The two basins that supply Alicante have the lower water reserves

Sun, 04/09/2005

Información

Los embalses del Tajo y el Segura están a poco más del 10% de su capacidad, cinco veces menos que en las zonas del norte de España

P. R. F./REDACCIÓN

Los datos de Medio Ambiente vuelven a evidenciar que la situación hídrica de la provincia de Alicante es desesperada. La ministra Cristina Narbona admitió ayer que las dos cuencas que, fundamentalmente, abastecen a las comarcas alicantinas -la del Segura y la de la cabecera del río Tajo a través del trasvase- son las que almacenan una menor cantidad de reservas. Apenas acumulan algo más de un 10% de la capacidad total de sus pantanos, una quinta parte menos que las zonas hídricas del norte de España, apuntaron desde Medio Ambiente.

La titular del departamento de Medio Ambiente adelantó que las «peores condiciones, con diferencia» en la reserva hidráulica de las cuencas españolas se registran ahora en la cabecera del Tajo y en el Segura. En ambos casos los embalses se encuentran entre el 13 y 14% de su capacidad, mientras que los del norte están al 50%. El informe presentado por Narbona al resto de los miembros del Ejecutivo central detalla que la cuenca del Tajo presenta una «singular situación de precariedad de su cabecera», mientras que «el arco mediterráneo es el que se encuentra en peor estado». Pese a ese análisis, el Gobierno ha decidido paralizar las obras del trasvase Júcar-Vinalopó que deben llevar agua también a l´Alacantí y las poblaciones de la Marina Baixa.
La situación es tan desesperada que, incluso, la aprobación de un nuevo trasvase desde el Tajo al Segura, que debe valorarse a principios de octubre, tendría que pasar por el Consejo de Ministros, como ocurre cuando las reservas están bajas. Según los datos del ministerio, sólo habrían unos 80 hm 3 trasvasables desde la cabecera del Tajo lo que volvería a excluir del uso de esta agua al sector agrícola. «Sería sólo para abastecimiento urbano», apuntaron desde el departamento de Medio Ambiente.

Una situación grave

Ante esta circunstancia, la ministra destacó las inversiones que su departamento está destinando para «acelerar» las obras que permitan que en los próximos dos años, «si la sequía se mantiene», se cuente con más agua el año que viene y el siguiente. De esta manera, Narbona recordó que de los 390 millones que su departamento ha invertido desde febrero de este año para combatir la sequía, más de 200 millones se han destinado a la cuenca del Segura, y destacó también el aumento de las ayudas a la cabecera del Tajo y, en general, en Castilla La Mancha, «porque está en una situación muy grave».

Narbona, que asiste a unas jornadas en Santander, destacó las decisiones tomadas por la Generalitat de Cataluña que sí ha puesto en marcha mecanismos para evitar restricciones que han permitido ahorrar hasta 45 hectómetros cúbicos lo que alargará la disponibilidad de agua más de un mes. Narbona reconoció que las autonomías tienen capacidad de decisión, aunque advirtió de que si los protocolos de sequía no son aceptados por las comunidades, «puede ser que mañana o pasado mañana el tipo de restricciones tengan que ser de mayor importancia».
Antes de clausurar los cursos sobre sostenibilidad y administración del agua que el gobierno organiza en la Universidad Menéndez Pelayo, la ministra pidió que no se creen «alarmas» en cuanto a posibles restricciones de agua en octubre. «Hasta ahora, a pesar de la dureza de la situación, hemos conseguido que no haya restricciones en ninguna ciudad para el uso doméstico y, en el futuro, si somos inteligentes, tampoco tendrá que haberlas», aseguró Narbona aunque, no obstante, Medio Ambiente dejará la decisión sobre posibles cortes en manos de los ayuntamientos. La dirigente socialista, en cualquier caso, reconoció que si la sequía permanece habrá que seguir los protocolos acordados por las confederaciones hidrográficas, aunque indicó que las restricciones serán graduales y primero en los regadíos, tal y como avanzó ayer este periódico.