Catalonia Water Agency detects 190 river sections with problems to guarantee the minimal flow
Fri, 04/11/2005
p> La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha detectado un total de 190 tramos fluviales críticos con problemas para garantizar un caudal mínimo de agua, de los que 130 están en las cuencas internas y 60 en la parte catalana del Ebro.
Los ríos con más tramos afectados son el Llobregat (63) y el Ter (34). En menor medida, les siguen la Noguera Ribagorçana, el Fluvià, el Segre y la Noguera Pallaresa. Con menos de diez tramos afectados figuran Mugà, Tordera, Besòs, Foix, Gaià, Francolí, Riudecanyes, Garona, Siurana y Ebre.
Entre las causas que reducen la cantidad de agua en los ríos, figura el uso hidroeléctrico, en el 88% de los casos y los regadíos (9%). Por ello, el consejo de administración de la ACA aprobó hoy un Plan sectorial de caudales de mantenimiento de las cuencas internas de Catalunya, que es la primera legislación de este tipo en España.
El plan calcula cuál es el caudal mínimo necesario en cada tramo del río para garantizar el funcionamiento de los ecosistemas fluviales y la vida piscícola. El cálculo del caudal depende de cada zona y contará con la colaboración de regantes, ecologistas, pescadores y ayuntamientos, según informó la ACA.
El objetivo del plan es hacer compatibles los usos industriales, agrícolas, de consumo y de generación de energía con el buen estado de los sistemas acuáticas. Cuando el caudal de mantenimiento esté por debajo del recomendado, se aconseja no extraer más agua del sistema.
Los ríos con más tramos afectados son el Llobregat (63) y el Ter (34). En menor medida, les siguen la Noguera Ribagorçana, el Fluvià, el Segre y la Noguera Pallaresa. Con menos de diez tramos afectados figuran Mugà, Tordera, Besòs, Foix, Gaià, Francolí, Riudecanyes, Garona, Siurana y Ebre.
Entre las causas que reducen la cantidad de agua en los ríos, figura el uso hidroeléctrico, en el 88% de los casos y los regadíos (9%). Por ello, el consejo de administración de la ACA aprobó hoy un Plan sectorial de caudales de mantenimiento de las cuencas internas de Catalunya, que es la primera legislación de este tipo en España.
El plan calcula cuál es el caudal mínimo necesario en cada tramo del río para garantizar el funcionamiento de los ecosistemas fluviales y la vida piscícola. El cálculo del caudal depende de cada zona y contará con la colaboración de regantes, ecologistas, pescadores y ayuntamientos, según informó la ACA.
El objetivo del plan es hacer compatibles los usos industriales, agrícolas, de consumo y de generación de energía con el buen estado de los sistemas acuáticas. Cuando el caudal de mantenimiento esté por debajo del recomendado, se aconseja no extraer más agua del sistema.