El Instituto Aragonés del Agua ha ejecutado más del 98 por ciento de su presupuesto de inversiones del ejercicio 2004, que han rondado los 23 millones de euros. Este alto nivel de ejecución supone un fuerte impulso a las obras que está realizando directamente esta entidad pública del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, informan desde el Ejecutivo.
A esta cifra se suman los 37 millones del capítulo de subvenciones para obras de entidades locales (para saneamiento, depuración, abastecimiento, márgenes o accesos, entre otras), capítulo en el que también se ha superado el 95 por ciento de ejecución.
Entre las obras más significativas que ha emprendido el Instituto Aragonés del Agua durante 2004 figuran los trabajos de las estaciones depuradoras de Alagón, Tauste, Caspe, Ateca, Mallén, Gallur, Calamocha, Cella y Campo, estas dos últimas ya finalizadas, así como el colector de saneamiento y la estación depuradora del futuro centro medioambiental de La Alfranca.
También hay que destacar la redacción de los 177 anteproyectos del Plan Especial de Depuración, así como la primera fase del saneamiento del río Mijares, junto a la Diputación Provincial de Teruel. Con todos estos trabajos se está avanzando en la depuración de aguas residuales, que se traduce en una mejora ambiental de los ríos de Aragón, así como en mayores posibilidades de desarrollo sostenible en el territorio.
En cuanto a obras de abastecimiento de agua potable, destacan las obras realizadas en Jaca, Monzón, La Alfranca, Pozuelo, Sigüés, Ricla, Malón o Manzanera, entre otros, así como el encauzamiento del río Cadena, en el casco urbano de Uncastillo, o las actuaciones del ciclo del agua en el río Ésera.
Además de las obras, el Instituto Aragonés del Agua ha desempeñado las funciones de mantenimiento y explotación depuradoras de Huesca, Teruel, Jaca, Sabiñánigo, Ejea, Barbastro, Alcañiz, Cariñena, Albalate Arzobispo, Alcorisa, Tarazona, Montalbán, Mequinenza, Utrillas, Calatayud, Binéfar, Calanda, Fraga, Andorra, Huerva, Monzón y Luna.