FCC explores purchases in USA to disembark in the water business.
Mon, 09/10/2006
Estados Unidos, siguiente parada para adquisiciones. FCC quiere potenciar su filial de gestión de agua, Aqualia, y busca reforzarla con compras en uno de los mercados más desarrollados en este negocio. En el foco están empresas con tamaño, cotizadas y en áreas como California o Tejas.
Aunque la constructora que controla Esther Koplowitz ha invertido unos 5.000 millones en compras en el último año y medio; FCC no cierra los ojos a nuevas operaciones. Así lo transmiten fuentes de la empresa, que revelan planes de adquisición para fortalecer una de las divisiones con más potencial del grupo, Aqualia, la filial de gestión de agua.
Por imperativo del plan estratégico aprobado en abril de 2005, esta división, como el resto, está obligada a crecer en el exterior. El objetivo para 2008 es que entre un 35% y un 40% de la facturación del grupo provenga del fuera. A ello tienen que contribuir todas las filiales. Con unos ingresos previstos para este año de 700 millones (lo que supone crecer un 25%), Aqualia estima que puede rondar los 300 millones generados fuera en el plazo fijado. Pero crecer sólo por la vía de ganar contratos para abrir nuevos mercados es complicado ya que el ritmo es mucho más lento. Tras Italia, Portugal, Argelia, China y la República Checa, donde ya tiene actividad, la división mira ahora a tres zonas clave: EE UU, México, y Europa del Este, con Polonia, Rumanía y Eslovaquia como prioridad. Entrar en la primera de ellas supone un plus ya que estados como California han exportado el modelo de gestión integral del agua, que constituye la apuesta de Aqualia (desde gestión de servicios públicos del agua a infraestructuras hidráulicas, para riego, plantas de tratamiento y uso industrial). Este estado y Tejas están en el punto de mira de la filial que dirige Fernando Moreno. El perfil de empresa deseada es aquella que aporte tamaño, algo mayor que la checa SmVAK que FCC compró en abril pasado por 248 millones, hasta ahora la única adquisición en este negocio. Otro de los atractivos es que sea cotizada y con un núcleo de accionistas concentrado para facilitar la transacción. Aunque después del costoso plan de compras de FCC, las operaciones se estudian desde otra perspectiva financiera. Si bien, si realmente supone una oportunidad la inversión podría acercarse a 1.000 millones, reconocen fuentes de la empresa. Al margen de las adquisiciones, la opción de crecimiento exterior seguirán siendo los llamados proyectos BOT (Build, operate and transfer), es decir, construcción y gestión de plantas de tratamiento, depuradoras o desaladoras, principalmente. Ésta es la llave de entrada en países como Jordania, donde mantiene un proyecto que puede abrir más puertas en el mundo árabe tras la entrada en el macroplán de desaladoras de Argelia en el que también están presentes ACS, Sacyr y Befesa (de Abengoa). Aqualia se ha precalificado para optar a la conducción de agua potable hasta la capital, Ammán, desde un acuífero del área Disi-Mudawarra situada a 325 kilómetros en el sur del país. Se trata de uno de los grandes contratos de la zona, con un presupuesto de 600 millones de dólares (474 millones de euros). Y Aqualia espera convertirse en ganador, aliado a la italiana Condotte d'Aqua, con la que ya ha trabajado en otros concursos. El Ministerio jordano de Aguas, que financia parte del proyecto, elegirá adjudicatario en torno a noviembre. La filial de FCC competirá con Befesa , aliada a la japonesa Mitsui, la canadiense SNC Lavalin y tres consorcios árabes.
Aqualia ha sido elegida para optar a un contrato de 474 millones en Jordania
l La eclosión en infraestructuras de este país atrae cada vez más a los grupos españoles. Ahora, la gestión del agua abre oportunidades a FCC. El sur presenta grandes posibilidades en desaladoras.
l Con la compra de SmVAK, tercera gestora de agua checa, Aqualia entró también en Polonia. Uno de los más beneficiados por las ayudas de la UE y con sólo el 10% del negocio privatizado, este país está en primera línea de expansión. Ahora el grupo puja por el concurso de gestión de agua en el municipio de Plok (130.000 habitantes) frente a la francesa Veolia (ex accionista de FCC) y la alemana Saur. Rumanía y Eslovaquia también son objetivo. Toda la zona presenta un negocio potencial de unos 20.000 millones en menos de dos años, calculan en Aqualia. Los principales rivales son Veolia y Suez.
l Aqualia opta con Inima (de OHL) a una desaladora en la región de Gujarat con capacidad para tratar 150.000 metros cúbicos al día.
l Hay dos grandes desaladoras en proyecto en Tianjing y Hangu, supervisadas por el Banco Mundial.
l Aqualia es uno de los primeros gestores de agua en España, con una cuota del 34%, y quiere crecer en el país vecino. Allí tiene una cartera de 1.500 millones y ha logrado la concesión por 66 millones del alcantarillado y depuración de Abrantes, al norte de Lisboa.
