La Comisión Permanente de la Comisión de Desembalse de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) decidió hoy cesar, "con carácter general, los desembalses para riego a partir del próximo 1 de septiembre" y que el plazo se extenderá hasta el día 15 con algún desembalse puntual "para atender aquellas necesidades de riego que no hayan alcanzado las dotaciones autorizadas por la Comisión y para las que sean técnicamente viables".
En un comunicado remitido a Europa Press, la Comisión indicó que la decisión no supone "ninguna medida excepcional" y que sólo responde a que, a finales de agosto, "ya se habrá desembalsado todo el volumen de agua para riego acordado, un total de 1.350 hectómetros cúbicos".
Asimismo, informó de que, una vez terminada la campaña de riego, el volumen de agua embalsado "podría rondar el 35 por ciento" del total, cifra "normal" en el inicio del nuevo año hidrológico, y que, "sólo en el caso de que las precipitaciones fueran escasas a partir de esa fecha, podría hablarse de situación de prealerta y habría que tomar medidas recogidas en el Protocolo de Actuación de Sequías" que presentó ayer la CHG.
ACLARACION SOBRE LA LIMITACION DE REGADIOS
La CHG quiso aclarar que la limitación de nuevos regadíos y la concesión de aguas subterráneas para éstos que se aprobó ayer no tiene "relación directa con la situación de sequía meteorológica que padece nuestro país en los últimos meses".
Según la nota, la limitación de regadíos es "una de las medidas reflejadas en el Acuerdo por el Agua en la cuenca del Guadalquivir", aprobado por el Consejo del Agua de la cuenca el pasado 17 de marzo y ratificado por la Ministra de Medio Ambiente y las consejerías de Medio Ambiente y Agricultura y Pesca de la Junta, y responde a la "aplicación de la nueva política en materia de agua, en la que la búsqueda de nuevos recursos se sustituye por la gestión de los recursos disponibles, fomentando el ahorro de agua".