Vinalopó´s farmers won´t send water to Alicante if the divert is changed

Thu, 13/10/2005

Las Provincias

Los agricultores dicen que les empujan a ‘‘la autarquía hídrica’’ y se quedarán con el agua de sus pozos Los regantes del Vinalopó amenazan con no enviar agua de sus pozos para que beba Alicante y su comarca si finalmente se modifica el trasvase Júcar-Vinalopó. La capital alicantina recibe, según Andrés Martínez, presidente de la Junta Central de Usuarios, el 50% del agua que consume procedente de Villena y el resto, del Tajo. F. RICÓS/VALENCIA Publicidad Más noticias El apoyo que prestan las principales organizaciones agrarias de Valencia y Castellón al cambio de trazado del trasvase Júcar-Vinalopó, propuesto por el Ministerio de Medio Ambiente, ha sido un duro revés para la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, l’Alacantí y la Marina Baixa.

El documento lo presentarán hoy el secretario general de la Unió de Llauradors, Joan Brusca, y el presidente de AVA, Cristóbal Aguado. Cuenta con el apoyo de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) –cuyo secretario general es un histórico del PSPV-PSOE de la comarca de los Serranos, Rafael Cervera– y Fepac de Castellón, perteneciente, como AVA, a la organización nacional Asaja. Jóvenes Agricultores de Alicante, también de Asaja, se desmarca.

El cambio de toma del trasvase va a suponer, a juicio de los regantes del Vinalopó, un encarecimiento del metro cúbico de agua que no van a poder asumir. La razón es sencilla: los usuarios urbanos de l’Alacantí y la Marina Baixa no subvencionarán el precio del agua porque la procedente de la desembocadura del Júcar no es apta para el consumo humano.

Así las cosas, los regantes del Vinalopó se encontrarán con que tendrán que seguir dando de beber a los habitantes y turistas de la comarca de l’Alacantí (el 50% del agua que consumen proceden de los pozos de Villena y el resto de los canales del Taibilla, que se alimentan del Tajo-Segura) y, por supuesto a los municipios de su comarca. Mientras, sus pozos están sobreexplotados.

Por ese motivo las comunidades de regantes del Vinalopó amenazan de forma velada con dejar de suministrar agua para beber, incluso a la ciudad de Alicante, y utilizar sus pozos para sus cosechas. ‘‘Están propiciando –asegura Martínez en referencia al Gobierno central y a las organizaciones agrarias– una guerra interna en Alicante e incluso en el propio Vinalopó’’.

‘‘Como presidente de la Junta Central defenderé a muerte que se mantenga la toma del trasvase en el pantano de Cortes. Pero no se me caerían los anillos por dejar la presidencia de la Junta. Como presidente de la Comunidad de Regantes de Villena, si entramos en un periodo de autarquía en el abastecimiento hídrico, al que nos están empujando, defenderé hasta la extenuación que el agua de nuestros pozos sea para los regantes de Villena’’, reconoció con dolor Andrés Martínez.

Sobre esta amenaza tendría mucho que decir la Confederación del Júcar, cuya obligación es garantizar el abastecimiento a la población, por encima del uso agrario del agua.

Sin consensoLa búsqueda del consenso en materia hídrica por parte de las organizaciones agrarias ha fracasado en cuanto al trasvase Júcar-Vinalopó. Todos los grupos, a excepción de Jóvenes Agricultores, que lidera Eladio Aniorte, avalan que se modifique el trazado de este trasvase y se cambie la toma de agua de Cortes de Pallás al azud de la Marquesa, en la desembocadura del río.

Esta decisión, no por menos esperada, no ha dejado de sentar muy mal en el seno de la Junta Central de usuarios alicantinos del Júcar-Vinalopó.

Su presidente, Andrés Martínez, no dudaba del dictamen. ‘‘Ya se sabía qué iba a suceder. Cuando ya se parte con prejuicios, ya se sabe el final’’, sentenció.

‘‘Me parece muy poco serio que se hayan metido en temas que no les corresponde. Que hablen del precio de los productos, de lo que nos cuesta el gasóleo, pero que dejen el asunto del agua para los regantes y los usuarios, con quienes tampoco han contado. Si quieren representar a todos los agricultores. Yo, como agricultor, no me siento representado por ellos’’, argumentó Andrés Martínez en referencia al presidente de AVA, Cristóbal Aguado.

En el documento también aparece una de las cuestiones que se discutió en las sesiones técnicas: la construcción de un minitrasvase del Ebro hasta Sagunto de 30 hectómetros con el fin de liberar caudales del Júcar.

Esta propuesta la defendió el PSPV hace meses y la ministra de Medio Ambiente aún no la ha descartado. Otra cuestión es lo que deje hacer la Generalidad catalana.