Manuel Toharia questions the feasibility of Ebro transfer
Wed, 12/05/2004
El director del museo de las Ciencias dice que el mensaje del «PP genera especulación»
Efe, Murcia
El director del museo de las Ciencias Príncipe Felipe de Valencia, Manuel Toharia, dijo ayer en Murcia que el problema del agua «se ha politizado mucho y hemos dejado de hablar de cuestiones técnicas y científicas, y hemos empezado a hablar de política, o sea, el PP a favor del agua y el PSOE en contra».
Toharia, que hizo estas declaraciones antes de pronunciar la conferencia El papel de los museos en la conservación y divulgación de la Ciencia, afirmó que habría que buscar soluciones mixtas a la falta de agua, satisfactorias para todos. Dejemos que hablen los técnicos y que den una solución para todo el campo.
Este experto manifestó que «ni el PSOE quiere matar de sed a nadie, ni el PP va a traer seguro el agua en los años que no llueva» y añadió que este es un país «demasiado de hinchas y a lo mejor hay que empezar a pensar que tenemos que ser colaboradores o complementarios unos de otros».
Manuel Toharia indicó que con el PHN «se ha vendido el mensaje de que el agua del Ebro sobra siempre, y que se va a traer para acá, y que vamos a hacer muchas cosas con ella», y agregó que lo que no han dicho es que «el tubo carísimo se haría aún cuando los años de mucha necesidad no pudiéramos traer agua», ya que como ocurrió a principios de los 90 la sequía fue generalizada.
El citado mensaje, a su juicio, «genera una especulación al hacer pensar que habrá mucha agua con la que se podrán hacer muchas cosas que ahora no se pueden hacer como urbanizaciones y campos de golf, y todo aquello que da dinero, no regar tomates, que no dan dinero, que están subvencionados; porque si se regaran a precio de coste del agua que no hay aquí, entonces serían inviables».
Al respecto, apuntó que el desarrollo que generaría el volumen de agua trasvasada «es pan para hoy y hambre para mañana».«Tenemos un país donde el agua no abunda ni abundará nunca, y donde además la malgastamos, por ello ¿no será mejor pensar en políticas de mejor aprovechamiento, de desalación donde se pueda, es decir, al borde del mar, y a lo mejor hacer pequeños trasvases cuando haya realmente un déficit enorme, pero con proximidad, para que no sean costosos?», manifestó.
Indicó que España es un país «de contrastes climáticos tan acusados que cuando hay mucha sequía, la hay en todas partes, incluido el Ebro, y ¿qué haremos justo cuando más falta hará el agua?», se preguntó, y reiteró que la solución «es difícil cuando se politiza porque están por medio los votos y el poder».«Es verdad que casi siempre sobra agua en el Ebro, pero probablemente en los años más secos no sobre y esos son cuando más falta hará en Valencia y Murcia», aseveró. A su juicio, «es un problema muy serio, en el fondo, lo que pasa es que como no tengo agua, quiero que me traigan, pero ¿quién decide que sobra el agua?. Es muy complicado y científicamente no está nada claro».
«Lo divertido, añadió, es que el PSOE tenía en su plan hidrológico un trasvase del Ebro, un trasvase superior al del PP».
Efe, Murcia
El director del museo de las Ciencias Príncipe Felipe de Valencia, Manuel Toharia, dijo ayer en Murcia que el problema del agua «se ha politizado mucho y hemos dejado de hablar de cuestiones técnicas y científicas, y hemos empezado a hablar de política, o sea, el PP a favor del agua y el PSOE en contra».
Toharia, que hizo estas declaraciones antes de pronunciar la conferencia El papel de los museos en la conservación y divulgación de la Ciencia, afirmó que habría que buscar soluciones mixtas a la falta de agua, satisfactorias para todos. Dejemos que hablen los técnicos y que den una solución para todo el campo.
Este experto manifestó que «ni el PSOE quiere matar de sed a nadie, ni el PP va a traer seguro el agua en los años que no llueva» y añadió que este es un país «demasiado de hinchas y a lo mejor hay que empezar a pensar que tenemos que ser colaboradores o complementarios unos de otros».
Manuel Toharia indicó que con el PHN «se ha vendido el mensaje de que el agua del Ebro sobra siempre, y que se va a traer para acá, y que vamos a hacer muchas cosas con ella», y agregó que lo que no han dicho es que «el tubo carísimo se haría aún cuando los años de mucha necesidad no pudiéramos traer agua», ya que como ocurrió a principios de los 90 la sequía fue generalizada.
El citado mensaje, a su juicio, «genera una especulación al hacer pensar que habrá mucha agua con la que se podrán hacer muchas cosas que ahora no se pueden hacer como urbanizaciones y campos de golf, y todo aquello que da dinero, no regar tomates, que no dan dinero, que están subvencionados; porque si se regaran a precio de coste del agua que no hay aquí, entonces serían inviables».
Al respecto, apuntó que el desarrollo que generaría el volumen de agua trasvasada «es pan para hoy y hambre para mañana».«Tenemos un país donde el agua no abunda ni abundará nunca, y donde además la malgastamos, por ello ¿no será mejor pensar en políticas de mejor aprovechamiento, de desalación donde se pueda, es decir, al borde del mar, y a lo mejor hacer pequeños trasvases cuando haya realmente un déficit enorme, pero con proximidad, para que no sean costosos?», manifestó.
Indicó que España es un país «de contrastes climáticos tan acusados que cuando hay mucha sequía, la hay en todas partes, incluido el Ebro, y ¿qué haremos justo cuando más falta hará el agua?», se preguntó, y reiteró que la solución «es difícil cuando se politiza porque están por medio los votos y el poder».«Es verdad que casi siempre sobra agua en el Ebro, pero probablemente en los años más secos no sobre y esos son cuando más falta hará en Valencia y Murcia», aseveró. A su juicio, «es un problema muy serio, en el fondo, lo que pasa es que como no tengo agua, quiero que me traigan, pero ¿quién decide que sobra el agua?. Es muy complicado y científicamente no está nada claro».
«Lo divertido, añadió, es que el PSOE tenía en su plan hidrológico un trasvase del Ebro, un trasvase superior al del PP».