La degradación del río Nalón no se ha frenado con la puesta en marcha del colector general y del sistema de depuración de aguas. Así lo critican los colectivos ecologistas de la zona, quienes muestran como ejemplo claro "de la pérdida de vida ecológica" la zona del río ubicada en las proximidades de la central térmica de Lada, donde desde hace un mes el agua está cubierta de algas que demuestran "la falta de oxigenación y la consiguiente putrefacción", critican ecoligistas y pescadores.
La razón principal alegada por los ecologistas para justificar esta situación "es la falta de caudal en el río". Esta circunstancia, junto con el hecho de que en la zona de Lada el agua esté estancada por una presa para servicio de la central térmica, hace que el agua se caliente y que el fenómeno de la proliferación de algas sea más grave en la época estival.
Los pescadores de la zona también han planteado quejas sobre esta situación, "ya que en esta parte del río antes se podía pescar y había truchas. Ahora no creo que pueda haber ninguna", comenta José Luis Menéndez, uno de los deportistas locales del municipio.
COMPROMISOS El Ayuntamiento de Langreo pactó judicialmente con Cadasa e Hidroeléctrica que desde los embalses de Tanes y Rioseco se deberían dejar salir al menos 3,18 metros cúbicos de agua. Con esta cantidad se preveía que el cauce del río Nalón a su paso por Sama de Langreo, en las épocas de mayor estiaje, no bajase de los 2.500 litros por segundo, lo que permitiría sobrevivir al río y a la fauna de sus aguas. Este acuerdo se firmó hace casi cuarenta años para zanjar el pleito iniciado con la construcción de las presas.
Diferentes mediciones realizadas durante décadas por la Asociación para el Estudio del Abastecimiento de Aguas de Langreo --entidad que sustituyó al Centro de Iniciativas-- demostró que estos compromisos no se cumplían. Por ello mantuvo las reivindicaciones sociales e incluso presionó a los organismos encargados de la gestión y control del agua.
La recuperación del entorno fluvial del río Nalón en el tramo de 1.534 metros de longitud situado entre Sama y La Felguera, degradada en el pasado siglo por las numerosas actividades industriales que prosperaron en su entorno, es una de las actuaciones que con más ilusión viven tanto el consistorio local como los habitantes del concejo, por cuanto se espera que contribuya a la mejora del hábitat y, consecuentemente, a una mayor calidad de vida de los habitantes del concejo. Esta actuación, presupuestada en 4.057.000 y cuyo plazo de ejecución acabará dentro de un mes, puede quedar vacía de contenido si tras realizar los paseos fluviales la calidad y cantidad del agua del río no es la adecuada