Climatic change will cost 200.000 millions to Spain

Sun, 05/11/2006

La Razón

El clima en la Tierra nunca ha sido estático. Sin embargo, la abrupta variación térmica registrada durante el siglo XX, como consecuencia de la actividad humana, marcó un antes y un después. Temperaturas, lluvias, nivel del mar, todo, aunque de forma lenta, ha variado. Durante el siglo XX, la temperatura mundial se ha incrementado en 0,6º C. En el caso de España, los termómetros registran hoy un 1,5º C más de temperatura, según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático; y todo apunta a que en un futuro a medio plazo sea aún si cabe peor. Los riesgos asociados a los efectos del calentamiento global afectarán, y mucho, a la agricultura, al turismo, la biodiversidad, a la salud... y, por tanto, al bolsillo. Según un informe publicado por el Gobierno británico, la amenaza del cambio climático supondrá una pérdida del 20 por ciento del PIB mundial. Este descenso en la economía global causaría en España miles y miles de millones de pérdidas. «El PIB español ascenderá, según las previsiones, a un billón de euros en 2007. Si se extrapolara la amenaza de pérdida económica mundial de este estudio a nuestro país, España tendría una pérdida de 200.000 millones de euros», explica Juan Iranzo, director del Instituto de Estudios Económicos (IEE). Uno de los más afectados Además, hay que tener en cuenta que «España es uno de los países que más sufrirá los efectos del cambio climático, por su posición geográfica», asegura Antonio Ruiz de Elvira, del departamento de Física de la Universidad de Alcalá de Henares. Es decir, que las pérdidas económicas serán aún peores. No obstante, «parece que serán las latitudes altas del hemisferio boreal las más afectadas», augura Javier Martín-Vide, catedrático de Geografía Física de la Universidad de Barcelona. Martín-Vide, uno de los autores del informe «Impactos del cambio climático en España», asegura que «España, al igual que el resto de regiones mediterráneas, también se verá influida. Los veranos del interior peninsular serán más cálidos y la precipitación primaveral se reducirá. Parece que Canarias será la región menos dañada». «El cambio climático perjudicará a la agricultura y al sector turístico. Los costes serán tremendos en estos sectores», manifiesta Teresa Ribera, directora de la Oficina Española de Cambio Climático, del Ministerio de Medio Ambiente. Y no es para menos, ya que «el turismo supone un 12 por ciento del PIB de España y la agricultura, un 3,5 por ciento», asegura el director general del IEE. «La agricultura de secano se verá afectada por la elevación térmica y la reducción de la lluvia. Para bien y para mal, se alargará la temporada turística estival hasta bien entrado el otoño. Es decir, que se desestacionalizará, aunque el verano será excesivamente caluroso para los turistas procedentes del norte de Europa», explica el catedrático de Geografía Física. El transporte también será uno de los sectores más afectados por el cambio climático. «La quema excesiva de combustibles fósiles -continúa Martín-Vide- es una de las causas del efecto invernadero, que produce el calentamiento global, este fenómeno obliga a reducir su uso, por lo que los desplazamientos se encarecerán». Datos contradictorios Otro de los riesgos del cambio climático es la subida del nivel del mar. En el siglo XX, éste ha crecido de 10 a 12 centímetros, según el último informe del IPCC. Esto se debe, según los expertos, a la expansión de los océanos cada vez más templados. No obstante, un estudio de la NASA asegura que la temperatura de la capa más superficial del mar, a pesar de tener mayor temperatura, había sufrido un ligero enfriamiento desde 2003, y que, a pesar de este hecho, los niveles del mar no habían descendido. El riesgo de inundación, por tanto, continúa y es alarmante en aquellas regiones costeras situadas por debajo del nivel del mar o en ciudades como Londres, Nueva York o Tokio, según el informe del Gobierno británico. En el caso de España, el ascenso del nivel marino erosionará e inundará zonas costeras. «Cada centímetro de subida del nivel del mar equivale a un metro de regresión del nivel del mar sobre la tierra. Es previsible que las marismas, el Delta del Ebro, la vertiente sureste mediterránea, como La Manga del Mar Menor, sufran inundaciones», alerta la directora de la Oficina Española de Cambio Climático. «La subida del nivel del mar inundará Huelva, el Guadalquivir hasta Sevilla, Cádiz, Valencia y la costa mediterránea», asegura Ruiz de Elvira. Aunque los más afectados «serán los propietarios de viviendas hasta una altura de seis metros, el equivalente a dos pisos, ubicadas en primeras líneas de playa. Toda esta gente perderá su inversión». Migraciones El crecimiento del nivel del mar podría, según el informe del Gobierno británico, provocar el desplazamiento de 200 millones de personas, que pasarían a convertirse en refugiados ambientales. «Probablemente España se convertirá en un país más receptor que exportador de refugiados ambientales, por motivos económicos», prevé el catedrático. Similar argumento sostiene Ruiz de Elvira que cree que «España será un país de refugiados ambientales, puesto que los mayores problemas del calentamiento global ocurrirán en la zona subsahariana». Las sequías, las inundaciones, el incremento de temperaturas y otros fenómenos meteorológicos adversos afectarán también a la biodiversidad. Las especies que se enfrentarán a un mayor riesgo de extinción serán aquellas «especies de ambientes fríos y las caducifolias», asegura Martín-Vide. La flora y la fauna son características de cada región. En el caso de la fauna ibérica, ésta se desplazará hacia el norte o hacia mayores altitudes. Visión catastrofista No obstante, para Iranzo, el informe del economista Nicholas Stern responde a una visión «catastrofista». «En épocas interglaciales había más CO2 debido a las erupciones volcánicas que hay hoy. Además, también hay que recordar que los equipos actuales son hoy más perfectos que los que había hace años y, por tanto, logran registrar mejor los datos y variables», añade Iranzo, tras anunciar que dentro de unas semanas se publicará un estudio elaborado por expertos en esta materia en el que, según explica, se pone en evidencia que «no está demostrado que haya un recalentamiento del planeta y menos que haya sido provocado por la mayor presencia de CO2». La pérdida, humana, ambiental y económica que prevén los últimos estudios podría reducirse. La directora de la Oficina Española de Cambio Climático recuerda que, «según el informe británico, se podrían reducir hasta un 30 por ciento las emisiones de CO2 mejorando la eficiencia energética