The Government can not solve the water deficit in Mediterranean Coast

Sat, 22/05/2004

ABC

La mayoría de las actuaciones en las cuencas del Júcar y el Segura ya se encuentran recogidas en el PHN, y muchas de ellas ya están incluso ejecutadas o en marcha

MADRID. Mucho han cambiado las cosas desde el anteproyecto del Plan Hidrológico Nacional de 1993 en el que se establecía un déficit hídrico de 3.700 hectómetros cúbicos año a cubrir de la mano de nada más y nada menos que trece trasvases. Han pasado más de diez años y la propia ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró en su entrevista a ABC que ese «Plan Hidrológico era el que en ese momento se derivaba de lo que era la política convencional del agua en España». De acuerdo. Pero también dijo que la alternativa que presentan ahora «es algo que hemos decidido en el PSOE hace tres años», en respuesta a los que piensan que es un «peaje» a Esquerra Republicana de Cataluña.

Sin embargo, los cambios realizados en su plan desde que asumieron las tareas de Gobierno no reflejan precisamente que fuera una alternativa cerrada hace tres años. Ya no sólo porque en este tiempo ese plan se ha encarecido en más de 1.200 millones de euros a pesar de reducir la obtención de agua en 70 hectómetros cúbicos o, más recientemente, porque en su primera interpelación en el Congreso de los Diputados el pasado día 12 introdujo variaciones respecto a los documentos que había entregado a los presidentes de Comunidad Valenciana y Murcia apenas dos semanas antes, sino porque su plan siempre fue presentado como una alternativa al trasvase del Ebro, y no al Plan Hidrológico Nacional en su conjunto.

Hacen falta 1.105 hectómetros más

Esa alternativa se basaba, y se basa, en la desalación, la reutilización de aguas depuradas y la modernización de infraestructuras y regadíos. Actuaciones en las que precisamente se basan la mayor parte de las infraestructuras y obras recogidas en el anexo de inversiones del Plan Hidrológico Nacional y que pretenden recuperar recursos hídricos, en el caso de las cuatro cuencas del arco mediterráneo, por un montante de 1.105 hectómetros cúbicos al año. Una cantidad de agua adicional a los 1.000 hectómetros cúbicos año (1.050 en origen) que se pretendían transferir desde el Ebro. Y es que, aunque se haya querido reducir el PHN al trasvase del Ebro, éste es su piedra angular pero no lo es todo. Entre otras cosas, porque el déficit de agua en las cuencas receptoras del trasvase no es de 1.000 hectómetros cúbicos, sino que asciende a 2.105 hectómetros cúbicos, según los estudios realizados por los propios técnicos del Ministerio de Medio Ambiente.

El hecho de que la alternativa presentada por el Gobierno actual para el arco mediterráneo se articule en torno a actuaciones casi todas ellas recogidas en ese anexo de inversiones del PHN, lleva a la siguiente pregunta: ¿De dónde se obtendrán entonces los 1.105 hectómetros cúbicos que, además de los 1.000 contemplados en el trasvase, necesitan las cuencas Internas de Cataluña, Júcar, Segura y Sur? La última revisión de la alternativa socialista habla de recuperar 1.058 hectómetros cúbicos, pero de 58 hectómetros adicionales a 1.105 el déficit resulta patente. Cómo se cubrirá este desfase es ahora la pregunta. La respuesta de un responsable de la Administración anterior es clara: «No se cubrirá, no se pueden contar los hectómetros dos veces. Está claro que para el actual Gobierno el déficit ha pasado de 3.700 hectómetros cúbicos hace diez años a sólo unos 1.000, aunque los estudios técnicos no dicen lo mismo».

Y es que sólo las obras nuevas que plantean podrán dar algo de agua adicional, pero éstas son las menos. La duplicidad en las obras de la alternativa al trasvase y del PHN ya había sido denunciada por los presidentes de la Generalitat Valenciana y de Murcia tras la reunión mantenida con la ministra de Medio Ambiente. Un simple vistazo a ambos listados revela que de las 34 actuaciones recogidas en la alternativa del PSOE para la cuenca del Segura (Murcia y Alicante) al menos 26 ya estaban recogidas en el anexo de inversiones del PHN para obtener recursos a restar de la cuenta de los 1.105 hectómetros, no de la del trasvase.

De las actuaciones recogidas para la Comunidad Valenciana, al menos 30 están en el PHN, muchas ya ejecutadas o en marcha, y otras cuatro están previstas o ya ejecutadas por diferentes planes de la Generalitat Valenciana. Por ejemplo, de las cinco actuaciones en desaladoras proyectadas en esta Comunidad, sólo la de la Marina Baja es nueva, y aportaría unos 20 hectómetros cúbicos al año, si bien desde la Generalitat se asegura que «las necesidades de abastecimiento en esta zona están adecuadamente garantizadas por la conducción Júcar-Vinalopó».

Además, según fuentes del anterior equipo responsable del Ministerio,gran parte de las obras de «cierta entidad», superiores a 50 millones de euros, ya tenían asignados fondos europeos, y otras obras más pequeñas ya tenían certificada su inversión de acuerdo a los diferentes programas operativos.