A radar located in Álava detects the arrival of storms with two hours beforehand

Fri, 21/10/2005

Diario de Noticias de Navarra

Las fuertes nevadas que este año han caído en la Comunidad Autónoma Vasca, y sobre todo en el territorio de Álava, no volverán a pillarnos de sorpresa. Eso es al menos lo que asegura el servicio meteorológico del Gobierno Vasco que ayer inauguró en el monte Kapildui (Bernedo, Álava) un radar con un radio de alcance de 400 kilómetros. Se trata, según los expertos, del más moderno de toda la península Ibérica.

El acto estuvo presidido por el lehendakari, Juan José Ibarretxe, que estuvo acompañado por la consejera de Transportes y Obras Públicas, Nuria López de Gereñu, y el director de Meteorología del Gobierno Vasco, Adolfo Morais.

Situado sobre una altura de 1.177 metros, el radar permitirá detectar con una antelación de entre una y dos horas la presencia de núcleos tormentosos. Además, un novedoso sistema de polarización dual que envía ondas en dos direcciones será capaz de distinguir entre el tipo de precipitación (lluvia, granizo o nieve). Este aparato, que mide casi 60 metros, permitirá también realizar un estudio del viento ya que está capacitado para soportar rachas de hasta 250 kilómetros por hora.

La precisión con la que mide el movimiento del fenómeno meteorológico así como su intensidad hará posible a los meteorólogos de Euskalmet alertar a Protección Civil con suficiente antelación para que se active el protocolo ante posibles riesgos de inundaciones, tormentas o nevadas, en caso de que fuera necesario. Permitirá que conozcamos cual es su trayectoria, en qué lugares va a descargar y mejorar esa predicción que hasta ahora hacíamos de cinco días , aseguró Morais. Sin embargo, el responsable de Meteorología advierte de que, al tratarse de fenómenos que no responden a un modelo concreto, siempre hay que contar con cierto grado de incertidumbre .

el radar más moderno No es éste el único radar meteorológico con el que cuenta la Comunidad Autónoma Vasca. Existe otro en el monte Jata, junto a la localidad vizcaína de Bakio, que pertenece al Instituto Nacional de Meteorología. Sí es, en cambio, tal y como explicó Morais, el que incorpora las más avanzadas tecnologías convirtiéndose así en el radar más moderno de la península Ibérica y en uno de los más modernos de Europa.

El monte Kapildui ha sido elegido para ubicar este radar entre más de 15 localizaciones en todo Euskadi. La limpieza de lectura que permite, ante la ausencia de obstáculos -como montañas- , así como su céntrica situación, han sido los factores decisivos para llevar a cabo la obra en este emplazamiento. Así, el radar, que hará posible mejorar la rapidez de respuesta ante posibles inclemencias, completará las 90 estaciones meteorológicas e hidrológicas, siete boyas marinas y un perfilador en Punta Galea con los que cuenta el Servicio Vasco de Meteorología.

Ibarretxe ensalza las nuevas tecnologías

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, que ayer inauguró el nuevo radar meteorológico en el monte alavés Kapildui, destacó ayer la importancia de las nuevas tecnologías, como las que se han aplicado a esta nueva instalación, para llegar a ser así un país moderno . A su juicio, una sociedad moderna se caracteriza por su capacidad de adelantarse a través de los avances tecnológicos. Se trata de un ejemplo más de cómo las nuevas tecnologías se ponen al servicio de las personas para darnos una información insustituible para que el hombre pueda actuar y tomar decisiones , insistió. Asimismo, y tras agradecer a las personas que han colaborado en este proyecto, comparó el radar con la punta de un iceberg en el que quedan por debajo años de mucho trabajo . Por su parte, la consejera de Transportes y Obras Públicas, Nuria López de Gereñu, reconoció el impulso a este proyecto de su predecesor, Álvaro Amann, quien también acudió ayer a la cita y defendió que las instituciones públicas fomenten la investigación en este campo, con el objetivo de ofrecer a la sociedad el mejor servicio, que es el que se merece . >e.a.

al detalle

l Características. Detecta la intensidad de las precipitaciones en un radio de 400 kilómetros de distancia y con una o dos horas de antelación. Media hora antes de que la tormenta se precipite transmite su trazado exacto. El radar está diseñado para hacer frente a vientos de 250 kilómetros por hora. La infraestructura consta de cuatro plantas.

l Magnitud. La torre tiene una altura de 58.8 metros y un diámetro de de 4,5 a 6 metros. En su interior dispone de un elevador.

l Presupuesto. Cinco millones de euros. El tiempo de ejecución ha sido de 10 meses.

l Ubicación. El radar se encuentra situado en la cima del monte Kapildui (Bernedo, Álava), a una altura de 1.177 metros. En total, 15 ubicaciones fueron estudiadas en profundidad.