EU suggests an investment of 100 million to protect the river
Tue, 08/06/2004
Una nueva iniciativa de la Unión Europea (UE) para proteger el estuario del Guadalquivir obligará a multimillonarias inversiones en depuración de aguas residuales en, al menos, las dos próximas legislaturas. Así lo anunció ayer el secretario general de Aguas de la Junta de Andalucía, Joan Corominas, quien en el transcurso del Forum Provincial del Agua dio cuenta de la petición de Bruselas de declarar zona sensible a la contaminación el tramo de río que discurre desde la presa de Alcalá del Río hasta Sanlúcar de Barrameda. Están muy preocupados por la calidad del agua del estuario y nos han pedido esta especial protección , afirmó.
Esta solicitud de la UE, que se debe ratificar en un expediente a elaborar por la Consejería de Medio Ambiente, significa de facto la obligación de mejorar los sistemas de depuración de aguas residuales de Sevilla y su área metropolitana, un millón cuatrocientos mil habitantes en números redondos que vierten diariamente 250.000 metros cúbicos de agua al Guadalquivir.
Desde hace años, las empresas abastecedoras de la capital y su corona de influencia (fundamentalmente Emasesa y Aljarafesa, pero también el Consorcio del Huesna) se jactan, y con razón, de haber liderado la instalación de sistemas de depuración en las grandes conurbaciones de España. Ahora, y en virtud de esta reclamación de la siempre vigilante Bruselas, tendrán que dar un paso más para dotar a sus plantas depuradoras (EDAR), una decena en el tramo de río afectado, de sistemas terciarios de tratamiento de agua. A grandes líneas, Emasesa, Aljarafesa y Huesna realizan dos procesos sobre las aguas residuales urbanas: el primario, que permite eliminar en torno al 40 por ciento de la materia contaminante, y el secundario, que eleva el nivel de eficacia hasta entre el 80 y el 90 por ciento. El tratamiento terciario al que obliga la declaración del estuario como zona sensible permite devolver al agua a la naturaleza prácticamente con un nivel de contaminación cero, al eliminar los nutrientes, fundamentalmente los compuestos nitrogenados y los derivados del fósforo.
No obstante, el problema de fondo es, como casi siempre, económico. Después de escuchar las palabras de Corominas, los distintos ponentes del Forum Provincial del Agua destacaron lo costoso de este tratamiento terciario. Los primeros, y aún muy embrionarios, cálculos de la Consejería de Medio Ambiente cifran en unos 70 ó 80 euros por habitante la inversión necesaria para reformar la decena de EDAR afectadas. Multiplicando esta cantidad por el millón largo de personas abastecidas, el coste total es abrumador: casi 100 millones de euros. Supera con mucho la capacidad de inversión de la Consejería de Medio Ambiente , reconoció el secretario general de Aguas. Parece claro que, de andarse este camino, deberá ser con el apoyo financiero de las propias empresas abastecedoras e incluso de Europa. También a un largo plazo: no menos de dos legislaturas.
De manera mucho más inmediata, y una vez asumidas las competencias de agua, la Consejería de Medio Ambiente también quiere completar la instalación de depuradoras de aguas residuales en todos los municipios de Sevilla con más de 2.000 habitantes. Según explicó la consejera Fuensanta Coves, en estos momentos 33 localidades sevillanas, con una población estimada de 215.000 personas, vierten directamente sus aguas residuales a los ríos, una circunstancia que colisiona directamente con la directiva de la UE que obliga a depurar estos aportes a finales de 2005. En el seno del Forum Provincial del Agua, la titular de Medio Ambiente se comprometió a financiar las obras necesarias en el transcurso de esta legislatura, lo que supone alrededor de 200 millones de euros a corto plazo y hasta 600 a medio y corto plazo. La Sierra Norte, la Sierra Sur y la Campiña serán las principales zonas receptoras de estos fondos por ser precisamente la que presentan una situación de partida más deficiente.
