La Breña II dam passes the last administrative exam. Spanish Environmental Ministry approves the project

Thu, 31/03/2005

Córdoba

La proyectada presa de La Breña II, que se ubicará en la provincia de Córdoba con el objetivo de acabar en gran medida con el déficit de recursos hídricos que padece la cuenca del Guadalquivir en Andalucía, ha superado ya el último trámite burocrático previo a su construcción, que, incluidas las medidas compensatorias y la estación de bombeo, costará 210,7 millones de euros.
Según informó ayer el subdelegado del Gobierno, Jesús María Ruiz, el Ministerio de Medio Ambiente ha aprobado ya de forma definitiva el proyecto de construcción de la presa, "que contribuirá al incremento de los recursos hídricos de la cuenca del Guadalquivir, aportando 258 hectómetros cúbicos a la regulación general, a la vez que servirá para garantizar el riego de 360.000 hectáreas".
Las obras, que ya fueron adjudicadas a Dragados y Construcciones y que ejecutará Medio Ambiente a través de la Sociedad Estatal Aquavir, "comenzarán antes del verano, pues, al haber concluido ya el largo proceso administrativo previo a la construcción de la presa, que por sí sola requerirá una inversión de 120,3 millones de euros, entramos ya en la recta definitiva para que, dentro de unas semanas, se pueda firmar el contrato con Dragados y Construcciones", según detalló Ruiz.
La actuación implicará la creación de un embalse de 850 hectómetros de capacidad, mediante la construcción de una presa de hormigón, de tipo gravedad, de 125 metros de altura y en la que se emplearán 1,6 millones de metros cúbicos de hormigón. La Breña II, que al ser una presa de regulación general beneficiará a todos los usuarios de la cuenca, estará situada inmediatamente aguas abajo de la actual presa de La Breña, con lo que se construirá muy próxima a la desembocadura del río Guadiato, lo que permitirá regular en su totalidad dicho afluente del Guadalquivir.
Dada su proximidad al río Guadalquivir, en las épocas de lluvias está previsto bombear los caudales sobrantes, que en estiaje se devolverían al río por medio de una central hidroeléctrica, para de esta forma compensar en gran medida los costos del bombeo. La regulación de los caudales extraídos del Guadalquivir se realizará mediante un embalse de pequeña altura en dicho río, en las proximidades del arroyo Guadazueros