Adena (Ecologist association) reports that there are illegal thousand wells in Doñana

Wed, 02/02/2005

Diario de Jerez

jiménez
n sevilla. Con motivo de la celebración hoy del Día Internacional de los Humedales, WWF/Adena hizo públicas ayer las conclusiones de un estudio sobre los problemas ambientales de Doñana en el que destaca la existencia de alrededor de mil pozos ilegales, sobre todo en los Hatos –dentro del Parque Nacional– y en la cabecera de la Rocina. Según esta organización, una de las afecciones más importantes que sufre la zona es la sobreexplotación ilegal de las aguas subterráneas, lo que puede perjudicar gravemente a los ecosistemas del espacio protegido, fundamentalmente si se confirma la escasez de lluvias y la entrada en un ciclo de sequía , apuntó Juan José Carmona, coordinador de la oficina en Doñana de WWF/Adena.
En el caso de la zona de los Hatos, los ecologistas achacan las extracciones principalmente al riego de los arrozales y aseguran que desde 1990 la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) está abriendo expedientes sin que se consigan clausurar los pozos. Los propietarios –explica Carmona– argumentan que ellos ya sacaban ese volumen de agua antes de la aprobación de la ley de aguas, aunque esto no casa con la situación de los acuíferos que revelan las imágenes de satélite .
Los conservacionistas sostienen que los pozos no se clausuran porque el servicio de aguas subterráneas de la CHG en Sevilla tramita los expedientes y, al llegar a Madrid, se atascan hasta que caducan. A veces, añaden los ecologistas, los expedientes se han tramitado hasta el final y se ha decidido cerrar el pozo, pero los propietarios se han negado y la CHG (que no respondió ayer a estas críticas tras ser consultada por esta redacción) no ha podido obrar de forma subsidiaria porque la resolución no incluía esta posibilidad.
"En conclusión, siguen extrayéndose ilegalmente unos doce hectómetros cúbicos al año del acuífero en la zona de los Hatos, con graves efectos sobre el Parque Nacional de Doñana , reza en el informe de WWF/Adena.
En la zona de la cabecera de la Rocina, el sector agrícola pide el trasvase de aguas superficiales desde el Guadiana II, según los ecologistas, que critican que para solucionar el problema causado por la falta de control legal de los pozos y los montes en Doñana se plantee la necesidad de aportar agua superficial a los ilegales . Usan agua subterránea y ocupan espacios forestales –pinares– o de dominio público hidráulico, sobre todo, para el cultivo del fresón , apostillaron.