The fires could be heavies in Catalonia, according to local government

Thu, 17/03/2005

ABC

BARCELONA. «Si las condiciones meteorológicas no mejoran y no llueve, tendremos una primavera y sobre todo un verano con mucho fuego», advirtió ayer la consellera de Interior de la Generalitat, Montserrat Tura. Tura y el conseller de Medio Ambiente y Vivienda, Salvador Milà, comparecieron ayer en comisión parlamentaria para detallar la campaña contra incendios del otoño pasado y del invierno que se acaba -inéditamente secos-, y dibujaron un panorama catastrófico para la próxima primavera y verano. «Es una situación de emergencia. Si no cambia el tiempo, ni multiplicando por diez los actuales medios de que disponemos podremos hacerle frente», pronosticó Tura.

Por ello, la Generalitat adelantará a la próxima Semana Santa la campaña divulgativa para concienciar a la ciudadanía del peligro de fuego y aumentará los medios aéreos de extinción.

El pasado verano fue muy bueno, el segundo con menos hectáreas quemadas desde 1986. Sin embargo, el otoño y el invierno siguientes no han traído la lluvia y humedad que se esperaban, y si ráfagas de viento importantes. La sequía ha dejado una vegetación muy seca y quemada por las heladas.

De hecho, estamos ante el invierno más seco desde 1967 (el primer año desde que Interior registra estos datos). Circunstancias meteorológicas como las actuales sólo se dan «cinco veces cada cien años», dijo Milà, quien precisó que las comarcas con más riesgo de fuego serán las del litoral y prelitoral sur.

Ya a finales del año pasado, la Generalitat tuvo que tomar «medidas excepcionales» e inéditas. Se contrataron 120 auxiliares forestales de refuerzo para hacer frente a un número inédito de incendios. Este invierno los bomberos han hecho 3.336 servicios, cuatro veces más que en el mismo período del año pasado.

CiU: «No han hecho los deberes» Tura y Milà apelaron al ciudadano para prevenir incendios, aunque sólo un 20% de ellos son fruto de negligencias. La principal causa de fuegos sigue siendo la quema agrícola de restos vegetales (representaron el 43% de este invierno), mientras que sólo un 11% fueron intencionados.

En su intervención, el diputado de CiU Ramon Espadaler criticó la «descoordinación» de los departamentos de la Generalitat en la lucha contra los incendios, acusó al Govern de «no haber hecho los deberes» en su año y medio de mandato y censuró que aún no se haya concretado el decreto para aplicar la ley de prevención. Milà contestó que el decreto está «muy avanzado», pese a destacar la dificultad que entraña leguslar este asunto.

Espadaler también afirmó que la Generalitat ha reducido en 12 millones de euros las ayudas a la gestión sostenible de los bosques, a lo que Milà replicó que han aumentado esa partida un 51% respecto al anterior gobierno.