Work of La Breña II will be finished on September, according to Narbona
Thu, 23/06/2005
Cuando apenas han pasado unos días desde que se iniciaran las obras de construcción de La Breña II, el Gobierno ya ha puesto una fecha para que acaben los trabajos: septiembre de 2008. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró ayer que la empresa adjudicataria de las actuaciones, la constructora Dragados, las acabará en los 40 meses fijados, después que las obras comenzaran el pasado 28 de mayo, tal y como adelantó el Día.
Además, Narbona anunció la creación de una especie de comisión de seguimiento sobre el impacto ambiental que provocará la construcción de esta presa gigantesca, que tendrá una capacidad de más de 800 hectómetros cúbicos y una altura cercana a los 125 metros. Este grupo ad hoc, según la ministra, estará constituido por la Administración central, la Junta de Andalucía, los ayuntamientos de la zona y la Comisión Europea para "realizar el seguimiento de la obra conforme a la legislación comunitaria", matizó.
Cristina Narbona destacó la importancia de este grupo de trabajo porque, al seguir el proceso de acuerdo con las leyes europeas, hay mayores posibilidades de acceder a las ayudas económicas de la Unión Europea. De los 120 millones que costará la construcción de la presa, la mitad se sufragará gracias a los fondos Feder. Esta comisión vigilará que no se amplíen los regadíos de la zona, que se favorezca en todo momento el ahorro de agua y que se estudie la posibilidad de efectuar excavaciones subterráneas.
Narbona, en su intervención de ayer ante el Senado, culpó al Gobierno del PP de la escasez de agua que vive la zona en la que se construirá la presa de La Breña II, que permitirá el regadío de cerca de 350.000 hectáreas. Según la ministra, el plan de medidas de compensación ambiental del embalse "tardó bastante tiempo en ser elaborado" por el Gobierno anterior, aunque aseguró que el Ejecutivo socialista lo ha acelerado y aprobado por un valor de 20 millones de euros.
La Breña II se constituye como el último pantano que se construirá en la cuenca del Guadalquivir, según han advertido ya distintos responsables de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, ya que consideran que el río más importante del Sur de España no puede soportar más presas. De todas formas, este nuevo pantano nace con la misión de ayudar a la regulación de toda la cuenca y garantizar el regadío en la comarca de la Vega del Guadalquivir. El embalse, que se construye entre los términos de Almodóvar del Río y Villaviciosa de Córdoba, se elevará aguas abajo del actual pantano de La Breña, que quedará inundado en cuanto se comience a rellenar el vaso de esta nueva infraestructura. Además, la obra se dejará sentir también en el parque natural de la Sierra de Hornachuelos, ya que invadirá parte de la zona protegida, por lo que se intentará minimizar su impacto ambiental.
De momento, la empresa Dragados ha iniciado los primeros movimientos de tierra en la zona en la que se levantarán los 125 metros de presa, está instalando sus oficinas en el lugar y arreglando los caminos de acceso, en previsión de la llegada de la maquinaria pesada que tendrá que trabajar durante 40 meses en este embalse. Además, de forma paralela, el Gobierno ha licitado la redacción de otro proyecto faraónico para bombear el agua desde el cauce del río Guadalquivir hasta el propio embalse de La Breña II, situado sobre el Guadiato. Este proyecto, que no se incluye dentro del presupuesto de las obras de la presa, estará en marcha antes de que se acaben las obras de la infraestructura, previstas para septiembre de 2008. Su objetivo principal será regular el cauce del Guadalquivir durante la temporada intensa de lluvias para evitar inundaciones y aliviar a las zonas más altas de la cuenca.
La Breña II será el segundo embalse más grande de Andalucía con sus 850 hectómetros cúbicos de capacidad, sólo superado por el de Iznájar, capaz de aguantar 981 hectómetros de agua.
Además, Narbona anunció la creación de una especie de comisión de seguimiento sobre el impacto ambiental que provocará la construcción de esta presa gigantesca, que tendrá una capacidad de más de 800 hectómetros cúbicos y una altura cercana a los 125 metros. Este grupo ad hoc, según la ministra, estará constituido por la Administración central, la Junta de Andalucía, los ayuntamientos de la zona y la Comisión Europea para "realizar el seguimiento de la obra conforme a la legislación comunitaria", matizó.
Cristina Narbona destacó la importancia de este grupo de trabajo porque, al seguir el proceso de acuerdo con las leyes europeas, hay mayores posibilidades de acceder a las ayudas económicas de la Unión Europea. De los 120 millones que costará la construcción de la presa, la mitad se sufragará gracias a los fondos Feder. Esta comisión vigilará que no se amplíen los regadíos de la zona, que se favorezca en todo momento el ahorro de agua y que se estudie la posibilidad de efectuar excavaciones subterráneas.
Narbona, en su intervención de ayer ante el Senado, culpó al Gobierno del PP de la escasez de agua que vive la zona en la que se construirá la presa de La Breña II, que permitirá el regadío de cerca de 350.000 hectáreas. Según la ministra, el plan de medidas de compensación ambiental del embalse "tardó bastante tiempo en ser elaborado" por el Gobierno anterior, aunque aseguró que el Ejecutivo socialista lo ha acelerado y aprobado por un valor de 20 millones de euros.
La Breña II se constituye como el último pantano que se construirá en la cuenca del Guadalquivir, según han advertido ya distintos responsables de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, ya que consideran que el río más importante del Sur de España no puede soportar más presas. De todas formas, este nuevo pantano nace con la misión de ayudar a la regulación de toda la cuenca y garantizar el regadío en la comarca de la Vega del Guadalquivir. El embalse, que se construye entre los términos de Almodóvar del Río y Villaviciosa de Córdoba, se elevará aguas abajo del actual pantano de La Breña, que quedará inundado en cuanto se comience a rellenar el vaso de esta nueva infraestructura. Además, la obra se dejará sentir también en el parque natural de la Sierra de Hornachuelos, ya que invadirá parte de la zona protegida, por lo que se intentará minimizar su impacto ambiental.
De momento, la empresa Dragados ha iniciado los primeros movimientos de tierra en la zona en la que se levantarán los 125 metros de presa, está instalando sus oficinas en el lugar y arreglando los caminos de acceso, en previsión de la llegada de la maquinaria pesada que tendrá que trabajar durante 40 meses en este embalse. Además, de forma paralela, el Gobierno ha licitado la redacción de otro proyecto faraónico para bombear el agua desde el cauce del río Guadalquivir hasta el propio embalse de La Breña II, situado sobre el Guadiato. Este proyecto, que no se incluye dentro del presupuesto de las obras de la presa, estará en marcha antes de que se acaben las obras de la infraestructura, previstas para septiembre de 2008. Su objetivo principal será regular el cauce del Guadalquivir durante la temporada intensa de lluvias para evitar inundaciones y aliviar a las zonas más altas de la cuenca.
La Breña II será el segundo embalse más grande de Andalucía con sus 850 hectómetros cúbicos de capacidad, sólo superado por el de Iznájar, capaz de aguantar 981 hectómetros de agua.