El año hidrológico 2004-2005 es el tercero más seco en la cuenca del Segura de los últimos 75 años, sólo superado por los de la sequía 1993-95, explicaron a EFE fuentes de la Confederación Hidrográfica del Segura.
Las aportaciones al Segura de octubre a mayo de este año sólo alcanzaron los 132 hectómetros cúbicos, un volumen que no se recordaba desde el año 1930, salvo la citada salvedad de la sequía 1993-94, en que se registraron 108,07 hectómetros, y 1994-95, con 104,17 hectómetros.
En aquella sequía como ahora tuvo que ser el Consejo de Ministros el que tuvo que decidir, en lugar de la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura, un desembalse para que la cuenca del Segura pudiera pasar los meses de verano, salvando el arbolado y garantizando el abastecimiento humano.
Embalses del Segura como el de Valdeinfierno y Puentes sólo almacenan a día de hoy 1 hectómetro cúbico de agua; el de La Cierva (Mula) tiene 2 hectómetros, al igual que el de Santomera, mientras que el Alfonso XIII, Argos y Taibilla cuentan con 5 hectómetros.
El embalse de la cuenca Segura que más agua tiene en estos momentos es el de La Pedrera (Alicante), con 69 hectómetros, y con algo más de la mitad el Cenajo (Albacete), con 39, mientras que Camarillas cuenta con 13, Fuensanta, 12, y Talave, 11, los tres en Albacete.
Los embalses del Segura están a día de hoy al 15,9 por ciento de su capacidad total, cuando el año anterior por estas fechas estaba al 32,2 por ciento, dos años antes, al 19,1.
Además la media de los cinco años anteriores por estas fechas era de un 24,9 por ciento de volumen de agua almacenado en los pantanos del Segura, pero la media de los últimos 10 años ha sido del 26,1 por ciento, todos ellos superando el porcentaje que a día de hoy se alcanza en esos embalses.
Los embalses del Segura cuentan con 180 hectómetros cúbicos de agua, pero tal día como hoy del año 2000 tenían 226 hectómetros, y al año anterior se registraban 251.