Narbona says Government will support desalination because it is a “promising solution”

Wed, 08/09/2004

Europa Press

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró hoy que el Gobierno impulsará la desalación del agua en España "porque no sólo es una solución para países tercermundistas ni para los archipiélagos, sino que es una solución de futuro que incrementará las posibilidades de obtener agua".
Narbona realizó estas declaraciones durante la visita que realizó hoy a las obras que se están acometiendo en el embalse de Algar, ubicado en la localidad valenciana de Algar de Palancia, en la que presentó el programa de Actuaciones para la Gestión y Utilización del Agua (AGUA) en la Comunidad Valenciana, con el que obtendrá 400 hectómetros cúbicos de agua en los próximos años.
Según dijo la ministra, las actuaciones de este programa que se acometerán en la Comunidad Valenciana "permitirán que haya resultados concretos a partir de 2005, ya que habrá hectómetros de agua disponibles con la ejecución progresiva de estas medidas".
"Se pretende --añadió Cristina Narbona-- más agua en la Comunidad Valenciana mediante la mejora de la eficiencia y optimizando las infraestructuras que ya existen, con actuaciones como la modernización de regadíos, el ahorro y la plena utilización de un patrimonio hidráulico que, sin embargo, no se ha utilizado plenamente".
Al respecto, la titular de Medio Ambiente apuntó que las 105 actuaciones que se llevarán a cabo en las cuencas mediterráneas "han contado con la convalidación de una amplia mayoría en el Parlamento, oponiéndose tan sólo el PP, por lo que hay razones de tipo técnico, normativo y político para desarrollar esta opción".
Respecto a la posibilidad de que en el futuro puedan complementarse las medidas con un trasvase del Ebro o con la construcción del canal Xert-Calig, Narbona señaló que el Gobierno "ejecutará una verdadera política del agua partiendo de los cimientos, es decir, de saber quién y para qué se utiliza el agua", ya que, según añadió, "las confederaciones hidrográficas actualmente pueden ejercer un bajo control público sobre el agua porque nunca se ha dado prioridad a éste, sino a la obra hidráulica".
"Una vez conozcamos el agua que tenemos y que necesitamos, se estudiarán todas las soluciones que consideremos oportunas, pero empezaremos por lo que nos exige la normativa europea, es decir, la optimización de los recursos de las cuencas hidrográficas para que cualquier decisión de futuro se adopte con el máximo rigor", aclaró.
Además, Narbona insistió en la apuesta del Gobierno por la calidad del agua, señalando que en todo el litoral mediterráneo "han aumentado los problemas de contaminación de los acuíferos, así como de las aguas superficiales, por lo que pretendemos que las actuaciones en las cuencas mediterráneas, además de más agua, aporten más calidad y permitan la recuperación de todos los ecosistemas asociados al agua, ya que hemos perdido riqueza ecológica por una mala gestión de las aguas".
En relación a las desaladoras, la ministra afirmó que la planta de Alicante "está correctamente diseñada y parece necesario que complemente las actuaciones de ahorro que se llevarán a cabo", aunque indicó que del conjunto de actuaciones que se ejecutarán en las cuencas mediterráneas "tan sólo se contemplan 20 plantas desaladoras".
En este sentido, afirmó que el Ministerio de Medio Ambiente "exigirá de las futuras plantas y de la ampliación de las existentes que cumplan los requerimientos ambientales que ya están cumpliendo muchas plantas en nuestro país". Respecto a su consumo energético, Narbona destacó el avance que están experimentando las tecnologías "lo que permite que se asocien las energías renovables a la desalación".
EMBALSE DE ALGAR
La ministra de Medio Ambiente también hizo referencia a las obras que se están desarrollando en el embalse de Algar y que está previsto finalicen en junio de 2005, las cuales cuentan con un presupuesto de 1,8 millones de euros y permitirán completar los elementos necesarios para la gestión de la presa.
Al respecto, Narbona significó que este proyecto "estaba perfectamente diseñado en 1993 y acabado en el año 2000, pero no se desarrolló plenamente porque no parecía importar demasiado, lo que ha provocado la pérdida de 25 hectómetros cúbicos de agua en los últimos 4 años por la falta de inversión en el pleno funcionamiento de la obra".
"Con la construcción de las compuertas de este embalse, que ya se están ejecutando, tendremos más agua para los regantes de la acequia de Sagunto y para los acuíferos y permitirán que dispongamos de esos caudales que hasta ahora se han desperdiciado", concluyó la ministra.