Aunque la constructora que controla Esther Koplowitz ha invertido unos 5.000 millones en compras en el último año y medio; FCC no cierra los ojos a nuevas operaciones. Así lo transmiten fuentes de la empresa, que revelan planes de adquisición para fortalecer una de las divisiones con más potencial del grupo, Aqualia, la filial de gestión de agua.
Por imperativo del plan estratégico aprobado en abril de 2005, esta división, como el resto, está obligada a crecer en el exterior. El objetivo para 2008 es que entre un 35% y un 40% de la facturación del grupo provenga del fuera. A ello tienen que contribuir todas las filiales. Con unos ingresos previstos para este año de 700 millones (lo que supone crecer un 25%), Aqualia estima que puede rondar los 300 millones generados fuera en el plazo fijado. Pero crecer sólo por la vía de ganar contratos para abrir nuevos mercados es complicado ya que el ritmo es mucho más lento. Tras Italia, Portugal, Argelia, China y la República Checa, donde ya tiene actividad, la división mira ahora a tres zonas clave: EE UU, México, y Europa del Este, con Polonia, Rumanía y Eslovaquia como prioridad. Entrar en la primera de ellas supone un plus ya que estados como California han exportado el modelo de gestión integral del agua, que constituye la apuesta de Aqualia (desde gestión de servicios públicos del agua a infraestructuras hidráulicas, para riego, plantas de tratamiento y uso industrial). Este estado y Tejas están en el punto de mira de la filial que dirige Fernando Moreno. El perfil de empresa deseada es aquella que aporte tamaño, algo mayor que la checa SmVAK que FCC compró en abril pasado por 248 millones, hasta ahora la única adquisición en este negocio. Otro de los atractivos es que sea cotizada y con un núcleo de accionistas concentrado para facilitar la transacción. Aunque después del costoso plan de compras de FCC, las operaciones se estudian desde otra perspectiva financiera. Si bien, si realmente supone una oportunidad la inversión podría acercarse a 1.000 millones, reconocen fuentes de la empresa. Al margen de las adquisiciones, la opción de crecimiento exterior seguirán siendo los llamados proyectos BOT (Build, operate and transfer), es decir, construcción y gestión de plantas de tratamiento, depuradoras o desaladoras, principalmente. Ésta es la llave de entrada en países como Jordania, donde mantiene un proyecto que puede abrir más puertas en el mundo árabe tras la entrada en el macroplán de desaladoras de Argelia en el que también están presentes ACS, Sacyr y Befesa (de Abengoa). Aqualia se ha precalificado para optar a la conducción de agua potable hasta la capital, Ammán, desde un acuífero del área Disi-Mudawarra situada a 325 kilómetros en el sur del país. Se trata de uno de los grandes contratos de la zona, con un presupuesto de 600 millones de dólares (474 millones de euros). Y Aqualia espera convertirse en ganador, aliado a la italiana Condotte d'Aqua, con la que ya ha trabajado en otros concursos. El Ministerio jordano de Aguas, que financia parte del proyecto, elegirá adjudicatario en torno a noviembre. La filial de FCC competirá con Befesa , aliada a la japonesa Mitsui, la canadiense SNC Lavalin y tres consorcios árabes.
Aqualia ha sido elegida para optar a un contrato de 474 millones en Jordania
l La eclosión en infraestructuras de este país atrae cada vez más a los grupos españoles. Ahora, la gestión del agua abre oportunidades a FCC. El sur presenta grandes posibilidades en desaladoras.
l Con la compra de SmVAK, tercera gestora de agua checa, Aqualia entró también en Polonia. Uno de los más beneficiados por las ayudas de la UE y con sólo el 10% del negocio privatizado, este país está en primera línea de expansión. Ahora el grupo puja por el concurso de gestión de agua en el municipio de Plok (130.000 habitantes) frente a la francesa Veolia (ex accionista de FCC) y la alemana Saur. Rumanía y Eslovaquia también son objetivo. Toda la zona presenta un negocio potencial de unos 20.000 millones en menos de dos años, calculan en Aqualia. Los principales rivales son Veolia y Suez.
l Aqualia opta con Inima (de OHL) a una desaladora en la región de Gujarat con capacidad para tratar 150.000 metros cúbicos al día.
l Hay dos grandes desaladoras en proyecto en Tianjing y Hangu, supervisadas por el Banco Mundial.
l Aqualia es uno de los primeros gestores de agua en España, con una cuota del 34%, y quiere crecer en el país vecino. Allí tiene una cartera de 1.500 millones y ha logrado la concesión por 66 millones del alcantarillado y depuración de Abrantes, al norte de Lisboa.