas experimentarán al final del siglo un aumento de entre 5 y 8 grados en todas las regiones del interior, y una subida más atemperada en las regiones próximas al litoral.

Un escenario de emisiones más respetuoso con el medio ambiente rebaja ese aumento de las temperaturas máximas en dos grados.

El estudio señala que la nubosidad habrá descendido en todas las regiones españolas (en algunos meses ese descenso puede llegar a ser de hasta el 40%), y que la humedad bajará de forma considerable también en prácticamente toda la Península, sobre todo durante primavera y verano.

irregularidad El informe, que ha sido realizado durante los últimos meses en el marco del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático, apunta que el aumento previsto de las temperaturas, tanto de las máximas como de las mínimas, no es uniforme a lo largo del año y los cambios más significativos se producirán durante los meses de verano.

Aunque en el caso de las precipitaciones los datos no son tan concluyentes como en el de las temperaturas, todos los modelos coinciden en que se reducirán en todas las regiones peninsulares y en Baleares, y que esos descensos pueden ser de hasta el 40% en la mitad sur.

En el informe regionalizado se detallan las proyecciones de temperatura, de precipitaciones y de humedad en tres periodos diferentes a lo largo del siglo, (2011-2040, 2041-2070 y 2071-2099).

Todos los modelos en los que los investigadores españoles del Instituto Nacional de Meteorología han basado su estudio coinciden en que el aumento de las temperaturas máximas será muy acusado en las comunidades del interior peninsular y en las zonas interiores de las regiones mediterráneas y cantábricas.

Ese incremento, según los modelos más pesimistas, puede ser de hasta ocho grados en las comunidades de Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, La Rioja, y en grandes áreas de Andalucía, Galicia, Aragón, Asturias, Cantabria, Navarra y el País Vasco.

Los modelos más optimistas prevén que los incrementos serán de unos 3,5 grados centígrados en todas las comunidades cantábricas y mediterráneas, y de 4,5 grados en todas las comunidades del interior.

Respecto a las precipitaciones medias, el peor escenario posible apunta hacia un descenso de hasta el 40% de esas precipitaciones en la mitad sur y del 20% en la mitad norte, excepto en la cornisa cantábrica de Galicia y Asturias, donde ese descenso rondará el 10%. >efe

las consecuencias

l El cambio climático agravará los conflictos armados. El efecto que tendrá el cambio climático sobre los países pobres, como los de la cuenca sur del Mediterráneo, en donde interactuarán la falta de recursos hídricos y el crecimiento demográfico, potenciará los flujos migratorios en esos territorios y los problemas de seguridad y los conflictos armados. Así lo manifestó ayer el investigador Carlos Duarte, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

l Aumento del nivel del mar y el mayor calentamiento de los últimos 10.000 años. El aumento de las temperaturas provocará un aumento del nivel del mar de hasta 59 centímetros. Además, el calentamiento de hasta 8 grados será el mayor de los últimos 10.000 años.

l Descenso del turismo. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, recordó ayer que el cambio climático no conoce límites y la lucha debe involucrar a todas las regiones. Se refirió en ese sentido a la importancia que el turismo de nieve tiene en varias comunidades y al impacto que pueden padecer las estaciones como consecuencia de un descenso de las precipitaciones. Además, un incremento acusado de temperaturas provocará la búsqueda de otros destinos por parte de los turistas que veranean en la Península.