Hoy, Día Mundial del Agua, se acaba de conocer que España está inmersa en un periodo meteorológico seco que no ocurría desde hace 16 años. Durante el otoño y el invierno que acaba de concluir, ha llovido un 34% menos que el valor medio de los últimos 60 años. Aunque es prematuro hablar de sequía, los efectos de la falta de lluvias son evidentes en todos los pantanos del país, y especialmente en la cuenca del Segura.
Ayer, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, alertó de éste y otros datos negativos sobre el clima o los bosques para hacer un llamamiento a «la responsabilidad personal y política frente al cambio climático».
Paralelamente, la ONU ha recordado que aún «queda mucho» por hacer para que la población mundial tenga acceso al agua potable.Según los datos divulgados ayer, 1.100 millones de personas utilizan agua de fuentes insalubres y otros 2.400 millones no tienen redes de saneamiento y alcantarillado.
Aunque la ONU mantiene en vigor sus planes para alcanzar en 2015 los objetivos de la Declaración del Milenio, que pretenden reducir a la mitad las cifras anteriores para esa fecha, también alerta que para 2050 los países afectados por escasez de agua podrían ser 60 y más de 7.000 millones las personas sin recursos de agua.La ONU ha decidido iniciar hoy el Decenio Internacional para la Acción del Agua.
Mientras tanto, la ministra de Medio Ambiente anunció que en mayo la planta desaladora de San Pedro de Pinatar, Murcia, empezará a potabilizar 12 hectómetros cúbicos de agua que se ampliarán a 16 al siguiente año. Narbona declaró que la desaladora llevaba 10 años de retraso, y anunció que a fines de año otra planta arrancará en Alicante.
Pozos ilegales
También aseguró que se han comenzado a clausurar pozos ilegales y a generalizar el uso de contadores, para garantizar «una gestión adecuada del agua». Igualmente se ha comenzado un plan para analizar la seguridad de las presas y se avanza en la reforma de la Ley de Aguas, que obligará a un informe previo de las Confederaciones Hidrográficas antes de modificar los usos del suelo. Esta modificación no será posible en caso de carecer de recursos hídricos, como tampoco será posible durante 30 años en caso de padecer un incendio, según la reforma que se estudia de la Ley de Montes, avanzó Cristina Narbona.
La falta de lluvias de este año ha adelantado en numerosas regiones el riesgo de incendios forestales, por lo que el Gobierno prepara cambios importantes, de acuerdo con las comunidades autónomas, en este sentido. Sin embargo, la ministra dijo que pese a la falta de lluvias, «el 90% de los incendios tienen detrás actividades humanas», y que los delitos contra el medio ambiente tienen «demasiada impunidad» en nuestro país. Aunque no adelantó detalles, confirmó que España contará con una fiscalía especializada en estos delitos, y que jueces y fiscales recibirán formación especializada.