Living without water. Lleida farmers and people are bearing the heavy drought everyday
Sun, 05/06/2005
Comiols es un pequeño núcleo agregado de Artesa de Segre, en la comarca de la Noguera, que ya sabe lo que es no disponer de agua para el consumo doméstico a causa de la sequía. Aquí sólo vive ahora una familia, que depende del transporte de agua en un camión cuba para poder hacer frente a la situación.
«Una vez por semana les suministramos agua en un camión cisterna.En esta casa de Comiols dependen exclusivamente del agua de la lluvia para llenar los depósitos de los que se abastecen para su vida diaria y como hace tanto tiempo que no llueve, se han quedado sin reservas», explica Domènec Paris, alcalde de Artesa de Segre.
No es el único pequeño pueblo de las comarcas de Lleida que desde hace algunas semanas depende del agua que les llega en camiones. En el Pallars Jussà hay varios núcleos, como La Torre de Cabdella o Sant Esteve de la Sarga, que también han agotado los depósitos y tienen que llenarlos con agua de fuera para poder hacer frente al abastecimiento doméstico y también de las granjas.
Antoni Avellana tiene una granja de terneros en Muller, un núcleo de la comarca de la Segarra que depende del municipio de Montornés.«Cada viernes o sábado viene el camión cuba a traer agua porque si no la granja por ejemplo no podría subsistir. En estos pueblos tan pequeños no nos abastecemos, como las poblaciones grandes, de los pantanos o los canales, sino de pozos y como hace tanto tiempo que no llueve una cantidad importante de agua se han secado».
En total, en las comarcas leridanas hay en estos momentos núcleos de población de seis municipios de las comarcas de la Noguera, Alt Urgell, Alta Ribagorøa y Pallars Jussà que tienen problemas de suministro de agua potable por culpa de la sequía.
En Solsona, el Ayuntamiento ya ha tomado medidas para intentar evitar que se tenga que llegar a las restricciones del consumo doméstico. Por este motivo, esta semana ha enviado una carta a los vecinos en la que se les recomienda que hagan un uso responsable del agua y la ahorren en sus actividades diarias. Además, el consistorio ha decidido cerrar las fuentes de la población y dejar de regar con agua potable los jardines públicos. También en Guissona el consistorio ha decidido cerrar las fuentes municipales de parques y jardines.
Donde la situación es aún más preocupante es en el sector agrícola.Así lo dejaron claro los 300 payeses en la asamblea que celebraron el viernes por la noche en la localidad de Cervera, convocados por el sindicato Unió de Pagesos. Los agricultores coincidieron en que la mayoría perderá por completo la cosecha de trigo o cebada. Los payeses piden a la Generalitat ayudas directas a fondo perdido. Albert Falip, uno de los dirigentes de Unió de Pagesos, presente en la asamblea, hizo una radiografía muy crítica de la situación. Hay comarcas de secano en Lleida donde se perderá el cien por cien de la cosecha de cereales y en el conjunto de Cataluña prevén un 80 por ciento de la producción. También alertó de que la intensa sequía está afectando ya a la ganadería por falta de pastos.
Los payeses rechazan las ayudas propuestas por el Departament d'Agricultura, que se centran sobre todo en la concesión de créditos y que priorizan a los agricultores que tengan la cosecha asegurada y que en este sector, según Falip, no supera el 20 por ciento.Unió de Pagesos no descarta organizar movilizaciones contra este plan de ayudas.
En los cultivos de regadío, de momento la situación no es tan crítica, pero las perspectivas tampoco son muy halagüeñas. Si persiste la sequía, prevén restriciones para los riegos que dependen de los canales de Aragón y Cataluña ,y el de Urgell.
En Cataluña, el 95 por ciento de los municipios está en una situación de excepcionalidad a causa de la sequía.
«Una vez por semana les suministramos agua en un camión cisterna.En esta casa de Comiols dependen exclusivamente del agua de la lluvia para llenar los depósitos de los que se abastecen para su vida diaria y como hace tanto tiempo que no llueve, se han quedado sin reservas», explica Domènec Paris, alcalde de Artesa de Segre.
No es el único pequeño pueblo de las comarcas de Lleida que desde hace algunas semanas depende del agua que les llega en camiones. En el Pallars Jussà hay varios núcleos, como La Torre de Cabdella o Sant Esteve de la Sarga, que también han agotado los depósitos y tienen que llenarlos con agua de fuera para poder hacer frente al abastecimiento doméstico y también de las granjas.
Antoni Avellana tiene una granja de terneros en Muller, un núcleo de la comarca de la Segarra que depende del municipio de Montornés.«Cada viernes o sábado viene el camión cuba a traer agua porque si no la granja por ejemplo no podría subsistir. En estos pueblos tan pequeños no nos abastecemos, como las poblaciones grandes, de los pantanos o los canales, sino de pozos y como hace tanto tiempo que no llueve una cantidad importante de agua se han secado».
En total, en las comarcas leridanas hay en estos momentos núcleos de población de seis municipios de las comarcas de la Noguera, Alt Urgell, Alta Ribagorøa y Pallars Jussà que tienen problemas de suministro de agua potable por culpa de la sequía.
En Solsona, el Ayuntamiento ya ha tomado medidas para intentar evitar que se tenga que llegar a las restricciones del consumo doméstico. Por este motivo, esta semana ha enviado una carta a los vecinos en la que se les recomienda que hagan un uso responsable del agua y la ahorren en sus actividades diarias. Además, el consistorio ha decidido cerrar las fuentes de la población y dejar de regar con agua potable los jardines públicos. También en Guissona el consistorio ha decidido cerrar las fuentes municipales de parques y jardines.
Donde la situación es aún más preocupante es en el sector agrícola.Así lo dejaron claro los 300 payeses en la asamblea que celebraron el viernes por la noche en la localidad de Cervera, convocados por el sindicato Unió de Pagesos. Los agricultores coincidieron en que la mayoría perderá por completo la cosecha de trigo o cebada. Los payeses piden a la Generalitat ayudas directas a fondo perdido. Albert Falip, uno de los dirigentes de Unió de Pagesos, presente en la asamblea, hizo una radiografía muy crítica de la situación. Hay comarcas de secano en Lleida donde se perderá el cien por cien de la cosecha de cereales y en el conjunto de Cataluña prevén un 80 por ciento de la producción. También alertó de que la intensa sequía está afectando ya a la ganadería por falta de pastos.
Los payeses rechazan las ayudas propuestas por el Departament d'Agricultura, que se centran sobre todo en la concesión de créditos y que priorizan a los agricultores que tengan la cosecha asegurada y que en este sector, según Falip, no supera el 20 por ciento.Unió de Pagesos no descarta organizar movilizaciones contra este plan de ayudas.
En los cultivos de regadío, de momento la situación no es tan crítica, pero las perspectivas tampoco son muy halagüeñas. Si persiste la sequía, prevén restriciones para los riegos que dependen de los canales de Aragón y Cataluña ,y el de Urgell.
En Cataluña, el 95 por ciento de los municipios está en una situación de excepcionalidad a causa de la sequía.