Andalucia Government prepares water restrictions for the Costa del Sol
Thu, 22/09/2005
Salvo que se produzcan importantes precipitaciones antes de octubre, la capital malagueña y los municipios de la Costa del Sol occidental se verán abocados en breve a restricciones en el suministro de agua ante la escasez de recursos que padecen. Esta comarca será, por el momento, la única afectada por las medidas previstas en el decreto de sequía que prepara la Consejería de Medio Ambiente, toda vez que sus embalses apenas alcanzan el 30 por ciento de su capacidad.
La normativa –sin fecha aún para su entrada en vigor, pero que a partir del próximo miércoles se someterá a exposición pública para que los ayuntamientos y demás agentes afectados puedan presentar sus alegaciones– fijará medidas obligatorias de ahorro con el objetivo de garantizar el abastecimiento doméstico, tal y como se recoge en la Ley de Aguas, el Plan Hidrológico Nacional y el Plan Hidrológico de la Cuenca Sur.
De este modo, la Junta pasa de la recomendación a la imposición guiada –según manifestó ayer la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves– por el caso omiso a las recomendaciones del Gobierno andaluz de algunos ayuntamientos, integrantes de la comisión de seguimiento que analiza la situación de sequía hidrológica de la zona junto a la Agencia Andaluza del Agua y las federaciones de regantes. Tres meses después de su constitución, muchas de las medidas propuestas a los ayuntamientos, tales como gravar los consumos recreativos y suntuarios del agua, limitar su uso para baldeo y riego de jardines en los términos municipales o reducir la presión de las redes de distribución, "no han alcanzado el grado de seguimiento deseado".
Aunque la aprobación del decreto y, por tanto, el inicio de las restricciones aún no tienen fecha, la consejera explicó ante la comisión parlamentaria de Medio Ambiente que éstas se llevarían a cabo "siempre de forma gradual" y afectarían al abastecimiento urbano en último término. El reto propuesto por el departamento que dirige Fuensanta Coves es reducir un 10 por ciento del consumo actual, lo que garantizaría el abastecimiento durante un año más.
En contraste con la situación malagueña, la consejera lanzó a la ciudadanía un mensaje de "serena preocupación" para el resto de Andalucía pues, según dijo, el 80 por ciento de la población tiene garantizado el abastecimiento durante los próximos 18 meses. Se da la circunstancia de que las precipitaciones del último año hidrológico –cerrado en agosto– han sido más abundantes, por ejemplo, en el oriente almeriense que en el Bajo Guadalquivir, si bien con carácter general estuvieron un 50 por ciento por debajo de la media.
Coves señaló que la sequía es un fenómeno normal en Andalucía y que "hay que acostumbrarse a vivir con ella", pero destacó que la Junta debe anticiparse con medidas que permitan que la comunidad se encuentre "mejor preparada que en los años noventa para afrontar un periodo seco". Además, la consejera aseguró que el decreto responde a la "situación de excepcionalidad, grave y preocupante" de la capital malagueña y la Costa del Sol occidental. Esta última se abastece del embalse de La Concepción, actualmente al 16 por ciento de su capacidad. La situación de la capital es algo más halagüeña, ya que desde el pasado toma del pantano de La Viñuela gracias a un acuerdo alcanzado por el Ayuntamiento, al que Fuensanta Coves reconoció el esfuerzo realizado para reducir el consumo. También valoró el compromiso de los agricultores del Guadalhorce, que aceptaron adelantar el final de la campaña de riegos para mermar el gasto de agua en un 25 por ciento y ayudar así al abastecimiento urbano.
Entre las medidas que, al margen del decreto, se han llevado y se llevarán a cabo para paliar el déficit hídrico de la comarca, Coves citó la puesta en marcha de la desaladora de Marbella (actualmente funcionando al 75 por ciento de su capacidad total), la toma de agua salinizada del pantano del Guadalhorce para su tratamiento en la desalobradora de El Atabal, la ampliación de la estación de bombeo de El Toril o la inversión de 6,4 millones de euros destinada a la rehabilitación y progresiva puesta en marcha de los pozos de emergencia de la anterior sequía, que tuvo lugar entre 1992 y 1995. funcionarios 'verdes'. El presidente andaluz, Manuel Chaves, y la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, presentaron ayer en Sevilla el nuevo servicio de transporte en bicicleta diseñado por la Junta para fomentar su uso entre sus empleados.
