El Gobierno central deberá financiar las obras de los planes de regadío con aguas depuradas proyectados en las Pitiüses. El organismo central deberá reclamar al Govern balear la disponibilidad de los terrenos para realizar las obras.
El desarrollo de los diferentes planes de regadío para el aprovechamiento de las aguas depuradas en las depuradoras de las Pitiüses están pendientes del impulso del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). Un convenio firmado a principios de este año entre el Govern balear y el organismo ministerial establece que este último se encargará de realizar las obras (construcción de depósitos y balsas, así como de las canalizaciones), mientras que el Ejecutivo regional deberá comprar el terreno para ubicar las infraestructuras.
El Govern está gestionando la adquisición de un solar cerca de la depuradora de Formentera para ubicar el depósito de agua del futuro plan de regadío con aguas depuradas. De esta forma se da el primer paso para la culminación de uno de los cinco proyectos de aprovechamiento de esas aguas para riegos agrícolas existentes en las Pitiüses.
Estos cinco planes (dos en Sant Antoni, uno en Sant Jordi y Platja d´en Bossa, otro en es Pla de Vila y el de Formentera) se incluyeron en su día en el Plan Hidrológico Nacional, es decir, el conjunto de obras planificadas para mejorar el aprovechamiento de los recursos hídricos y que a su vez deberían financiarse con fondos europeos.
El convenio entre el Govern y el Gobierno se firmó en enero, cuando ambos organismos estaban gobernados por el PP, pero hasta la fecha, la única gestión que se ha llevado a cabo es la visita al terreno de Formentera, aunque la compra todavía no se ha formalizado, según fuentes de la conselleria de Agricultura.
El MAPA, ahora gobernado por el PSOE, deberá comunicar al Govern cuándo quiere empezar alguna de estas obras.
El plan de Formentera es, por tanto, el más avanzado y será el primero en llevarse a la práctica. Los demás están muy retrasados, puesto que todavía no se ha empezado a gestionar la compra de los terrenos en los que deben ubicarse las diferentes infraestructuras