The CHJ assumes the execution of the Ebro minidivert if there isn´t enough water in Castellón

Mon, 24/10/2005

Levante

El canal Xerta-Càlig forma parte de las actuaciones previstas en la derogada ley del PHN
J. V. Pérez, Valencia
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues, no descartó ayer que en un futuro se puedan llegar a ejecutar las obras del canal Xerta-Càlig contempladas en el derogado proyecto del trasvase del Ebro a la Comunidad Valenciana y que afectaría fundamentalmente, a la zona norte de la provincia de Castelló. «Si hace falta el minitrasvase, se hará», afirmó Moragues al ser preguntado a este respecto. No obstante, el presidente de la CHJ adelantó que la ejecución del canal se estudiará en el supuesto de que las actuaciones urgentes previstas en el programa Agua del Ministerio de Medio Ambiente como la regulación por recarga del río Belcaire, la adecuación del embalse de Arenós o el plan de modernización de riegos de la Plana de Castelló, entre otros, no sean suficientes para garantizar la demanda de agua en la zona. Moragues recordó además, que el Gobierno central «nunca» ha descartado llevar a cabo esta infraestructura.
El presidente de la CHJ realizó estas declaraciones durante la rueda de prensa que ayer ofreció para hacer balance sobre el último año hidrológico, que va del 1 de octubre de 2004 hasta el 30 de septiembre de 2005-. Moragues lo calificó de «extremadamente seco».
Y es que los datos ofrecidos ayer por la CHJ sobre el último año hidrológico y los relativos a los primeros 21 días del actual, no hacen presagiar que la sequía que la Comunidad Valenciana viene experimentando durante los últimos meses vaya a mejorar. Según explicó el director técnico de la CHJ, Joaquín Andreu, el último año hidrológico se ha situado entre el 10% de los años más secos desde 1940. La media histórica está en los 490 milímetros (mm) de precipitaciones y durante el último año se ha registrado una media de 334 mm, aproximadamente.
A estas cifras hay que sumar las obtenidas durante los primeros días del presente año hidrológico. La media se sitúa en los 20 mm de precipitaciones, algo que ha supuesto, por el momento, el descenso en 12 hectómetros cúbicos del volumen embalsado en toda la cuenca del Júcar.
El próximo año, por debajo de la media
Además, Andreu ya advirtió que el presente año también estará por debajo de la media, aunque evitó precisar si las aportaciones a los distintos sistemas de la CHJ, a raíz de las precipitaciones que se puedan registrar, se mantendrán, aumentarán o descenderán con respecto al año que acaba de concluir. Dijo que no se puede realizar ninguna previsión o pronóstico científico fiable, «porque las lluvias de estos últimos días apenas han tenido efecto en los caudales de entrada a los embalses». Las aportaciones a los distintos sistemas de la CHJ en el presente año hidrológico se pueden calificar, según la entidad, como «muy reducidas» como consecuencia de la «escasez» en las precipitaciones.
Uno de los sistemas que más se ha resentido es el del Júcar. En un año, ha pasado de un 25% de su capacidad al 9%. No obstante, no ha sido, de todos los sistemas que conforman la cuenca, el que más ha bajado. El sistema del Cenia ha pasado de un 83% de su capacidad a un 13%. También se han reducido los sistemas del Mijares, Palancia, Turia y Marina-Baja. Sólo el sistema del Serpis ha subido pasando del 33% al 40% de su capacidad.
En total, la capacidad de embalse global de la cuenca del Júcar está actualmente en los 3.131 hm3. El volumen embalsado ha pasado de los 973 hm3 que habían el 1 de octubre de 2004 a los 464 hm3 que se contabilizaron el 30 de septiembre de este año, es decir, que se ha producido un descenso del 16%.
Con estos datos, el objetivo de la CHJ en estos momentos es poder garantizar el suministro de agua para el consumo humano. Según su presidente, Juan José Moragues, por el momento, no hay porqué preocuparse.