Murcia .- Water bill will raise 19% to pay the desalination plants
Mon, 01/08/2005
El consejero de Agua, Antonio Cerdá, apunta que gran parte de la agricultura murciana podría desaparecer a partir de 2010 por la pérdida de competitividad
M. BUITRAGO
MURCIA. La Región de Murcia ostentará en breve el récord absoluto del precio del agua para abastecimientos, conforme se vayan poniendo en marcha las desalinizadoras ahora en obras. El Programa Agua del Ministerio de Medio Ambiente garantizará todas las necesidades de una población de más de dos millones de habitantes en un plazo de dos años, pero eso tiene un precio.
La Mancomunidad del Taibilla tiene previsto aplicar el año que viene una importante subida del 19 por ciento en las tarifas del agua que factura a los 77 municipios de Murcia, sur de Alicante y Albacete. De esta forma, el recibo pasará de los 31,13 a los 37,13 céntimos por metro cúbico. Los usuarios notarán la subida en sus bolsillos cuando los ayuntamientos repercutan este incremento, que en términos absolutos suele ser superior por los gastos adicionales de los servicios de suministro.
El programa de desalinización del Ministerio va finalmente a cargo del bolsillo de los usuarios de la cuenca del Segura. Cada metro cúbico de agua marina que se convierte en dulce cuesta en origen entre 50 y 65 céntimos (118 pesetas). Esto es hasta cinco veces más caro de lo que se paga por el agua del trasvase Tajo-Segura. La subida del año que viene obedece a que la Mancomunidad del Taibilla inyectará en el sistema unos 35 hectómetros cúbicos más de agua desalinizada procedente de San Pedro del Pinatar I y la ampliación de la planta de Alicante.
El escenario a medio plazo apunta a que la mitad del agua proporcionada por Canales del Taibilla será desalinizada y se destinará a Alicante y a los municipios costeros murcianos.
Los problemas acabarán, según el Ministerio, en el año 2008, cuando las desalinizadoras aporten como mínimo 120 hectómetros; los abastecimientos de la población, del turismo, de las industrias y de los comercios quedarán resueltos; se terminará el conflicto con los regadíos; y el agua habrá que pagarla cada vez más cara.
Consumo turístico y familiar
El recibo aumentará más de un 60 por ciento en los tres próximos años. Lo hará de forma paralela a la producción de las desalinizadoras. Un elemento para el debate es si los nuevos desarrollos turísticos deben pagar lo mismo que una familia de Murcia o de Alicante. El Ministerio aprobó el año pasado una horquilla de tarifas que no es nada favorable para los murcianos, puesto que el precio del agua nueva puede alcanzar hasta 0,90 euros por metro cúbico, y los 1,3 euros si es para el turismo.
El consejero murciano de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, expresó ayer su temor por la evolución de los acontecimientos derivados de la falta de agua para riego. La agricultura de la cuenca del Segura se verá en serios problemas en el año 2010 si se mantiene la situación de déficit de agua y llegó a sugerir que podría desaparecer en gran parte por la pérdida de competitividad. Indicó que el agua desalinizada no es apta para la agricultura, puesto que a su juicio no posee las características adecuadas para los regadíos y porque resulta demasiado cara, y si los regantes tienen que repercutir finalmente el precio del agua desalinizada, sus productos se encarecerán y perderán mercados.
M. BUITRAGO
MURCIA. La Región de Murcia ostentará en breve el récord absoluto del precio del agua para abastecimientos, conforme se vayan poniendo en marcha las desalinizadoras ahora en obras. El Programa Agua del Ministerio de Medio Ambiente garantizará todas las necesidades de una población de más de dos millones de habitantes en un plazo de dos años, pero eso tiene un precio.
La Mancomunidad del Taibilla tiene previsto aplicar el año que viene una importante subida del 19 por ciento en las tarifas del agua que factura a los 77 municipios de Murcia, sur de Alicante y Albacete. De esta forma, el recibo pasará de los 31,13 a los 37,13 céntimos por metro cúbico. Los usuarios notarán la subida en sus bolsillos cuando los ayuntamientos repercutan este incremento, que en términos absolutos suele ser superior por los gastos adicionales de los servicios de suministro.
El programa de desalinización del Ministerio va finalmente a cargo del bolsillo de los usuarios de la cuenca del Segura. Cada metro cúbico de agua marina que se convierte en dulce cuesta en origen entre 50 y 65 céntimos (118 pesetas). Esto es hasta cinco veces más caro de lo que se paga por el agua del trasvase Tajo-Segura. La subida del año que viene obedece a que la Mancomunidad del Taibilla inyectará en el sistema unos 35 hectómetros cúbicos más de agua desalinizada procedente de San Pedro del Pinatar I y la ampliación de la planta de Alicante.
El escenario a medio plazo apunta a que la mitad del agua proporcionada por Canales del Taibilla será desalinizada y se destinará a Alicante y a los municipios costeros murcianos.
Los problemas acabarán, según el Ministerio, en el año 2008, cuando las desalinizadoras aporten como mínimo 120 hectómetros; los abastecimientos de la población, del turismo, de las industrias y de los comercios quedarán resueltos; se terminará el conflicto con los regadíos; y el agua habrá que pagarla cada vez más cara.
Consumo turístico y familiar
El recibo aumentará más de un 60 por ciento en los tres próximos años. Lo hará de forma paralela a la producción de las desalinizadoras. Un elemento para el debate es si los nuevos desarrollos turísticos deben pagar lo mismo que una familia de Murcia o de Alicante. El Ministerio aprobó el año pasado una horquilla de tarifas que no es nada favorable para los murcianos, puesto que el precio del agua nueva puede alcanzar hasta 0,90 euros por metro cúbico, y los 1,3 euros si es para el turismo.
El consejero murciano de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, expresó ayer su temor por la evolución de los acontecimientos derivados de la falta de agua para riego. La agricultura de la cuenca del Segura se verá en serios problemas en el año 2010 si se mantiene la situación de déficit de agua y llegó a sugerir que podría desaparecer en gran parte por la pérdida de competitividad. Indicó que el agua desalinizada no es apta para la agricultura, puesto que a su juicio no posee las características adecuadas para los regadíos y porque resulta demasiado cara, y si los regantes tienen que repercutir finalmente el precio del agua desalinizada, sus productos se encarecerán y perderán mercados.