The temporal in Cataluña and Baleares causes the death of two persons
Thu, 14/09/2006
La tradicional «gota fría» que todos los septiembres azota Cataluña, Baleares y la zona de Levante, ha llegado este año con tragedia: la muerte de al menos dos personas. El último fallecido, un mendigo que dormía en un parque de la localidad de Can Buxeres de Hospitalet de Llobregat, murió ahogado al quedarse dormido y ser arrastrado por una riada formada por la intensa lluvia.
El día anterior, una mujer de 83 años murió en Mallorca al ser arrastrada por una tromba de agua que también llevaba cascotes.
Las intensas aguas han afectado sobretodo a las regiones de Tarragona y Barcelona, donde cientos de coches han resultado afectados, varios locales y garajes se han inundad, y al cierre de esta edición varias carreteras y alguna línea de tren estaban cortadas por las malas condiciones climáticas.
Además, también se ha tenido que activar el plan de emergencias «Camcat» por un vertido de hidrocarburos de la planta de Repsol en Tarragona, probablemente también causado por los problemas que la tormenta ha originado en esta industria, parte de cuyas instalaciones han quedado anegadas por el agua.
La «gota fría», que aparte de las precipitaciones ha originado 71.000 rayos, ha obligado a los bomberos de la Generalitat a efectuar un total de 918 actuaciones relacionadas con el episodio de lluvias, a las que hay que sumar las 73 salidas de los bomberos de la ciudad de Barcelona, donde en menos de 48 horas se ha recogido una tercera parte del agua caída en todo lo que va de año.
A raíz de la lluvia y el viento, los cuerpos de emergencia han tenido que afrontar más de 2.000 avisos. La mayoría de las salidas realizadas por los bomberos estuvieron relacionadas con inundaciones de bajos y filtraciones de aguas en viviendas.
En el Bajo Llobregat, un tornado que duró unos dos minutos volcó algunos vehículos -uno de ellos un camión cargado de fruta-, levantó los techos de edificios, arrancó árboles y derribó muros en Sant Feliu de Llobregat, donde tuvo una mayor incidencia.
La consejera de Interior, Montserrat Tura, pidió «prudencia» a los ciudadanos ante el temporal que se mantendrá durante esta noche y mañana y ha insistido en que «se eviten riesgos» innecesarios.
Entre las incidencias del temporal, que ha hecho desaparecer varias playas en la costa catalana, destacan los problemas en el tráfico ferroviario, donde durante todo el día de ayer se registraron retrasos en varias líneas de cercanías y se interrumpió el servicio de Tarragona a Salou, y de Tarragona a Reus por la inundación de las vías, lo que afectó a más de 400.000 usuarios.
El temporal tambiénafectó a varios vuelos con destino u origen en el aeropuerto de Barcelona, donde se registraron retrasos, y trece vuelos fueron desviados de Reus a El Prat.
La Agencia Catalana del Agua emitió un aviso en el que alerta del peligro de la rápida crecida de los ríos de Gerona y recomienda evitar circular o acercarse, ya sea con vehículos o a pie, a lugares donde pueda haber acumulación de agua, así como en rieras y torrentes ante la posibilidad de crecidas.
El día anterior, una mujer de 83 años murió en Mallorca al ser arrastrada por una tromba de agua que también llevaba cascotes.
Las intensas aguas han afectado sobretodo a las regiones de Tarragona y Barcelona, donde cientos de coches han resultado afectados, varios locales y garajes se han inundad, y al cierre de esta edición varias carreteras y alguna línea de tren estaban cortadas por las malas condiciones climáticas.
Además, también se ha tenido que activar el plan de emergencias «Camcat» por un vertido de hidrocarburos de la planta de Repsol en Tarragona, probablemente también causado por los problemas que la tormenta ha originado en esta industria, parte de cuyas instalaciones han quedado anegadas por el agua.
La «gota fría», que aparte de las precipitaciones ha originado 71.000 rayos, ha obligado a los bomberos de la Generalitat a efectuar un total de 918 actuaciones relacionadas con el episodio de lluvias, a las que hay que sumar las 73 salidas de los bomberos de la ciudad de Barcelona, donde en menos de 48 horas se ha recogido una tercera parte del agua caída en todo lo que va de año.
A raíz de la lluvia y el viento, los cuerpos de emergencia han tenido que afrontar más de 2.000 avisos. La mayoría de las salidas realizadas por los bomberos estuvieron relacionadas con inundaciones de bajos y filtraciones de aguas en viviendas.
En el Bajo Llobregat, un tornado que duró unos dos minutos volcó algunos vehículos -uno de ellos un camión cargado de fruta-, levantó los techos de edificios, arrancó árboles y derribó muros en Sant Feliu de Llobregat, donde tuvo una mayor incidencia.
La consejera de Interior, Montserrat Tura, pidió «prudencia» a los ciudadanos ante el temporal que se mantendrá durante esta noche y mañana y ha insistido en que «se eviten riesgos» innecesarios.
Entre las incidencias del temporal, que ha hecho desaparecer varias playas en la costa catalana, destacan los problemas en el tráfico ferroviario, donde durante todo el día de ayer se registraron retrasos en varias líneas de cercanías y se interrumpió el servicio de Tarragona a Salou, y de Tarragona a Reus por la inundación de las vías, lo que afectó a más de 400.000 usuarios.
El temporal tambiénafectó a varios vuelos con destino u origen en el aeropuerto de Barcelona, donde se registraron retrasos, y trece vuelos fueron desviados de Reus a El Prat.
La Agencia Catalana del Agua emitió un aviso en el que alerta del peligro de la rápida crecida de los ríos de Gerona y recomienda evitar circular o acercarse, ya sea con vehículos o a pie, a lugares donde pueda haber acumulación de agua, así como en rieras y torrentes ante la posibilidad de crecidas.