Medio Ambiente garantiza el suministro urbano pero la Universidad matiza que si no llueve la zona del Taibilla tendrá problemas
F. J. B.
El Instituto Nacional de Meteorología decretó ayer de manera oficial la situación de «extrema sequía» en España debido a la falta de lluvias que padece la mayor parte del país desde el pasado invierno, lo que ha vuelto a encender la señal de alarma ante la posibilidad de que haya que recurrir a las restricciones de agua el próximo verano en zonas muy sensible como l´Alacantí y la Vega Baja. La cantidad agua recogida representa tan solo el 37% de lo normal. Un porcentaje similar al que ofrecen las comarcas más afectadas en la provincia, porque desde septiembre se han recogido 80 litros por metro cuadrado de media, según el balance del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante. Su responsable, Jorge Olcina, apuntó ayer que no se recordaba una situación tan grave desde 1945, un año en el registro pluviométrico no pasó de los 89 litros en todo el ejercicio. Las tres comarcas del Vinalopó, l´Alacantí y la Vega Baja son las zonas más afectadas y en la cuenca del Segura el caudal embalsado sólo llega al 23% de su capacidad.
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, reiteró ayer que el abastecimiento está asegurado y para ello el Ministerio cuenta con la puesta en marcha de la desaladora de San Pedro del Pinatar que enviará agua a la Mancomunidad de Canales del Taibilla. Desde la Universidad de Alicante, Jorge Olcina no lo tiene tan claro «porque la cuenca está muy mal y tampoco sabemos como va a evolucionar el complejo manchego Entrepeñas/Buendía. Si no llueve, en el territorio del Taibilla lo van a pasar mal. En Alicante no creo que haya problemas debido a la planta de Agua Amarga».
Los pantanos de Entrepeñas y Buendía almacenaban ayer 668 hm 3 , a cuatrocientos hectómetros cúbicos de la reserva estratégica -240 hm 3 - que impediría trasvasar agua del Tajo al Segura, tras unos meses, en teoría los más lluviosos del año, en los que el agua recogida no ha superado el 25% de lo habitual. En la provincia, la mejor situación es la de los embalses de Guadalest, Beniarrés y Amadorio -Marina Baja-, donde el abastecimiento sí está asegurado, al igual que en la Marina Alta y l´Alcoiá. La falta de lluvias se agrava al constatarse la falta de humedad que padecen los suelos en el sur meridional de la provincia, lo que de no cambiar la situación puede comprometer seriamente su fertilidad