Riegos del Alto Aragón ha adoptado, en su última Junta de Gobierno, la decisión de adherirse al rechazo llevado a cabo por la Federación Nacional de Comunidades de Regantes ante el Consejo Nacional del Agua, por el establecimiento de un canon aplicable al metro cúbico utilizado o aprovechado por las Comunidades de Regantes.
"Pese a la oportuna retirada, a mediados de diciembre, por parte del Grupo de Trabajo del Consejo Nacional del Agua, del denominado "Canon de utilización de los bienes de dominio público hidráulico", esta propuesta ha quedado en cartera, Riegos del Alto Aragón ha decidido mostrar su desacuerdo, decisión que ha comunicado a la ministra de Medio Ambiente, así como al presidente de Aragón, a los consejeros de Agricultura y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón y al presidente de la CHE.
La Comunidad General considera que "una medida de estas características puede provocar un cambio de orientación de cultivos que acelere la desaparición de buena parte de la agricultura de regadío del interior de España, en la cual el sector ha llegado al límite de rentabilidad y no permite más pagos".
Añade que "la incorporación de un nuevo canon, en un área, como Riegos del Alto Aragón, en la que desde antiguo se desarrolla una gestión de la demanda, con medidas técnicas, económicas y punitivas, que fomentan la correcta gestión del recurso, y en las que la demanda obedece a una falta de regulación, no a su escasez, solo derivaría en la disminución del umbral de rentabilidad de las explotaciones agrarias". Esta situación, argumentan desde Riegos del Altoragón, puede acelerar el proceso de desertificación demográfica al que se encuentra sometido el territorio, y dificultar la incorporación de jóvenes a la agricultura.
Subrayan desde Riegos del Altoaragón que "la implantación del citado canon supondría un incremento del 20 por ciento del actual, y ya caro, coste del agua. Este canon es visto con incomprensión cuando en la actualidad ya se resarce al Estado del coste económico de sus inversiones y gestión a través del pago de las tarifas de utilización y cánones de regulación. Es decir, actualmente además de asumir la parte de amortización técnica de las obras y el cien por cien de los gastos de explotación y conservación, también pagan los gastos generales del Organismo de cuenca imputables a tales obras".
Gasto al que se suma --indican desde Riegos del Alto Aragón-- el coste de la modernización de regadíos, impulsada por el Plan Nacional de Regadíos y que debido a la actual legislación referente al IVA se desarrolla con una subvención a fondo perdido del 17 por ciento procedente del Feoga-Orientación, revierte en un 16 por ciento al Estado. Sin olvidar que la parte de la modernización de regadíos correspondiente al equipamiento de riego en parcela corre íntegramente por cuenta del regante en la mayor parte de los casos.
Para Riegos del Altoaragón, al igual que la Directiva Marco de las Aguas propone en su enunciado una adaptación de la norma a las especificidades de cada Estado Miembro, cualquier medida a aplicar debe ser valorada teniendo en cuenta: "la situación diferencial de cada sistema regable, su situación financiera ante el Estado y la repercusión de otras políticas también desarrolladas por el Estado y a las que se acoge cada sistema; la coordinación entre políticas ambientales y agrarias con verificación del umbral mínimo de rentabilidad al que se somete una explotación habida cuenta de la imposibilidad de repercutir sobre el precio del producto cualquier canon que se establezca, y la coherencia entre los umbrales de pago de canon y las dotaciones objetivo establecidas en los respectivos Planes Hidrológicos de cuenca.