El director general del Agua mantiene que se van a respetar las reglas «aprobadas y consensuadas por todos» El presidente del Tajo afirma que su cuenca es excedentaria ELÍAS JIMÉNEZ/ALBACETE SEGUIRÁ VIGENTE. Imagen de archivo de un tramo del trasvase Tajo-Segura. / LA VERDAD El trasvase Tajo-Segura es hoy por hoy intocable. Esa es la principal conclusión que se puede extraer de las jornadas El desafío de la gestión y planificación del uso del agua en el siglo XXI que concluyeron ayer organizadas por la Universidad de Castilla-La Mancha y el Centro Regional de Estudios del Agua (Crea).

Los representantes políticos del ministerio de Medio Ambiente y los presidentes de las cuencas afectadas, Tajo y Segura, han dejado bien claro durante estos dos días de jornadas, que el trasvase está regulado mediante unas normas de explotación «consensuadas por todos».

En este sentido se pronunciaron ayer tanto el director general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Palop, que afirmó que dejó claro que este departamento va a ser «absolutamente respetuoso con la ordenación legal vigente», como los presidentes de las cuencas hidrográficas del Segura y del Tajo.

Reivindicaciones

Palop, que aseguró entender las reivindicaciones que llegan desde Castilla-La Mancha, recordó que hay unos planes hidrológicos y unas normas de explotación del trasvase que están aprobados «y de ahí que el punto de partida sea que el acueducto Tajo-Segura, hoy por hoy se tenga que mantener puesto que si se prescinde de él llevaría a cabo una situación muy complicada para Murcia y para una parte importante de Valencia». El director general del agua hizo un llamamiento «a la sensatez» de los responsables políticos de Castilla-La Mancha, «porque cada vez que se oye una manifestación desde esta región pidiendo una fecha de caducidad hay que entender que para nuestros vecinos supone una alteración, porque viven y dependen de estas aguas que fluyen del Tajo al Segura».

No obstante, reconoció la reivindicación legítima de Castilla-La Mancha, y afirmó que no se va a menospreciar ningún planteamiento que llegue desde la Región, «porque estamos dispuestos a hablar y crear condiciones de consenso». Precisamente por la vía del consenso es por la que abogó ayer el director general del agua antes de su intervención en las jornadas.

Más participación

En este sentido, Palop aseguró que Castilla-La Mancha nunca ha estado al margen de las prioridades del ministerio y compartió la propuesta del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, en el sentido de que las comunidades autónomas entren a formar parte de las Confederaciones. Tanto es así, que Palop la consideró como un eje fundamental «porque hasta ahora las comunidades autónomas no han podido aplicar políticas propias de las que necesitan del agua para llevalas a cabo».

Por eso explicó que desde el Ministerio se abogará por la mayor participación de las comunidades en estos órganos gestores del agua, «porque pueden ser el órgano idóneo para llegar a acuerdos y a establecer consensos». El director general del Agua afirmó que para él no hay conflicto alguno entre Castilla-La Mancha y el Ministerio de Medio Ambiente, «porque en democracia se pueden mantener distintas posturas y no ocurre absolutamente nada».

El director general del Agua compartió las mismas tesis que el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo durante la mañana, cuando aseguró que esta cuenca es excedentaria y que no tiene problemas de suministro a los municipios y a los regadíos de su área de influencia. Palop admitió que esta cuenca es excedentaria «y de hecho se están promoviendo infraestructuras para el abastecimiento de 58 municipios y otros usos en la propia cuenca del Tajo.

No obstante, reconoció que las peticiones del Gobierno de Castilla-La Mancha siempre serán atendidas «en la medida que sea viable técnicamente, económicamente o medioambientalmente».

Por su parte, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, José María Macías Márquez, antes de su intervención reconoció que la cuenca del Tajo es «hoy por hoy excedentaria». No obstante, reconoció que en la parte alta del río se presentan ciertos problemas hasta llegar a Aranjuez, «pero no son excesivamente graves».

Macías explicó que el trasvase no supone ningún freno al desarrollo de la cuenca del Tajo, «que tienen todas sus necesidades cubiertas, porque sólo se trasvasan los caudales excedentarios, que además están regulados por unas normas que fueron aprobadas con el consenso de todas las comunidades autónomas».

A juicio de Macías para la cuenca del Tajo nunca se acabará el trasvase, «porque lo que se discute no es su final, sino el cambio de usos de las aguas que se derivan».

El presidente de la Confederación del Tajo explicó que el principal problema que tiene su cuenca no es de cantidad del agua sino de calidad, por la elevada contaminación que llega desde el área metropolitana de Madrid.