La Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Medio Ambiente, sancionará a la UTE Cabreiros que ejecuta las obras de la autovía entre Ferrol y Vilalba, si se confirma que la muerte de peces registrada en el río Eume y debida a la excesiva acidez del agua, está vinculada a vertidos procedentes de las obras.
El director xeral de Desenvolvemento Sostible de la Consellería de Medio Ambiente, Emilio Fernández, tras realizar hoy una visita al embalse de Goente (A Coruña) aseguró que el expediente iniciado el 19 de abril por el ente Augas de Galicia analiza la responsabilidad de la UTE que ejecuta el tramo de la autovía y del que podrían proceder los vertidos que llegaron a los ríos Chamoselos y Lavadoiro, que se consideran causantes del aumento de la acidez del agua y de la reducción de su PH.
La UTE, formada por una empresa del Grupo Puentes y la compañía Viviendas y Cerramientos S.A., podría enfrentarse a una sanción económica que podría ascender hasta los 600.000 euros, en el supuesto de mayor gravedad de delito medio ambiental, según la cifra apuntada hoy desde Augas de Galicia.
"La consellería va a utilizar todos los mecanismos de sanción que tenga, evidentemente no podemos sancionar por encima de lo que la propia ley indica, pero tampoco por debajo. Es suficientemente grave el problema para que evidentemente no pase desapercibida esta situación que estamos a vivir", aseguró Emilio Fernández.
Según Medio Ambiente, la UTE pudo no haber adoptado las medidas correctoras necesarias para evitar que los minerales de componente ácido dejados al descubierto por las obras, se filtrasen hacia el río y provocasen una reducción brusca del PH. La mayor acidez del agua del río que atraviesa el parque natural Fragas do Eume, habría causado la muerte masiva de reos, peces vinculados a los salmónidos.
Emilio Fernández recordó que en la declaración de impacto ambiental aprobada para la construcción del tramo de la autovía obligaba a que el vertido de aguas al río no tuviese un PH menor de 5,5 unidades. Sin embargo, en el afluente Chamoselo se llegaron a detectar valores de 3 a 3,5 unidades, lo que habría provocado una "situación delicada" para el río Eume, cuyo PH debe situarse entre los 6 y los 6'5 puntos.
ADICIÓN DE CARBONATO CÁLCICO
Para solventar el problema creado, desde el lunes, un equipo de 12 personas, entre técnicos de la Consellería de Medio Ambiente y de la empresa Sogarisa, desarrolla un operativo de adición de carbonato cálcico al río Eume, con el objetivo de elevar el PH del agua. En el día de hoy, ya se situaba en 5,4 unidades.
La recuperación de la masa de agua es, según apuntó Fernández, "progresiva y constante", pero "lenta", ya que la técnica adoptada es "la opción más conservadora". "Estamos jugando con todas las máximas precauciones, antes de pasarnos, preferimos quedarnos cortos", añadió.
La adición de carbonato cálcico, ascenderá en una primera fase a 1.000 toneladas aunque se podría ampliar, si los técnicos de Medio Ambiente lo consideran preciso, hasta las 2.000. Emilio Fernández incidió en que se trata de una técnica que, aunque no tiene antecedentes en Galicia, es "relativamente frecuente en embalses y lagos afectados por lluvia ácida".
La Xunta de Galicia invierte aproximadamente un millón de euros en la actuación que se desarrollará a lo largo del río, cantidad a la que se suma la inversión prevista de 1,7 millones de euros para crear redes de drenaje en el polígono de Os Airíos de As Pontes, para evitar el movimiento de aguas ácidas hacia al río. De modo simultáneo, Cabreiros UTE acometerá los trabajos de impermeabilización necesarios en el entorno de las obras.
Las tareas de adición de carbonato cálcico se extenderán "todo lo que sea necesario", según apuntó Fernández. La Consellería prevé además que en pocos días pueda ya estar en funcionamiento la boya instalada en el río Eume y que ofrecerá datos públicos cada diez minutos de la acidez y del PH del agua.