El río del Con se desbordó ayer a su paso por Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) y los patos, los cisnes y las ocas salieron a pasear por la ciudad. El frente de lluvias que penetró ayer en Galicia inundó numerosos garajes y bajos y obligó a cortar varias vías secundarias.
Se quedaron sin carreteras de paso las poblaciones costeras de la Ría de Arousa, concretamente en los municipios de Corrubedo, Ribeira, Boiro, Illa de Arousa, Vilanova y Vilagarcía.
El núcleo más activo del frente se registró sobre las 12.00 horas y tuvo una duración aproximada de 15 minutos que estuvo acompañado por cortes de corriente eléctrica, según informó la Xunta a Europa Press.
Las lluvias se mantuvieron activas en Vilagarcía de Arousa y Catoira, donde, al cierre de esta edición, aún seguían cortadas tres carreteras de la red secundaria.
Para atender los problemas causados por el agua fueron movilizados medios de la Policía Local, Guardia Civil, bomberos, agrupaciones de voluntarios y de Protección Civil, los Grupos Municipales de Intervención Rápida (Grumir) y varias autobombas contra incendios forestales.
En cualquier caso, las precipitaciones registradas no superaron los umbrales de la normalidad, según las mismas fuentes. Las mayores cantidades de agua fueron recogidas en Corrubedo, con 48 litros por metro cuadrado, así como en Corón (Vilagarcía), con 32 litros.
Anoche entró un nuevo frente de precipitaciones con nivel de alerta amarillo.