Además de estas actuaciones en materia de saneamiento y depuración, Medio Ambiente también prevé otras inversiones en mejora y ampliación de las redes de distribución del agua en alta (del embalse hasta la empresa abastecedora). En este caso, y conforme aseguró ayer el subdirector de la Secretaría General de Aguas, se beneficiarían todos los sistemas de abastecimiento de Sevilla
Esta solicitud de la UE, que se debe ratificar en un expediente a elaborar por la Consejería de Medio Ambiente, significa de facto la obligación de mejorar los sistemas de depuración de aguas residuales de Sevilla y su área metropolitana, un millón cuatrocientos mil habitantes en números redondos que vierten diariamente 250.000 metros cúbicos de agua al Guadalquivir.
Desde hace años, las empresas abastecedoras de la capital y su corona de influencia (fundamentalmente Emasesa y Aljarafesa, pero también el Consorcio del Huesna) se jactan, y con razón, de haber liderado la instalación de sistemas de depuración en las grandes conurbaciones de España. Ahora, y en virtud de esta reclamación de la siempre vigilante Bruselas, tendrán que dar un paso más para dotar a sus plantas depuradoras (EDAR), una decena en el tramo de río afectado, de sistemas terciarios de tratamiento de agua. A grandes líneas, Emasesa, Aljarafesa y Huesna realizan dos procesos sobre las aguas residuales urbanas: el primario, que permite eliminar en torno al 40 por ciento de la materia contaminante, y el secundario, que eleva el nivel de eficacia hasta entre el 80 y el 90 por ciento. El tratamiento terciario al que obliga la declaración del estuario como zona sensible permite devolver al agua a la naturaleza prácticamente con un nivel de contaminación cero, al eliminar los nutrientes, fundamentalmente los compuestos nitrogenados y los derivados del fósforo.
No obstante, el problema de fondo es, como casi siempre, económico. Después de escuchar las palabras de Corominas, los distintos ponentes del Forum Provincial del Agua destacaron lo costoso de este tratamiento terciario. Los primeros, y aún muy embrionarios, cálculos de la Consejería de Medio Ambiente cifran en unos 70 ó 80 euros por habitante la inversión necesaria para reformar la decena de EDAR afectadas. Multiplicando esta cantidad por el millón largo de personas abastecidas, el coste total es abrumador: casi 100 millones de euros. Supera con mucho la capacidad de inversión de la Consejería de Medio Ambiente , reconoció el secretario general de Aguas. Parece claro que, de andarse este camino, deberá ser con el apoyo financiero de las propias empresas abastecedoras e incluso de Europa. También a un largo plazo: no menos de dos legislaturas.
De manera mucho más inmediata, y una vez asumidas las competencias de agua, la Consejería de Medio Ambiente también quiere completar la instalación de depuradoras de aguas residuales en todos los municipios de Sevilla con más de 2.000 habitantes. Según explicó la consejera Fuensanta Coves, en estos momentos 33 localidades sevillanas, con una población estimada de 215.000 personas, vierten directamente sus aguas residuales a los ríos, una circunstancia que colisiona directamente con la directiva de la UE que obliga a depurar estos aportes a finales de 2005. En el seno del Forum Provincial del Agua, la titular de Medio Ambiente se comprometió a financiar las obras necesarias en el transcurso de esta legislatura, lo que supone alrededor de 200 millones de euros a corto plazo y hasta 600 a medio y corto plazo. La Sierra Norte, la Sierra Sur y la Campiña serán las principales zonas receptoras de estos fondos por ser precisamente la que presentan una situación de partida más deficiente.
Además de estas actuaciones en materia de saneamiento y depuración, Medio Ambiente también prevé otras inversiones en mejora y ampliación de las redes de distribución del agua en alta (del embalse hasta la empresa abastecedora). En este caso, y conforme aseguró ayer el subdirector de la Secretaría General de Aguas, se beneficiarían todos los sistemas de abastecimiento de Sevilla