Dark waters challenge Fluvià river

Wed, 09/06/2004

La Vanguardia

Un verdadero desastre ecológico de magnitud preocupante.' Así califica Jaume Solà, director de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) el vertido de 25.000 litros de fuel al Fluvià, que afecta un tramo de 2,5 kilómetros del río a su paso por Beuda (Garrotxa). La rápida intervención de la unidad de emergencias del ACA, que recibió la alerta a primera hora de la mañana del lunes, impidió que el fuel se desplazara más allá de la presa de Serinyà, pero no pudo evitar que la mancha negra se apoderase de la vegetación, guijarros y un tramo importante de la reserva de fauna salvaje del Fluvià, en la que hace poco tiempo se reintrodujo una colonia de nutrias de las que no se tiene conocimiento desde el vertido de fuel.
Aunque todavía no han aparecido peces y otros animales muertos, los agentes rurales que trabajan en la zona se han mostrado pesimistas y temen encontrar debajo de la capa del combustible el letal resultado del líquido contaminante. 'De momento sólo ha aparecido alguna serpiente de agua afectada, pero habrá que esperar unos días para conocer el impacto real sobre la fauna y la flora', declaró el subinspector del cuerpo rural de Girona, Ignasi de Dalmases. Por otra parte, los municipios del tramo afectado están en alerta y pendientes de los análisis del agua potable. Según Solà, no tiene por qué haber ningún problema con el agua de abastecimiento domiciliario 'ya que en estos 2,5 kilómetros entre Beuda y Serinyà no hay ninguna derivación de aguas superficiales'.
El Departament de Medi Ambient ha anunciado que se presentará como acusación particular en este caso, que ya ha llegado a manos del juzgado de guardia de Olot. En este sentido, para Gabriel Jover, director de los servicios territoriales de Medi Ambient en Girona, lo preocupante es la posible negligencia cometida por la empresa que provocó el vertido, la central Confirel (La Confianza y Relsa), que suministra electricidad a la empresa papelera La Confianza, de Besalú. El origen de la catástrofe ecológica fue la avería en un depósito de fuel que permitió la fuga del carburante. El ACA tuvo conocimiento del incidente nueve horas después de que se produjera, por lo que la Generalitat solicitará el listado de las llamadas de la empresa Confirel para saber si se cometió 'una falta grave' al no avisar con prontitud a los servicios de emergencia del vertido de fuel al río. Si se prueba que se produjo una infracción penal, el caso llegará a la fiscalía de Medi Ambient.
En una imagen que remite a las arduas labores de los miles de voluntarios que lucharon contra el chapapote en Galicia, una treintena de efectivos del ACA, Protección Civil y agentes rurales trabajan extrayendo el carburante, que en algunos puntos alcanza un espesor de siete centímetros. Se han instalado cuatro barreras de contención y la central hidroeléctrica de Serinyà, situada más abajo de la última barrera, está captando el máximo caudal de agua para impedir que el vertido salte su presa. De momento se han extraído unos 17.000 litros de fuel del agua, pero las labores de limpieza durarán varias semanas más