Farmers report water´s leaks over 30 litres per second at Amadorio´s swamp

Thu, 09/06/2005

Levante

Los trabajadores del campo de La Vila protestan porque el agua del pantano se mezcla
con el agua procedente de la depuradora con el fin de reducir su excesiva salinidad
C. Ferrer, la Vila Joiosa
Agricultores de La Vila han detectado la constante salida de agua de la presa del Amadorio, por medio de sus aliviaderos, como mínimo media «filà» de caudal por segundo, el equivalente a unos 30 litros por segundo aproximadamente, que acaban yendo a parar a la balsa de riego vilera, donde se mezcla con agua procedente de la depuradora de Benidorm, es decir, con agua residual que se emplea para el riego de los campos de cultivo vileros.
La intención de esta mezcla de agua, según indican los agricultores, es rebajar la salinidad del agua de riego procedente de la depuradora, que es de unos 2,5 gramos de sal por litro, mientras que si se mezcla con un aporte de un 30% de agua del pantano se logra reducir esta cifra hasta unos 1,80 gramos de sal por litro. Un hecho que se prolongará hasta mediados de agosto. Una situación de salinidad de estas aguas para riego que lleva afectando a los árboles frutales, desde hace demasiado tiempo, y que ha provocado que regantes de Altea se hayan dado de baja del riego de la depuradora de Benidorm y hayan tramitado su alta en el riego del Algar, aun teniendo que abonar unas cuotas mayores.
En La Vila Joiosa se suele regar todos los días, menos los sábados y los domingos, con una potencia de caudal de riego de unos 40 litros por segundo. Sin embargo, los agricultores preferirían regar directamente con esa agua del pantano, que tiene un caudal similar al que se deja salir por los aliviaderos, y así evitar el agua de la depuradora y su sal. Asimismo, los agricultores han expresado también su desacuerdo en relación a la construcción de la desalinizadora para eliminar la sal del agua de la depuradora de Benidorm, que suministra agua de riego a La Vila, porque «todavía no se ha hecho nada y necesitamos demasiado esa construcción». Una situación que no les parece comprensible en una época de sequía como la actual y teniendo que regar con aguas residuales a diario