The rains don´t improve drought problems

Wed, 18/05/2005

El Periódico de Aragón

Las copiosas lluvias de las últimas semanas no han sido suficiente para acabar con la sequía que atraviesa Aragón, aunque sí han paliado sus efectos.
Las precipitaciones se centraron en el valle medio del Ebro --entre 15,5 y 23,1 litros por metro cuadrado en Zaragoza, según la zona--, mientras perdían fuerza en el Pirineo y ofrecían la menor intensidad en la zona sur de Teruel.

De hecho, según datos del Centro Meteorológico del Ebro, la capital turolense no pasó la noche del lunes al martes de 3,8 litros por metro cuadrado. Calamocha llegó a 26 y Alcañiz superó los 20.
En la montaña, las precipitaciones oscilaban entre los 10 y los 15 litros por metro cuadrado, aunque numerosas estaciones de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), como las del Campo, Lafortunada, Javierregaray, Boltaña o Canfranc marcaban valores inferiores.
LO MAS SECO En el llano oscense, los 23,1 litros por metro cuadrado caídos en Tamarite y los 39,4 de Fraga empapaban levemente el suelo de la zona que este año registra menos lluvias en toda España --según el Instituto Nacional de Meteorología--, aunque otras áreas con una situación similar, como Barbastro, no llegaban al litro. Monflorite llegaba a 25,3 y algunas áreas del Guatizalema, el río del que se abastece Huesca, rozaban ese volumen. La precipitación fue menor en la zona regable de Bardenas --por debajo de ocho litros-- y en la cuenca que la nutre.
En la margen derecha del Ebro las precipitaciones alcanzaron los 19,8 litros en Híjar, en la cuenca del Martín; 22,4 en Jubera, en el Jalón, o 22,8 en Daroca.
Fuentes del Centro Meteorológico del Ebro, cuyas previsiones apuntan a la llegada el sábado de otro frente lluvioso que el domingo podría afectar a toda la comunidad, destacaron los efectos positivos de la lluvia por la forma de precipitarse, "continua, suave, caladera". No obstante, fuentes de la CHE señalaron que las precipitaciones de estos días "han permitido una recuperación en zonas críticas, pero todavía no hay reservas suficientes, ni mucho menos, para garantizar la campaña".
De hecho, la Comisión de Uso de las Aguas de Riegos del Alto Aragón considera que "la situación sigue siendo extremada y en ningún caso el cupo de agua por hectárea supera el 40% de las necesidades de los cultivos".
La entidad, que acordó ayer el reparto de 34 hectómetros cúbicos tras haber distribuido 60 en los primeros dos meses y medio de campaña, constató que las lluvias han causado "un ligero incremento del agua regulada en el eje del Cinca" mientras en el Gállego "han generado una respuesta poco significativa".
La situación es similar en el Aragón y Cataluña. Su presidente, José Luis Pérez, calificó las precipitaciones de "importantes por lo exótico, porque hace meses que no llueve, pero esto es lo normal en mayo". No obstante, añadió, "de los dos riegos que necesita un corte de alfalfa, esta lluvia no llega a suponer uno --hacen falta unos 50 litros--; pero permitirá espaciar los riegos".