CASTILLA Y LEÓN .- Carriedo asks for the fulfilment of the PHN in Castila y León
Fri, 21/10/2005
El consejero de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, pidió hoy al Gobierno de la nación que cumpla las previsiones del Plan Hidrológico Nacional para la región, de manera que se ejecuten los embalses y las presas que se contemplaban en él.
Carriedo, que inauguró hoy el II Congreso Nacional de Historia de las Presas que se celebra hasta el sábado en la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Burgos, incidió en la necesidad de las presas para mejorar el caudal ecológico de los ríos.
Entre otros ejemplos, citó el caso de la provincia de Valladolid, en donde el único espacio natural declarado está vinculado a una presa que "ha constituido un ecosistema de gran valor ecológico", por lo que consideró "imprescindible" volver a reivindicar el papel de las presas y los embalses.
"Hay quien pretende exclusivamente focalizar su política hidráulica en la responsabilidad de los ciudadanos, en ahorrar agua, en echar toda la culpa a los ciudadanos porque dejan los grifos abiertos, y a los agricultores porque consumen mucha agua", apuntó.
El consejero reconoció que hace falta un esfuerzo para "racionalizar" más el uso del agua, pero advirtió que las infraestructuras hidráulicas son "absolutamente imprescindibles".
CASTROVIDO
Dentro de las reivindicaciones de la Junta de Castilla y León en lo que concierne a las previsiones del Plan Hidrológico Nacional para la Comunidad, el consejero recordó la situación de la presa de Castrovido en Burgos, cuya construcción se paralizó hace aproximadamente año y medio, como consecuencia de las modificaciones previstas por el Ministerio de Medio Ambiente.
Carlos Fernández Carriedo recordó que aún "nadie ha explicado las razones políticas" que llevaron al Gobierno a decidir rebajar la cota del embalse en 11 metros.
Asimismo, criticó las medidas complementarias que prometió a cambio la Administración central, porque son actuaciones "ordinarias", según sus palabras, en las cuencas de los ríos, y recordó que la Junta espera todavía a que el Gobierno presente el modificado del proyecto.
En ese sentido, se preguntó "qué responsabilidad política se va a asumir si finalmente la presa no se acaba en el tiempo que estaba establecido" y si no se gastan los 20 millones de euros que hay presupuestados en el año 2005 para este proyecto, y a qué comunidad autónoma se destinarán, si finalmente no se pueden ejecutar en la provincia de Burgos.
De la misma forma, denunció los retrasos "continuos" en el proyecto, que en este momento "está paralizado". Fernández Carriedo reprochó la ausencia de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y la de otros dirigentes socialistas que también fueron invitados al congreso que hoy se inauguró en Burgos.
"Hay quien, ante estas circunstancias, va evolucionando en el tiempo de una forma curiosa. Ya no es sólo que todos defendiéramos antes Castrovido y algunos se hayan descolgado, ya no es sólo el hecho de que alguien prometiera que pronto se nos iban a dar explicaciones y soluciones a estos temas, sino que los mismos que nos lo dijeron, ni siquiera se atrevan hoy a dar la cara", agregó.
Según matizó, ante la demora en la presentación del modificado del proyecto y de las soluciones, "lo menos que se puede ofrecer es explicaciones".
En su opinión, "si alguien estuviera convencido de la importancia de que se rebajara la presa, estaría explicándolo todos los días, y sin embargo "nadie quiere venir a Burgos".
El consejero de Medio Ambiente avanzó que la Junta ya ha informado todas las actuaciones que ha presentado la Confederación Hidrográfica del Duero hace más de 15 días y entre ellas "no se han presentado muchas", ni las más prioritarias.
Carriedo, que inauguró hoy el II Congreso Nacional de Historia de las Presas que se celebra hasta el sábado en la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Burgos, incidió en la necesidad de las presas para mejorar el caudal ecológico de los ríos.
Entre otros ejemplos, citó el caso de la provincia de Valladolid, en donde el único espacio natural declarado está vinculado a una presa que "ha constituido un ecosistema de gran valor ecológico", por lo que consideró "imprescindible" volver a reivindicar el papel de las presas y los embalses.
"Hay quien pretende exclusivamente focalizar su política hidráulica en la responsabilidad de los ciudadanos, en ahorrar agua, en echar toda la culpa a los ciudadanos porque dejan los grifos abiertos, y a los agricultores porque consumen mucha agua", apuntó.
El consejero reconoció que hace falta un esfuerzo para "racionalizar" más el uso del agua, pero advirtió que las infraestructuras hidráulicas son "absolutamente imprescindibles".
CASTROVIDO
Dentro de las reivindicaciones de la Junta de Castilla y León en lo que concierne a las previsiones del Plan Hidrológico Nacional para la Comunidad, el consejero recordó la situación de la presa de Castrovido en Burgos, cuya construcción se paralizó hace aproximadamente año y medio, como consecuencia de las modificaciones previstas por el Ministerio de Medio Ambiente.
Carlos Fernández Carriedo recordó que aún "nadie ha explicado las razones políticas" que llevaron al Gobierno a decidir rebajar la cota del embalse en 11 metros.
Asimismo, criticó las medidas complementarias que prometió a cambio la Administración central, porque son actuaciones "ordinarias", según sus palabras, en las cuencas de los ríos, y recordó que la Junta espera todavía a que el Gobierno presente el modificado del proyecto.
En ese sentido, se preguntó "qué responsabilidad política se va a asumir si finalmente la presa no se acaba en el tiempo que estaba establecido" y si no se gastan los 20 millones de euros que hay presupuestados en el año 2005 para este proyecto, y a qué comunidad autónoma se destinarán, si finalmente no se pueden ejecutar en la provincia de Burgos.
De la misma forma, denunció los retrasos "continuos" en el proyecto, que en este momento "está paralizado". Fernández Carriedo reprochó la ausencia de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y la de otros dirigentes socialistas que también fueron invitados al congreso que hoy se inauguró en Burgos.
"Hay quien, ante estas circunstancias, va evolucionando en el tiempo de una forma curiosa. Ya no es sólo que todos defendiéramos antes Castrovido y algunos se hayan descolgado, ya no es sólo el hecho de que alguien prometiera que pronto se nos iban a dar explicaciones y soluciones a estos temas, sino que los mismos que nos lo dijeron, ni siquiera se atrevan hoy a dar la cara", agregó.
Según matizó, ante la demora en la presentación del modificado del proyecto y de las soluciones, "lo menos que se puede ofrecer es explicaciones".
En su opinión, "si alguien estuviera convencido de la importancia de que se rebajara la presa, estaría explicándolo todos los días, y sin embargo "nadie quiere venir a Burgos".
El consejero de Medio Ambiente avanzó que la Junta ya ha informado todas las actuaciones que ha presentado la Confederación Hidrográfica del Duero hace más de 15 días y entre ellas "no se han presentado muchas", ni las más prioritarias.