50 dead in Centre and North Europe due to the flows

Fri, 26/08/2005

La Vanguardia

(Redacción y agencias.) - El número de muertos en los países del centro y este de Europa que han padecido los desbordamientos de ríos causados por las lluvias ya asciende a 50, mientras la situación comienza a normalizarse en el sur de Alemania, Austria y Suiza. En Rumanía el panorama es más desolador, tras recuperarse ayer los cuerpos sin vida de las 13 personas arrastradas por las aguas tras las lluvias torrenciales del martes pasado, que se añaden a las 28 de cuya muerte ya se tenía constancia.
A través de los Alpes, helicópteros militares transportaron víveres a valles completamente inundados y evacuaron desde turistas desamparados hasta rebaños de vacas amenazados por el creciente nivel de agua. En Berna, capital de Suiza, el río Aare rompió los cristales e irrumpió súbitamente en una tienda de ropa para niños, dejando a su paso carritos y juguetes flotando en las aguas fangosas. Torrentes de agua se introdujeron también en viviendas en la ciudad y las casas se quedaron sin luz, electricidad o teléfono.
'Montones de personas han perdido todas sus existencias', dijo Franz Bachmann, bombero que ha dirigido las operaciones de evacuación en la ciudad. Tras amainar las fuertes precipitaciones, muchos ciudadanos de Berna contemplaron con lágrimas en los ojos como el agua retrocedía lentamente e iba descubriendo calles y plazas sumergidas en el fango. Los 1.100 residentes en los pisos bajos de la ciudad fueron evacuados, informó el portavoz de la policía, Franz Maerki, que además previno a la gente de no regresar a sus casas en caso de que se produjesen nuevas avalanchas de agua provenientes de las montañas.
En Austria, las autoridades han bajado la alerta de posibles desbordamientos del Danubio y otros ríos tras cesar las fuertes lluvias e inundaciones que afectaron a gran parte del territorio de esta república y se cobraron cuatro vidas. Miles de voluntarios, el ejército y los bomberos continuaban ayer con la limpieza y reconstrucción de las zonas del oeste del país, las más afectadas por el temporal. Los daños sufridos en el pequeño estado federado de Vorarlberg, fronterizo con Suiza, ascienden 'al menos' a 100 millones de euros, según su gobernador, Herbert Sausgruber. Las labores de reconstrucción y limpieza han comenzado también en el estado federado de Tirol, donde el ejército y los bomberos trabajan a destajo desde hace cuatro días, pero aún quedan lugares aislados en esta región de alta montaña. Así, en el valle de Paznaun (Paznauntal) están 'atrapados' unos 6.000 turistas que sólo pueden abandonar su lugar de vacaciones en helicóptero, aunque su situación ha mejorado sensiblemente porque se pudo restaurar la comunicación telefónica y por internet.
En Rumanía, en el distrito transilvano de Harghita, donde se produjeron olas de hasta 4 metros de altura, tres personas continúan desaparecidas, entre ellas una niña de cuatro años hija de un político local, informó la televisión Realitatea TV.
Szillard Stranitsky, que condujo por la zona el miércoles por la noche, dijo que los coches no podían moverse debido al fango y el agua en las calles. 'Estaba asustado por la posibilidad de conducir sobre un cuerpo, humano o animal, porque no podía ver nada -dijo-. Pero continuamos alerta'.
En Alemania, en la región de Kelheim, las autoridades activaron ayer las alarmas, tras registrarse un aumento de casi dos metros en el caudal del Danubio, que ahora alcanza los 7,40 metros, por lo que más mil bomberos, soldados y voluntarios levantan desde anoche barreras con sacos de arena e intentan bombear el agua que se filtra. También se inundó el monasterio Weltenburg, del siglo XVII y descrito como el más antiguo de Bavaria, dijo el padre Benedikt. Un hombre de 28 años se convirtió en Alemania el pasado miércoles en la primera víctiam por inundaciones en este país, en la ciudad de Rosenheim (sudeste de Alemania), cuando su bote neumático zozobró.
En el sur de Polonia, los ríos se salieron de sus cauces y colapsaron por lo menos siete puentes, sin producirse víctimas.
Por otro lado, la Agencia Espacial Europea (ESA) informó ayer de que los satélites de control medioambiental europeos contribuirán notablemente a pronosticar catástrofes naturales como las actuales inundaciones en Europa central.

La aparición de 13 nuevos cadáveres en Rumanía eleva el balance mortal de la catástrofe; la situación empezó ayer a normalizarse

Satélites ambientales ayudarán a pronosticar catástrofes naturales, según informó ayer la Agencia Espacial Europea