Heavy drought at Castellon, according to farmers. Scarcity of rains since one year ago
Tue, 07/06/2005
La provincia de Castellón se encuentra en una situación de "sequía hídrica" , término técnico con el que se identifica la falta de lluvias durante un año. Así lo anunciaron ayer los sindicatos agrarios y la Federación de Regantes de la Comunidad Valenciana quienes destacaron que, a la escasez de precipitaciones, se le ha sumado el descenso del agua almacenada en los pantanos y que ayer había caído un 1,6% respecto a la semana pasada.
En estas circunstancias críticas, en el punto de mira se encuentra la política hídrica desarrollada por los diferentes Gobiernos españoles, que todavía no se ha plasmado en soluciones. Tal y como publicó Mediterráneo , hace 10 años, el Ejecutivo socialista se mostraba a favor del trasvase y en contra de las desaladoras como forma de acabar con el déficit hídrico.
Al llegar al poder, el PP empezó de cero en la política de agua. El nuevo Gobierno socialista y la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, decidieron volver a comenzar, esta vez, pensando en las desaladoras como la solución. Durante todo este tiempo, el agua se ha convertido en un "problema estructural" , señalan los agricultores.
PRECIPITACIONES Desde el Instituto Nacional de Metereología (INM) anunciaron ayer que, en el mes de mayo, "las precipitaciones han sido nulas en los pluviómetros instalados en la provincia de Castellón" . Además, destacaron que, en la vertiente mediterránea, el último mes, las lluvias estuvieron un 5% por debajo de la media histórica del año 1930.
Ante esta situación, el presidente de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana, José Pascual, destacó ayer la pérdida de calidad del agua embalsada,
"por el aumento de la salinidad" . Además, indicó la necesidad de crear pantanos en la provincia que "ayudarían a superar estos momentos" , de los que sólo se salva la cuenca del Millars.
El presidente de La Unió de Llauradors, Joan Brusca, mostró su preocupación por la situación.
"Desde el año 95 no había una sequía hídrica" señaló, e indicó que "hace falta poner sobre la mesa medidas urgentes por parte de las Administraciones" . Los más afectados por la sequía actual son los ganaderos del interior de la provincia y los productores de cereales.
Brusca propuso como actuaciones imprescindibles crear una comisión de seguimiento de carácter autonómico, conceder ayudas directas por la pérdida de rentas, suministrar agua y alimentos para la ganadería extensiva y refinanciar los créditos adquiridos, aplazando su pago, entre otras. Por su parte, el secretario técnico de Fepac, Doménech Nácher, anunció que trabajan para que las cubas forestales abastezcan de agua al interior.
Las previsiones apuntan a que la sequía seguirá. El catedrático de climatología de la UJI, José Quereda, indicó que en mayo la temperatura fue de 18,5 grados, la más alta de los último tres años. Al calor se han sumado la falta de lluvias que, según dijo, "cada vez exiten menos probabilidades de que lleguen" .
En estas circunstancias críticas, en el punto de mira se encuentra la política hídrica desarrollada por los diferentes Gobiernos españoles, que todavía no se ha plasmado en soluciones. Tal y como publicó Mediterráneo , hace 10 años, el Ejecutivo socialista se mostraba a favor del trasvase y en contra de las desaladoras como forma de acabar con el déficit hídrico.
Al llegar al poder, el PP empezó de cero en la política de agua. El nuevo Gobierno socialista y la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, decidieron volver a comenzar, esta vez, pensando en las desaladoras como la solución. Durante todo este tiempo, el agua se ha convertido en un "problema estructural" , señalan los agricultores.
PRECIPITACIONES Desde el Instituto Nacional de Metereología (INM) anunciaron ayer que, en el mes de mayo, "las precipitaciones han sido nulas en los pluviómetros instalados en la provincia de Castellón" . Además, destacaron que, en la vertiente mediterránea, el último mes, las lluvias estuvieron un 5% por debajo de la media histórica del año 1930.
Ante esta situación, el presidente de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana, José Pascual, destacó ayer la pérdida de calidad del agua embalsada,
"por el aumento de la salinidad" . Además, indicó la necesidad de crear pantanos en la provincia que "ayudarían a superar estos momentos" , de los que sólo se salva la cuenca del Millars.
El presidente de La Unió de Llauradors, Joan Brusca, mostró su preocupación por la situación.
"Desde el año 95 no había una sequía hídrica" señaló, e indicó que "hace falta poner sobre la mesa medidas urgentes por parte de las Administraciones" . Los más afectados por la sequía actual son los ganaderos del interior de la provincia y los productores de cereales.
Brusca propuso como actuaciones imprescindibles crear una comisión de seguimiento de carácter autonómico, conceder ayudas directas por la pérdida de rentas, suministrar agua y alimentos para la ganadería extensiva y refinanciar los créditos adquiridos, aplazando su pago, entre otras. Por su parte, el secretario técnico de Fepac, Doménech Nácher, anunció que trabajan para que las cubas forestales abastezcan de agua al interior.
Las previsiones apuntan a que la sequía seguirá. El catedrático de climatología de la UJI, José Quereda, indicó que en mayo la temperatura fue de 18,5 grados, la más alta de los último tres años. Al calor se han sumado la falta de lluvias que, según dijo, "cada vez exiten menos probabilidades de que lleguen" .