The sanitation works of Ego river vbetween Urkizu y Ermua will begin in June
Tue, 11/05/2004
La construcción de colectores de aguas residuales y ampliación del cauce ha sido adjudicada en 10,2 millones de euros y se prolongará durante dos años
R. Z./EIBAR RÍO DEGRADADO. Un hombre mira desde Amaña el discurrir de las aguas del Ego. / M.E.
Las obras de saneamiento y construcción de los colectores separadores de aguas residuales en el río Ego a su paso por Eibar se iniciarán el próximo mes y se prolongarán luego por espacio de dos años. El Gobierno vasco ha adjudicado a la empresa Amenabar-Ubiri la realización de estos trabajos, que tienen como objetivo último la depuración del cauce del río. La obra salió a licitación en 12 millones de euros y ha quedado adjudicada en algo más de 10,2 millones de euros (unos 1.700 millones de pesetas).
Representantes del Gobierno vasco se reunieron la pasada semana con técnicos del Ayuntamiento de Eibar para informarles del proceso iniciado, de las actuaciones que será necesario llevar a cabo y de las afecciones que tendrán las obras tanto en el interior del cauce como en el exterior.
El principal problema que se plantea ahora es determinar los lugares en lo que resultará necesario abrir vías de acceso al río desde el casco urbano, ya que la mayor parte de los trabajos no serán visibles para los vecinos dado que se efectuarán en el interior del cauce, la mayor parte del cual discurre oculto a su paso por Eibar.
En todo caso, la localidad cuenta ya con una experiencia previa, pues tras las inundaciones de 1988 se procedió a sanear el cauce y dotarle de colectores en el tramo de río comprendido entre el parque de Urkizu y Azitain. Con la obra que ahora se va a iniciar se pretende, precisamente, completar desde Urkizu hasta el límite con Vizcaya, frente a la Universidad Laboral, la red de colectores.
Dichos colectores son canalizaciones que se construyen en una de las márgenes del río y que recogen las aguas fecales y residuales. A través del colector esas aguas llegan hasta la depuradora que se construye en Apraiz, en Elgoibar, donde son saneadas y devueltas al río. De esa forma se garantiza la limpieza del cauce.
Empezar por Ibur Erreka
La idea transmitida por el Gobierno vasco a los técnicos municipales es la de iniciar las obras a partir del límite con Vizcaya, en la confluencia con la regata de Ibur Erreka, y luego ir descendiendo hasta llegar a Urkizu. Para ello será necesario abrir en varios puntos de Eibar unos 'agujeros' desde los que entrarán al río las máquinas y los operarios.
Además de la citada obra de la red de colectores entre Urkizu y Azitain, está ya también construida la red separadora desde Azitain hasta Elgoibar. Quedaría pendiente, para completar el saneamiento del Deba habilitar algunos tramos de la red separadora en la zona de Soraluze y en el inicio de la cuenca del Ego, a través del término municipal de Ermua.
Antes de que den comienzo las obras en el cauce a través de Eibar, el Gobierno vasco pretende dar a conocer a la opinión pública cuál será el proceso a seguir y las repercusiones que tendrán estas obras debido a su importancia y envergadura, así como de su trascendencia para garantizar en el futuro la limpieza de la cuenca del Deba, considerada como la más deteriorada de Guipúzcoa.
R. Z./EIBAR RÍO DEGRADADO. Un hombre mira desde Amaña el discurrir de las aguas del Ego. / M.E.
Las obras de saneamiento y construcción de los colectores separadores de aguas residuales en el río Ego a su paso por Eibar se iniciarán el próximo mes y se prolongarán luego por espacio de dos años. El Gobierno vasco ha adjudicado a la empresa Amenabar-Ubiri la realización de estos trabajos, que tienen como objetivo último la depuración del cauce del río. La obra salió a licitación en 12 millones de euros y ha quedado adjudicada en algo más de 10,2 millones de euros (unos 1.700 millones de pesetas).
Representantes del Gobierno vasco se reunieron la pasada semana con técnicos del Ayuntamiento de Eibar para informarles del proceso iniciado, de las actuaciones que será necesario llevar a cabo y de las afecciones que tendrán las obras tanto en el interior del cauce como en el exterior.
El principal problema que se plantea ahora es determinar los lugares en lo que resultará necesario abrir vías de acceso al río desde el casco urbano, ya que la mayor parte de los trabajos no serán visibles para los vecinos dado que se efectuarán en el interior del cauce, la mayor parte del cual discurre oculto a su paso por Eibar.
En todo caso, la localidad cuenta ya con una experiencia previa, pues tras las inundaciones de 1988 se procedió a sanear el cauce y dotarle de colectores en el tramo de río comprendido entre el parque de Urkizu y Azitain. Con la obra que ahora se va a iniciar se pretende, precisamente, completar desde Urkizu hasta el límite con Vizcaya, frente a la Universidad Laboral, la red de colectores.
Dichos colectores son canalizaciones que se construyen en una de las márgenes del río y que recogen las aguas fecales y residuales. A través del colector esas aguas llegan hasta la depuradora que se construye en Apraiz, en Elgoibar, donde son saneadas y devueltas al río. De esa forma se garantiza la limpieza del cauce.
Empezar por Ibur Erreka
La idea transmitida por el Gobierno vasco a los técnicos municipales es la de iniciar las obras a partir del límite con Vizcaya, en la confluencia con la regata de Ibur Erreka, y luego ir descendiendo hasta llegar a Urkizu. Para ello será necesario abrir en varios puntos de Eibar unos 'agujeros' desde los que entrarán al río las máquinas y los operarios.
Además de la citada obra de la red de colectores entre Urkizu y Azitain, está ya también construida la red separadora desde Azitain hasta Elgoibar. Quedaría pendiente, para completar el saneamiento del Deba habilitar algunos tramos de la red separadora en la zona de Soraluze y en el inicio de la cuenca del Ego, a través del término municipal de Ermua.
Antes de que den comienzo las obras en el cauce a través de Eibar, el Gobierno vasco pretende dar a conocer a la opinión pública cuál será el proceso a seguir y las repercusiones que tendrán estas obras debido a su importancia y envergadura, así como de su trascendencia para garantizar en el futuro la limpieza de la cuenca del Deba, considerada como la más deteriorada de Guipúzcoa.