The irrigations of Genil-Cabra will undergo a new delay. La Junta assures that the works will not fulfill the term predicted by the rain
Sun, 26/09/2004
La puesta en riego de 7.039 hectáreas en la zona del Genil-Cabra sufrirá un nuevo retraso. Las obras que la Junta está llevando a cabo desde hace algo más de un año en la red de gravedad no estarán terminadas para la fecha prevista, el 24 de octubre. Así lo explicó a este periódico la delegada provincial de Agricultura, María del Mar Giménez, que ha manifestado que los trabajos se prolongarán hasta la próxima primavera.
La delegada ha asegurado que, "aunque vamos muy bien, se produjeron muchas precipitaciones en otoño e invierno que han retrasado las obras, por lo que se va a solicitar una ampliación del plazo de varios meses". Según la representante de la Junta, las tuberías principales y secundarias ya están acabadas, "pero existen piezas especiales que hay que fabricar", que complican todavía más las tareas.
DESDE EL 2001 La red de gravedad afecta a 374 parcelas de 256 agricultores de Santaella y Montalbán, a las que el agua puede llegar impulsada por su propio peso. Cuando estén terminadas estas conducciones, se pondrán en riego un total de 1.417 hectáreas. Su ejecución se ha ido demorando desde que se anunciara su inicio inminente en octubre del 2001. Poco después, la Junta sorprendió a los agricultores exigiéndoles un aval de la cuantía económica que debían aportar (el 60% de 5,6 millones de euros), lo que enfrentó a ambas partes durante meses. La Comunidad de Regantes del Genil-Cabra firmó el aval con Banesto a principios del pasado año y su coste lo asumieron los ayuntamientos de Santaella, Montalbán y La Rambla, terminando así la polémica, lo que permitió que se emprendieran las obras.
La delegada de Agricultura ha insistido en que para que la red de gravedad cumpla su función deben empezar las obras de la estación de bombeo de la Catalineta, que conectará el canal principal, ya realizado, con las tuberías. Las últimas noticias que tiene sobre esta infraestructura es que la empresa estatal Tragsa está sacando a concurso el aprovisionamiento del material. Esta empresa se encargará directamente de los trabajos sin necesidad de licitación ni adjudicación. El proyecto incluye además la línea eléctrica, que parte de la subestación de Patamulo, y el sistema de telecontrol, que implantará los terminales y cables necesarios para controlar las redes hidráulicas desde la estación.
Según ha podido saber este periódico, la estación de bombeo está pendiente de los últimos trámites económicos y se iniciará antes de que acabe el año. Estas obras, presupuestadas en 12,6 millones de euros, las tenía que haber acometido la Junta, pero finalmente serán financiadas por el Gobierno central a través del Plan Nacional de Regadíos. Aunque en principio se esperaba que los trabajos empezaran la primavera pasada, en junio, la comisión mixta con representantes de ambas administraciones que aprobó definitivamente su ejecución dijo que comenzarían este mes. En este sentido, fuentes de la Comunidad de Regantes han indicado que aún desconocen la fecha en la que se pondrán en marcha.
El último paso será la red de presión, que también había sido encomendada a la Junta y que, al igual que en el caso anterior, hará el Ministerio de Agricultura. Este proyecto, que revisa el Gobierno porque data de principios de los noventa, pondrá en riego las 5.728 hectáreas restantes y su coste se estima en 32,25 millones de euros. Su actualización también estaba anunciada para este otoño.
La delegada ha asegurado que, "aunque vamos muy bien, se produjeron muchas precipitaciones en otoño e invierno que han retrasado las obras, por lo que se va a solicitar una ampliación del plazo de varios meses". Según la representante de la Junta, las tuberías principales y secundarias ya están acabadas, "pero existen piezas especiales que hay que fabricar", que complican todavía más las tareas.
DESDE EL 2001 La red de gravedad afecta a 374 parcelas de 256 agricultores de Santaella y Montalbán, a las que el agua puede llegar impulsada por su propio peso. Cuando estén terminadas estas conducciones, se pondrán en riego un total de 1.417 hectáreas. Su ejecución se ha ido demorando desde que se anunciara su inicio inminente en octubre del 2001. Poco después, la Junta sorprendió a los agricultores exigiéndoles un aval de la cuantía económica que debían aportar (el 60% de 5,6 millones de euros), lo que enfrentó a ambas partes durante meses. La Comunidad de Regantes del Genil-Cabra firmó el aval con Banesto a principios del pasado año y su coste lo asumieron los ayuntamientos de Santaella, Montalbán y La Rambla, terminando así la polémica, lo que permitió que se emprendieran las obras.
La delegada de Agricultura ha insistido en que para que la red de gravedad cumpla su función deben empezar las obras de la estación de bombeo de la Catalineta, que conectará el canal principal, ya realizado, con las tuberías. Las últimas noticias que tiene sobre esta infraestructura es que la empresa estatal Tragsa está sacando a concurso el aprovisionamiento del material. Esta empresa se encargará directamente de los trabajos sin necesidad de licitación ni adjudicación. El proyecto incluye además la línea eléctrica, que parte de la subestación de Patamulo, y el sistema de telecontrol, que implantará los terminales y cables necesarios para controlar las redes hidráulicas desde la estación.
Según ha podido saber este periódico, la estación de bombeo está pendiente de los últimos trámites económicos y se iniciará antes de que acabe el año. Estas obras, presupuestadas en 12,6 millones de euros, las tenía que haber acometido la Junta, pero finalmente serán financiadas por el Gobierno central a través del Plan Nacional de Regadíos. Aunque en principio se esperaba que los trabajos empezaran la primavera pasada, en junio, la comisión mixta con representantes de ambas administraciones que aprobó definitivamente su ejecución dijo que comenzarían este mes. En este sentido, fuentes de la Comunidad de Regantes han indicado que aún desconocen la fecha en la que se pondrán en marcha.
El último paso será la red de presión, que también había sido encomendada a la Junta y que, al igual que en el caso anterior, hará el Ministerio de Agricultura. Este proyecto, que revisa el Gobierno porque data de principios de los noventa, pondrá en riego las 5.728 hectáreas restantes y su coste se estima en 32,25 millones de euros. Su actualización también estaba anunciada para este otoño.