El futuro Centro de Intercambio de Derechos del Agua que se creará en la cuenca del Guadalquivir podría intercambiar agua con otras cuencas próximas, --caso de la Cuenca Mediterránea andaluza, la que tiene menos reservas-- si el Ministerio de Medio Ambiente modificara la legislación actual ante la situación de "sequía extrema", una posibilidad que se contempla según señaló hoy en rueda de prensa el subdirector general de Gestión Integrada del Dominio Publico Hidráulico del Ministerio, Jesús Yagüe.
El Ministerio de Medio Ambiente permitiría entonces las transferencias de derechos de agua entre cuencas ya que en la actualidad los Centros de Intercambio de Derechos de Aguas sólo autorizan las transferencias entre usuarios de la misma cuenca.
Según explicaron fuentes de la CHG a Europa Press, la cuenca del Guadalquivir ya ha llevado a cabo algunas iniciativas piloto en este sentido, como las transferencias de agua entre usuarios de la misma cuenca, caso de los regantes del Viar, a la espera de la creación del Centro de Intercambio. Asimismo, la CHG tiene habilitado un trasvase de agua con los pantanos de Negratín (Granada)- Almanzora (Almería).
Las únicas cuencas que cuentan ya con Centros de Intercambio de Derechos de Agua son las del Segura, Júcar y Guadiana, que han realizado "transacciones limitadas en acuíferos sobreexplotados".
En el transcurso de una jornada sobre los Bancos Públicos de Agua de la Fundación y el Observatorio Nacional de la Sequía organizada hoy en Madrid, Yagüe señaló que, por el momento, "no se prevé" crear un Centro de Intercambio de Derechos del Agua en la cuenca del Tajo, según Yagüe. Estos centros se encargan de recuperar los derechos de los usuarios que deseen cederlos para poder ofrecérselos a otros usuarios que los necesiten.
Por su parte el presidente de la Fundación Nueva Cultura del Agua, Pedro Arrojo, defendió los Centros de Intercambio de derechos de Aguas y los Bancos Públicos de Agua, aunque "no son la barita mágica".