Farmers study the change of the Aguas del Júcar opinion and they suggest a minidivert to Sagunto
Wed, 24/08/2005
La reunión entre los sindicatos agrarios terminó sin acuerdos sustanciales, pero con el apoyo explícito de los valencianos para que «llegue agua a Alicante»
DAVID MARTÍNEZ
ALICANTE. La tercera reunión entre las asociaciones agrarias valencianas para abordar la problemática del Júcar-Vinalopó terminó ayer sin puntos de acuerdo sustanciales, aunque el portavoz de Asaja Alicante, Ramón Espinosa, se felicitó de que los participantes lograran «aparcar el contenido político» para centrarse, esta vez sí, en lo «estrictamente técnico».
Según avanzó Espinosa, se va a dotar a la Comisión Técnica de carácter permanente, para abordar otros trasvases como el Tajo-Segura e incluso el derogado del Ebro, así como la modernización de regadíos y, en general, la gestión de los recursos hídricos en la Comunidad. Por ello, la próxima reunión se llevará a cabo el día 29 de septiembre, cuando el Consejo de Ministros ya se haya pronunciado sobre el cambio de trazado. Hasta entonces, las organizaciones agrarias participantes estudiarán diversos documentos oficiales con la finalidad de elaborar un informe «lo más consensuado posible» respecto a la viabilidad del trasvase, en sus dimensiones económica, medioambiental y de calidad y cantidad del agua a trasvasar.
Pese a que la asociación agraria alicantina se mostró «satisfecha» porque sus homólogas valencianas manifestaron su apoyo a Alicante, Espinosa fue tajante al afirmar que «Asaja sigue en la misma línea», ya que «no observamos ninguna circunstancia objetiva» que justifique el cambio de toma. En este sentido, el portavoz de los agricultores alicantinos lamentó la «inseguridad jurídica» que permite que «un proyecto consensuado se sustituya por otro que dilata su ejecución»
Análisis de documentos
Respecto a los documentos sobre los que se trabajará con vistas a la siguiente reunión, el portavoz de Asaja explicó que se centrarán especialmente en los dos informes elaborados por la sociedad Aguas del Júcar, uno en abril contrario al cambio de trazado, y otro de julio que contradecía al primero, para indagar «qué ha pasado en tres meses» para que el contenido de los mismos sea «totalmente opuesto». Además se estudiarán las conclusiones de otras comisiones técnicas que elaboraron simulaciones a través de estudios de campo. No obstante, Espinosa recordó que, hasta el día de la citada reunión, se podrán proponer «tantos documentos como sean oportunos».
A este respecto, el presidente de Asaja Alicante, Eladio Aniorte, que reiteró que su agrupación apuesta por la toma en Cortes de Pallás porque, según sus datos, «hay 50 hectómetros cúbicos sobrantes», aclaró que «se rechazarán de plano» todos aquellos documentos cuya factura corresponda a Nueva Cultura del Agua. «Si el informe está firmado por Antonio Estevan, pierde toda su credibilidad». En este sentido, explicó que el nuevo trazado supondría pasar por dos parques naturales, el de la Marjal de Cullera y el de la Sierra de Corbera.
Por su parte, el representante de AVA Asaja-Valencia, José Campos, quiso dejar claro que «los regadíos de Alicante tienen que tener agua». Sin embargo, en cuanto a la polémica de la toma, afirmó que el PHJ, a cuyo consenso se ha remitido en tantas ocasiones, «no especificaba el punto de toma», por lo que, «si el de Cortes es problemático, podemos cambiarlo perfectamente». Es más, según Campos, el consenso de 1997 no fue tal, ya que «varios sindicatos expresaron sus reparos al Júcar-Vinalopó, especialmente por la cuestión de la modernización de regadíos». En cuanto a la toma en Cortes, es problemática porque «se trata de un embalse regulado, que pertenece a Iberdrola, donde no hay sobrantes».
«Hemos estado engañados»
Una solución para aliviar las necesidades hídricas del sur de la Comunidad, según expresó Campos, sería «un minitrasvase desde el Ebro hasta Sagunto», opción que considera que el Gobierno «vería con buenos ojos». De esta manera, se aliviaría la presión de la zona, con lo que se liberarían recursos para trasvasar al Vinalopó.
Por su parte, tanto el representante de La Unió como el de UPA coincidieron en reiterar su petición de sacar el debate político de la comisión, ya que «conseguiremos más si estamos unidos». Sin embargo, mientras Pedro Carrasco, de UPA, abogó por la toma en el azud de la Marquesa porque así «se respeta el cauce del río», el responsable de La Unió en Alicante, Ernest Blasco, prefirió no pronunciarse. Aun así, ambos coincidieron también en que «quizá se nos ha engañado diciendo que había agua en Cortes».
