La ciudad de Zaragoza podrá recibir agua del río Aragón para consumo humano a partir del 2007 si se cumplen las previsiones de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
Mientras los 73 kilómetros de tuberías que transportarán los caudales están ya en periodo de prueba, la carga del pantano está pendiente de sacar del vaso una línea eléctrica y un gaseoducto. Las pruebas del embalse durarán ocho meses y no empezarán antes del 2006.
Por otro lado, la CHE y ACESA (Aguas de la Cuenca del Ebro, SA) han licitado, con un presupuesto de salida de 2,94 millones de euros, el mantenimiento de la tubería de abastecimiento a Zaragoza. La contrata tiene un plazo de ejecución de dos años y es prorrogable por meses. La finalización del proyecto está pendiente de asegurar la financiación comunitaria de los ramales que deben llevar el agua a las áreas del Huerva, el Gállego y el Jalón, presupuestados en 31.500 euros.