Comunican por escrito al Ministerio que no piensan pagar más de 0,12 euros por metro cúbico de la planta de Las Mil Palmeras M. BUITRAGO/MURCIA NEGOCIACIÓN. Adrián Baltanás, a la izquierda, junto al presidente de la Confederación, Fuentes Zorita, y el presidente del Sindicato Central de Regantes, Francisco del Amor, en octubre pasado. / G. CARRIÓN TIRA Y AFLOJA Lo que no quieren los regantes: Permutar sus asignaciones del Tajo por aguas desalinizadas. Y que una parte de sus caudales del Tajo se destinen al Altiplano.

El precio: La sociedad Acuamed aún no ha propuesto una tarifa, sino la estructura que tendría la tarifa. Los regantes del Sindicato Central han contestado ya no que piensan pagar más de 0,12 euros por cada metro cúbico.

Trámites: La desalinizadora de Las Mil Palmeras, de 60 hm3/año, debe licitar sus obras en septiembre de este año (o en diciembre si se requiere estudio de impacto).

Los regantes del Trasvase Tajo-Segura han entrado en un duro proceso negociador con la sociedad estatal Aguas de las Cuencas Mediterráneas (Acuamed). La mayor desalinizadora proyectada hasta ahora en España, de 60 hectómetros cúbicos de capacidad, y que se construirá cerca de la playa de Las Mil Palmeras, junto a Campoamor, está pendiente de un convenio marco que, de momento, debe despejar varias dudas de los regantes. El Sindicato Central de Regantes lanzó una primera advertencia al director general de Acuamed, Adrián Baltanás, en el sentido de que no piensa intercambiar caudales del Tajo, asignados por ley, por otros de la nueva desalinizadora. Concibe ésta como una garantía para asegurar los regadíos en caso de sequía o rotura del canal.

El representante de los regantes, Francisco del Amor, le hizo saber a Baltanás que «el Tajo no se toca»; así como que el agua desalinizada no se destinará a redotar nuevas zonas. Otra incógnita que quieren despejar los regantes se refiere a las asignaciones para la comarca del Altiplano. Del Amor espera que el agua que deba llegar a Jumilla, Yecla y a otros municipios del sur de Albacete no sea a costa de los caudales del Tajo que corresponden al Sindicato central.

El otro frente de negociación es el precio que tendrá el agua desalinizada. En el primer borrador enviado por Acuamed no aparece el precio. Lo único que figura en la cláusula duodécima del documento es que las tarifas se abonarán a Acuamed mensualmente, y tendrán dos partes: Un término fijo, que deberá abonarse cualquiera que sea el suministro real de agua -incluso si es nulo-, que permitirá cubrir los costes de amortización y los costes fijos de operación. A esto se añade un término variable, que se aplicará sólo al volumen de agua realmente suministrado, y que permitirá cubrir los costes de energía y otras variables.

Los regantes ya han respondido con una propuesta concreta: no piensan pagar más de 0,12 euros por metro cúbico. Esta cantidad se corresponde a la baja con la horquilla de precios que dio a conocer el Ministerio de Medio Ambiente el pasado verano (oscilaba entre 0,12 y 0,30 euros).

Otra de las particularidades recogidas en el primer borrador es que Acuamed será la propietaria de las infraestructuras de la desalinizadora, que va a agrupar en una sola instalación tres plantas que inicialmente iban por separado (la del Sindicato, la de La Pedrera y la de Pilar de la Horadada). Acuamed espera licitar en septiembre las obras que no necesiten declaración de impacto medioambiental; y en diciembre las que sí lo requieran