DAVID MARTÍNEZ
ALICANTE. La tercera reunión entre las asociaciones agrarias valencianas para abordar la problemática del Júcar-Vinalopó terminó ayer sin puntos de acuerdo sustanciales, aunque el portavoz de Asaja Alicante, Ramón Espinosa, se felicitó de que los participantes lograran «aparcar el contenido político» para centrarse, esta vez sí, en lo «estrictamente técnico».
Según avanzó Espinosa, se va a dotar a la Comisión Técnica de carácter permanente, para abordar otros trasvases como el Tajo-Segura e incluso el derogado del Ebro, así como la modernización de regadíos y, en general, la gestión de los recursos hídricos en la Comunidad. Por ello, la próxima reunión se llevará a cabo el día 29 de septiembre, cuando el Consejo de Ministros ya se haya pronunciado sobre el cambio de trazado. Hasta entonces, las organizaciones agrarias participantes estudiarán diversos documentos oficiales con la finalidad de elaborar un informe «lo más consensuado posible» respecto a la viabilidad del trasvase, en sus dimensiones económica, medioambiental y de calidad y cantidad del agua a trasvasar.
Pese a que la asociación agraria alicantina se mostró «satisfecha» porque sus homólogas valencianas manifestaron su apoyo a Alicante, Espinosa fue tajante al afirmar que «Asaja sigue en la misma línea», ya que «no observamos ninguna circunstancia objetiva» que justifique el cambio de toma. En este sentido, el portavoz de los agricultores alicantinos lamentó la «inseguridad jurídica» que permite que «un proyecto consensuado se sustituya por otro que dilata su ejecución»
Análisis de documentos
Respecto a los documentos sobre los que se trabajará con vistas a la siguiente reunión, el portavoz de Asaja explicó que se centrarán especialmente en los dos informes elaborados por la sociedad Aguas del Júcar, uno en abril contrario al cambio de trazado, y otro de julio que contradecía al primero, para indagar «qué ha pasado en tres meses» para que el contenido de los mismos sea «totalmente opuesto». Además se estudiarán las conclusiones de otras comisiones técnicas que elaboraron simulaciones a través de estudios de campo. No obstante, Espinosa recordó que, hasta el día de la citada reunión, se podrán proponer «tantos documentos como sean oportunos».
A este respecto, el presidente de Asaja Alicante, Eladio Aniorte, que reiteró que su agrupación apuesta por la toma en Cortes de Pallás porque, según sus datos, «hay 50 hectómetros cúbicos sobrantes», aclaró que «se rechazarán de plano» todos aquellos documentos cuya factura corresponda a Nueva Cultura del Agua. «Si el informe está firmado por Antonio Estevan, pierde toda su credibilidad». En este sentido, explicó que el nuevo trazado supondría pasar por dos parques naturales, el de la Marjal de Cullera y el de la Sierra de Corbera.
Por su parte, el representante de AVA Asaja-Valencia, José Campos, quiso dejar claro que «los regadíos de Alicante tienen que tener agua». Sin embargo, en cuanto a la polémica de la toma, afirmó que el PHJ, a cuyo consenso se ha remitido en tantas ocasiones, «no especificaba el punto de toma», por lo que, «si el de Cortes es problemático, podemos cambiarlo perfectamente». Es más, según Campos, el consenso de 1997 no fue tal, ya que «varios sindicatos expresaron sus reparos al Júcar-Vinalopó, especialmente por la cuestión de la modernización de regadíos». En cuanto a la toma en Cortes, es problemática porque «se trata de un embalse regulado, que pertenece a Iberdrola, donde no hay sobrantes».
«Hemos estado engañados»
Una solución para aliviar las necesidades hídricas del sur de la Comunidad, según expresó Campos, sería «un minitrasvase desde el Ebro hasta Sagunto», opción que considera que el Gobierno «vería con buenos ojos». De esta manera, se aliviaría la presión de la zona, con lo que se liberarían recursos para trasvasar al Vinalopó.
Por su parte, tanto el representante de La Unió como el de UPA coincidieron en reiterar su petición de sacar el debate político de la comisión, ya que «conseguiremos más si estamos unidos». Sin embargo, mientras Pedro Carrasco, de UPA, abogó por la toma en el azud de la Marquesa porque así «se respeta el cauce del río», el responsable de La Unió en Alicante, Ernest Blasco, prefirió no pronunciarse. Aun así, ambos coincidieron también en que «quizá se nos ha engañado diciendo que había agua en Cortes».