The Commission of Water of Aragón approves to reduce Yesa in 419 hm³
Tue, 28/09/2004
La Comisión del Agua de Aragón aprobó ayer pedir al Estado reducir la cota del embalse de Yesa. El embalse pasará de la cota 521 a la 510, lo que supone 419 hm³ menos de los previstos y con lo que se evitará inundar el casco urbano de Sigüés (Zaragoza), una población de 187 habitantes. Esta era la principal afección del proyecto de recrecimiento actualmente en ejecución, y que llegaba a la cota 521, con 1.525 hectómetros cúbicos. La decisión adoptada por más de un 80% de los miembros de la Comisión del Agua, ha de ser ratificada por el ministerio, pero ayer la reacción ya del alcalde de Sigüés, Daniel Salinas (PAR) era de alivio al ver que la localidad a la que representa no será inundada.
La Comisión del Agua de Aragón en la que están representados el Gobierno aragonés, los partidos políticos, ayuntamientos y regantes, entre otros colectivos, aprobó así la propuesta hecha por la mayoría de las poblaciones afectadas, a excepción de Mianos y Artieda más radicales en la oposición al proyecto de Yesa.
Una vez aprobado por las Cortes de Aragón, el Ejecutivo aragonés trasladará este acuerdo a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y tras el compromiso que adquirió el Ministerio de Medio Ambiente de escuchar a las partes, lo más probable es que la iniciativa de dejar Yesa a la cota 510 sea aprobada definitivamente.
En la Comisión del Agua de ayer, la propuesta de reducir el proyecto a esa cota contó con el apoyo político de PP, PSOE, PAR e IU. El documento aprobado, y que se elaboró tras meses de trabajo entre las distintas entidades y los colectivos implicados, indicaba la aceptación de la cota 510 para no inundar Sigüés y el apoyo para que el Estado y los gobiernos autonómicos de Aragón y de Navarra se comprometan a realizar el plan de restitución de la zona afectada por el recrecimiento. Asimismo, la propuesta incluye garantizar el agua a los regantes y los usos previstos en Navarra.
La modificación del proyecto del recrecimiento de Yesa supondrá, según el alcalde Daniel Salinas, «que esta localidad no se verá inundada, Mianos no se verá afectado y en Artieda serán 100 hectáreas menos las implicadas». Aun así, el proyecto de Yesa sí afectará a 500 o 600 hectáreas de tierras en el término de Sigüés, apuntó. El cambio supondrá también realizar una presa de cola en este municipio que le permitirá tener una lámina de agua constante para usos turísticos y deportivos.
Daniel Salinas aseguró sentir un «alivio grande». «Llevamos 25 años con el drama de si nos inundaban o no y ahora parece que se ha despejado el problema. Volvemos a tener el horizonte abierto».
Plan de restitución
Por su parte, el alcalde de Undués de Lerda, Juan Arboniés (PP), y también miembro de la comisión de pueblos afectados, apuntó que si se aprueba en las Cortes de Aragón ya sólo quedará establecer los presupuestos y modificar el proyecto. Los ayuntamientos representados en la comisión son Sigüés, Salvatierra de Esca, Undués de Lerda, Pintanos, Urriés, Bagüés y Berdún.
Arboniés consideró que este cambio supondrá más coste, al tener que hacer otros embalses de regulación y presas de cola para poder aportar los hectómetros necesarios para los usos que estaba previsto Yesa. «Ahora, lo que pedimos los ayuntamientos es que empiecen ya con el plan de restitución territorial, al margen de que tengan que modificar el proyecto», añadió Arboniés
La Comisión del Agua de Aragón en la que están representados el Gobierno aragonés, los partidos políticos, ayuntamientos y regantes, entre otros colectivos, aprobó así la propuesta hecha por la mayoría de las poblaciones afectadas, a excepción de Mianos y Artieda más radicales en la oposición al proyecto de Yesa.
Una vez aprobado por las Cortes de Aragón, el Ejecutivo aragonés trasladará este acuerdo a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y tras el compromiso que adquirió el Ministerio de Medio Ambiente de escuchar a las partes, lo más probable es que la iniciativa de dejar Yesa a la cota 510 sea aprobada definitivamente.
En la Comisión del Agua de ayer, la propuesta de reducir el proyecto a esa cota contó con el apoyo político de PP, PSOE, PAR e IU. El documento aprobado, y que se elaboró tras meses de trabajo entre las distintas entidades y los colectivos implicados, indicaba la aceptación de la cota 510 para no inundar Sigüés y el apoyo para que el Estado y los gobiernos autonómicos de Aragón y de Navarra se comprometan a realizar el plan de restitución de la zona afectada por el recrecimiento. Asimismo, la propuesta incluye garantizar el agua a los regantes y los usos previstos en Navarra.
La modificación del proyecto del recrecimiento de Yesa supondrá, según el alcalde Daniel Salinas, «que esta localidad no se verá inundada, Mianos no se verá afectado y en Artieda serán 100 hectáreas menos las implicadas». Aun así, el proyecto de Yesa sí afectará a 500 o 600 hectáreas de tierras en el término de Sigüés, apuntó. El cambio supondrá también realizar una presa de cola en este municipio que le permitirá tener una lámina de agua constante para usos turísticos y deportivos.
Daniel Salinas aseguró sentir un «alivio grande». «Llevamos 25 años con el drama de si nos inundaban o no y ahora parece que se ha despejado el problema. Volvemos a tener el horizonte abierto».
Plan de restitución
Por su parte, el alcalde de Undués de Lerda, Juan Arboniés (PP), y también miembro de la comisión de pueblos afectados, apuntó que si se aprueba en las Cortes de Aragón ya sólo quedará establecer los presupuestos y modificar el proyecto. Los ayuntamientos representados en la comisión son Sigüés, Salvatierra de Esca, Undués de Lerda, Pintanos, Urriés, Bagüés y Berdún.
Arboniés consideró que este cambio supondrá más coste, al tener que hacer otros embalses de regulación y presas de cola para poder aportar los hectómetros necesarios para los usos que estaba previsto Yesa. «Ahora, lo que pedimos los ayuntamientos es que empiecen ya con el plan de restitución territorial, al margen de que tengan que modificar el proyecto», añadió Arboniés