La normativa –sin fecha aún para su entrada en vigor, pero que a partir del próximo miércoles se someterá a exposición pública para que los ayuntamientos y demás agentes afectados puedan presentar sus alegaciones– fijará medidas obligatorias de ahorro con el objetivo de garantizar el abastecimiento doméstico, tal y como se recoge en la Ley de Aguas, el Plan Hidrológico Nacional y el Plan Hidrológico de la Cuenca Sur.
De este modo, la Junta pasa de la recomendación a la imposición guiada –según manifestó ayer la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves– por el caso omiso a las recomendaciones del Gobierno andaluz de algunos ayuntamientos, integrantes de la comisión de seguimiento que analiza la situación de sequía hidrológica de la zona junto a la Agencia Andaluza del Agua y las federaciones de regantes. Tres meses después de su constitución, muchas de las medidas propuestas a los ayuntamientos, tales como gravar los consumos recreativos y suntuarios del agua, limitar su uso para baldeo y riego de jardines en los términos municipales o reducir la presión de las redes de distribución, "no han alcanzado el grado de seguimiento deseado".
Aunque la aprobación del decreto y, por tanto, el inicio de las restricciones aún no tienen fecha, la consejera explicó ante la comisión parlamentaria de Medio Ambiente que éstas se llevarían a cabo "siempre de forma gradual" y afectarían al abastecimiento urbano en último término. El reto propuesto por el departamento que dirige Fuensanta Coves es reducir un 10 por ciento del consumo actual, lo que garantizaría el abastecimiento durante un año más.
En contraste con la situación malagueña, la consejera lanzó a la ciudadanía un mensaje de "serena preocupación" para el resto de Andalucía pues, según dijo, el 80 por ciento de la población tiene garantizado el abastecimiento durante los próximos 18 meses. Se da la circunstancia de que las precipitaciones del último año hidrológico –cerrado en agosto– han sido más abundantes, por ejemplo, en el oriente almeriense que en el Bajo Guadalquivir, si bien con carácter general estuvieron un 50 por ciento por debajo de la media.
Coves señaló que la sequía es un fenómeno normal en Andalucía y que "hay que acostumbrarse a vivir con ella", pero destacó que la Junta debe anticiparse con medidas que permitan que la comunidad se encuentre "mejor preparada que en los años noventa para afrontar un periodo seco". Además, la consejera aseguró que el decreto responde a la "situación de excepcionalidad, grave y preocupante" de la capital malagueña y la Costa del Sol occidental. Esta última se abastece del embalse de La Concepción, actualmente al 16 por ciento de su capacidad. La situación de la capital es algo más halagüeña, ya que desde el pasado toma del pantano de La Viñuela gracias a un acuerdo alcanzado por el Ayuntamiento, al que Fuensanta Coves reconoció el esfuerzo realizado para reducir el consumo. También valoró el compromiso de los agricultores del Guadalhorce, que aceptaron adelantar el final de la campaña de riegos para mermar el gasto de agua en un 25 por ciento y ayudar así al abastecimiento urbano.
Entre las medidas que, al margen del decreto, se han llevado y se llevarán a cabo para paliar el déficit hídrico de la comarca, Coves citó la puesta en marcha de la desaladora de Marbella (actualmente funcionando al 75 por ciento de su capacidad total), la toma de agua salinizada del pantano del Guadalhorce para su tratamiento en la desalobradora de El Atabal, la ampliación de la estación de bombeo de El Toril o la inversión de 6,4 millones de euros destinada a la rehabilitación y progresiva puesta en marcha de los pozos de emergencia de la anterior sequía, que tuvo lugar entre 1992 y 1995. funcionarios 'verdes'. El presidente andaluz, Manuel Chaves, y la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, presentaron ayer en Sevilla el nuevo servicio de transporte en bicicleta diseñado por la Junta para fomentar su uso entre sus empleados.